lunes, 3 de febrero de 2020

El Extraño Fenómeno de los Partos en Ataúdes


Ayer estaba leyendo atentamente un artículo de la Revista Internacional de Osteoarqueología titulado The Non-Adult Cohort from Le Morne Cemetery, Mauritius: A Snap Shot of Early Life and Death after Abolition (‘Los individuos no adultos del Cementerio de Le Morne, en la isla de Mauricio: perspectiva de los primeros años de vida y la muerte tras la abolición’) cuando tropecé con una expresión desconocida: parto en un ataúd. 

Entiendo que parece obvio su significado, pero a primera vista mi reacción fue: ¿por qué razón querría una mujer dar a luz en un ataúd? No obstante, el parto en un ataúd es precisamente lo que la propia expresión da a entender: un feto al que su madre da a luz una vez muerta.





 Cuando empecé a investigar este fenómeno más de cerca descubrí que ya se trataba de algo bastante poco común en el pasado, ¡y ni siquiera estamos seguros de si algo así puede ocurrir realmente!

En términos académicos, el parto en un ataúd se conoce como extrusión fetal post mortem. Consiste en la expulsión de un feto inviable por parte del cuerpo de una mujer embarazada fallecida durante la putrefacción de su cadáver. 

En el proceso de descomposición, el cuerpo humano produce gases de forma natural, y estos gases provocan la hinchazón del cadáver. Los gases encerrados en el abdomen pueden entonces oprimir el útero, provocando así la expulsión del feto del cuerpo. Al ocurrir esto a través de la abertura vaginal, acaba por ser un proceso similar al del parto, en este caso en su acepción más literal. 

Este hecho no se comprende aún en su totalidad, ya que no se da en todos los casos en los que muere una mujer embarazada, y rara vez ocurre en nuestra sociedad actual. La conservación química del cadáver elimina los fluidos corporales y las bacterias responsables de la putrefacción y la hinchazón, lo que hace de un parto en un ataúd algo casi imposible hoy en día. 

Hay muy pocos casos modernos registrados, aunque al menos dos mujeres embarazadas halladas días después de su muerte en el año 2008 mostraron hallarse en las primeras fases de la extrusión fetal post mortem, o ya habían expulsado el feto. Aparte de estos dos casos excepcionales, las evidencias forenses son escasas.

Se encontraron los restos de un feto entre los muslos del esqueleto de una mujer. (Cerpen Horor)

Antiguas crónicas de partos en un ataúd

No obstante, informes médicos de los siglos XVI al XVIII y otros casos registrados en bioarqueología aportan sin duda algunas pruebas de que esto ocurría. 

De las crónicas históricas, contamos con varios casos documentados, aunque desconocemos hasta qué punto estos testimonios son fidedignos. 

Encontramos las siguientes notas en un registro parroquial del siglo XVII: “En el 20 de abril de 1650 fue enterrada Emme, esposa de Thomas Toplace, y se descubrió que había dado a luz tras llevar dos horas yaciendo en su tumba”. Las anotaciones de Bonet describen a una mujer que murió en Bruselas estando embarazada en el año 1633. Tres días más tarde se encontró el feto muerto “colgando entre los muslos”. 

Otros casos aparecen registrados por médicos e historiadores: “Richter de Weissenfels, en 1861, informó del caso de una mujer que murió entre convulsiones, y sesenta horas después de su muerte expulsó un feto de ocho meses. 

Stapedius escribe a un amigo acerca del caso de un feto hallado muerto entre los muslos de una mujer que falleció repentinamente a causa de una grave enfermedad. Schenk menciona que la mujer murió a las cinco de la tarde, y que a las tres de la madrugada nació un niño al que ya le habían salido dos incisivos.

 Veslingius nos habla de una mujer que murió de epilepsia el 6 de junio de 1630, y de cuyo cuerpo, dos días más tarde, salió un niño. Wolfius cuenta el caso de una mujer que murió de parto en 1677.

Se observaron movimientos abdominales seis horas después de su muerte. Se sugirió practicar una cesárea, pero su ejecución se pospuso, y dieciocho horas más tarde nació el niño espontáneamente.” (Gould & Pyle 1981).

Posible parto en un ataúd. Caso descubierto por Appleby y sus colaboradores en el año 2012

Detectando partos en ataúdes

En bioarqueología, la detección de este proceso puede resultar difícil debido a la esqueletización. 

La presencia de los restos de un feto junto a los de una mujer en un ataúd no es suficiente, ya que ambos podrían haber sido depositados juntos, incluso si uno de ellos murió un corto espacio de tiempo después del otro. 





La localización de dos conjuntos de restos y su posición es importante a la hora de reconocer estos casos. 

Lewis (2007) afirma que la identificación de un parto en un ataúd requiere que los restos del feto estén completos y en una posición inferior y alineada con la cavidad pélvica de la mujer. La cabeza del feto debe aparecer orientada en dirección opuesta a la de la madre. 

La edad del niño también es importante para determinar si era lo suficientemente joven como para ser un neonato, y no sencillamente un bebé. En el artículo de Appleby y sus colaboradores del año 2012, un esqueleto neonato de entre 33 y 35 semanas de gestación fue hallado en esta posición. Debido a este hecho, dedujeron que se trataba de un caso de parto en ataúd. 

