martes, 11 de abril de 2017

Los misterios de la Antártida


En la misteriosa Antártida, con sus 14 millones de kilómetros cuadrados de hielo profundo y desolado que cubren el continente, han intrigado a generaciones de historiadores.

El 61% del agua dulce en la Tierra está congelada dentro de esta enorme capa de hielo, sin embargo, no ha habido ninguna razón para creer que formas de vida han residido allí.

Hace poco investigamos también el triángulo de las Bermudas, aquí encontraras todo al respecto. 



En 2016, un equipo de investigadores estadounidenses y europeos afirmó haber encontrado pruebas de una antigua civilización antártica. Informaron de tres pirámides de cuatro lados con forma precisa que sobresalían a través de la tundra.


Los expertos en conspiraciones en línea pronto localizaron la imagen de Google Earth de estas estructuras para su análisis.

Pronto, un video colgado en Youtube afirmó que estas pirámides eran el trabajo de una civilización antigua, olvidada hace tiempo, cuya existencia finalmente estaba siendo revelada al mundo.


Desde 2009, la misión de la NASA, IceBridge Mission, ha producido imágenes de los casquetes polares para investigar lo que hay debajo, incluyendo aquellos que ahora parecen probar asentamientos humanos enterrados. Recientes descubrimientos científicos indican que la Antártida pudo haber sido habitada una vez.

En 2009 un equipo de ciencia climática descubrió partículas de polen en el continente. Concluyeron que las plantas tropicales incluyendo palmas y el baobab crecieron una vez allí, con temperaturas que alcanzaban máximos de 21 grados centígrados.

Luego, en el 2012, investigadores del Instituto de Investigación del Desierto de Nevada recolectaron muestras de 32 cepas bacterianas de un lago ubicado en la Antártida Oriental. 

Esto es consistente con las teorías de que el continente fue una vez hogar de numerosas formas de vida biológica. Esto abre la posibilidad de que los asentamientos humanos una vez existieron allí también.

El periodista Christopher Condon cree que la Antártida podría ser la antigua ciudad de la Atlántida.

Primero discutido en los escritos del filósofo griego Platón, la Atlántida se describió como centro cultural a través de la antigüedad, hasta su obliteración a través del desastre natural en el 10,000 AC. 

Además, la mitología nativa americana dice que sus antepasados originales, venían de "Aztlán", y provenían de una "isla blanca" no identificada que fue borrada por un flagelo de desastres naturales. La pirámide podría ser parte de este legendario complejo histórico.

Estas afirmaciones también son apoyadas por las conclusiones del historiador Profesor Charles Hapgood. Hapgood teorizó que el continente era hogar de una civilización antigua, que escapó o pereció cuando los desastres naturales obligaron a estas poblaciones a huir o perecer.

Hapgood explicó la ausencia de evidencia material para tal civilización con su teoría del desplazamiento de la corteza. Esto postula que cada 20 a 30 mil años, la corteza entera de la Tierra cambia. Supuestamente, el cambio más reciente tuvo lugar hace 12,000 años, y movió la Antártida a la Zona Polar Sur. 

La fuerza e intensidad de esta reubicación dio lugar a que los asentamientos existentes quedaran enterrados bajo gruesas capas de hielo.

La evidencia geológica para esta teoría viene del cambio natural de los polos magnéticos de la Tierra, que no han estado siempre en sus localizaciones actuales de hoy en día.

Esto supuestamente explicó la diferencia en el grosor de la capa de hielo entre dos porciones de la Antártida. Según los cálculos de Hapgood, una capa tenía 40.000 años más de desarrollada. Es importante destacar que Hapgood fue muy respetado entre sus compañeros de profesión.

Uno de sus primeros partidarios fue Albert Einstein, quien solicitó al presidente estadounidense Eisenhower que financiara la investigación sobre esta teoría. Eisenhower dejó el cargo antes de poder cumplir con esta petición, y la investigación permaneció incompleta.

Una estructura de 22 kilómetros bajo las capas de hielo, también ha alimentado estas sospechas.


       

La evidencia fotográfica estaba inicialmente disponible en Google Earth. Aunque la NASA y los militares estadounidenses han refutado estas afirmaciones, los teóricos creen que estas agencias gubernamentales están cubriendo la fría verdad.

Sin embargo, otros se disputan si estos "descubrimientos" son o no nuevos. El periodista científico Alfredo Carpineti ha trazado fuentes históricas que mencionan la misma estructura, y se refieren a ella como una montaña. 

Supuestamente se registró por primera vez en una expedición antártica británica de 1910-13.

Irónicamente se referían a ella en las encuestas geológicas consecuentes como "la pirámide" debido a la forma de su cumbre.

El desplazamiento mencionado por Hapgood es una larga teoría científica desacreditada. De haber ocurrido, habría aniquilado a todos los animales en la Tierra, como enormes masas de tierra se movía a través del planeta.

Las formaciones piramidales son poco inusuales en las montañas como fenómenos naturales. La Antártida podría muy bien ser un "nunatak" un pico de montaña que sobresale por encima de los glaciares naturales. Hay varios ejemplos ya mencionados en la Antártida. Los científicos creen que estos ocurren cuando los glaciares enormes se desplazan durante miles de años y cubren toda una formación de roca aparte de un solo pico expuesto.

Las pirámides humanas se inspiraron en estas cordilleras. Por ejemplo, las pirámides aztecas adornadas se hicieron para imitar picos altísimos porque creían que los protegería de los elementos. La pirámide más grande del mundo, conocida por los aztecas como "Montaña Serpiente" representa el legendario lugar de nacimiento montañoso de sus pueblos.

Crucialmente, la innovadora investigación contemporánea del profesor Peter Barrett muestra que el continente ha estado cubierto de hielo profundo durante al menos 15 millones de años. Esto es 9 millones de años antes de que los primeros antepasados humanos aparecieran en la Tierra. Por lo tanto, simplemente no hay manera de que la pirámide podría haber sido hecha por los seres humanos modernos.

Las formas de estas estructuras antárticas tienen una semejanza extraordinaria con las estructuras modernas hechas por el hombre. Pero no hay ninguna evidencia concreta que sugiera que sean nada más que formaciones rocosas naturales. Se necesita más evidencia para demostrar que este es el trabajo de una civilización antigua.

       


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