Aunque el enterramiento en cuestión databa del 1830 aproximadamente, época en la que el uso de conservantes químicos estaba en aumento, la población difunta objeto de estudio estaba formada principalmente por esclavos o esclavos liberados que no habrían dispuesto de los recursos necesarios para conservar los cadáveres de sus difuntos, o podrían no haber deseado que se llevara a cabo con ellos un procedimiento de este tipo. Se han descubierto otros ejemplos de partos en ataúd gracias a la bioarqueología, lo que demuestra que estos casos se han dado históricamente durante siglos.

Aunque no se trata de un hecho habitual, la extrusión fetal post mortem es un caso posible que debemos tener en cuenta como arqueólogos. No es raro encontrar mujeres enterradas con restos de bebés o recién nacidos, pero debemos ser cuidadosos a la hora de interpretar la relación espacial entre los dos cadáveres. 

Si se encuentran el uno junto al otro, podría representar un parto normal seguido por la muerte de ambos. Si el neonato está en posición fetal en el interior de la cavidad corporal de la mujer podría tratarse de la muerte de una mujer embarazada, y si el feto se encuentra entre los muslos de la madre entonces sí podríamos considerar la posibilidad de un parto en un ataúd. En cualquier caso, es importante observar la relación existente entre los restos del feto y los de la madre.

Imagen de portada: Posible caso de ‘parto en un ataúd’. (Bones Don’t Lie)

Este artículo, titulado originalmente ‘New Morbid Technology: Coffin Birth’ y escrito por Katy Meyers Emery, fue publicado originalmente en su blog ‘Bones Don’t Lie’, y ha sido publicado de nuevo y traducido bajo una Licencia Creative Commons.

Fuentes:

Appleby, J. et al. (2012). The Non-Adult Cohort from Le Morne Cemetery, Mauritius: A Snap Shot of Early Life and Death after Abolition International Journal of Osteoarchaeology, 33(4) DOI: 10.1002/oa.2259


Lewis. 2007. The Bioarchaeology of Children: Perspectives from Biological and Forensic Anthropology. New York: Cambridge University Press.

26 ENERO, 2016 - 19:40 ANCIENT-ORIGINS

El controvertido “Plan B” para contrarrestar el calentamiento global

Los científicos climáticos del gobierno de los Estados Unidos estudiarán dos propuestas de geoingeniería para contrarrestar el calentamiento global.

plan b contra el calentamiento global

El principal científico del cambio climático de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) dijo que recibió 4 millones de dólares del Congreso y el permiso de su agencia para estudiar dos métodos de emergencia y controvertidos para enfriar la Tierra si Estados Unidos y otras naciones no logran reducir las emisiones globales de gases de efecto invernadero.

David Fahey, director de la División de Ciencias Químicas del Laboratorio de Investigación del Sistema Terrestre de NOAA, dijo ayer a su personal que el gobierno federal está listo para examinar la ciencia detrás de la «geoingeniería», o lo que denominó un «Plan B» para el cambio climático.





Fahey dijo que recibió el respaldo para explorar dos enfoques:

Uno es inyectar dióxido de azufre o un aerosol similar en la estratosfera para ayudar a proteger la Tierra de la luz solar más intensa. Se basa en una solución natural: erupciones volcánicas, que se ha encontrado que enfrían la Tierra al emitir enormes nubes de dióxido de azufre.

El segundo enfoque usaría un aerosol de partículas de sal marina para mejorar la capacidad de las nubes bajas sobre el océano para actuar como sombra.

Esta técnica se toma prestada de las «pistas de los barcos», o de las largas nubes dejadas por el paso de los cargueros oceánicos que los satélites ven como caminos reflectantes. Podrían ampliarse mediante inyecciones de vapor del agua de mar por barcos especializados para crear efectos de sombra.

La investigación en ambas técnicas, enfatizó Fahey, se recomienda en un próximo estudio de las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina titulado «Estrategias de intervención climática que reflejan la luz del sol en la tierra fría».

Pero en señal de cuán controvertido es el tema, Fahey recomendó cambiar la nomenclatura de geoingeniería a «intervención climática», que describió como una «palabra más neutral».

Fahey también enfatizó que esto no es una aprobación para avanzar con la geoingeniería. Más bien, se trata de preparar al gobierno de EE. UU. Para una decisión política si el mundo no logra limitar adecuadamente el aumento del calentamiento global.

«La geoingeniería es esta bola de problemas enredada y la ciencia es solo una de ellas», dijo.

«Una de las cosas que me interesa hacer es separar la ciencia», agregó. La idea es dar a los encargados de formular políticas una visión clara de cómo funcionaría una apuesta apresurada por salvar el planeta.

Incluso entonces, los resultados probablemente no serían inmediatos. Fahey mostró diapositivas y gráficos que indicaban que un Plan B podría tomar hasta el próximo siglo para completar el enfriamiento. Aún así, una mejor ciencia podría «ganar tiempo» para mejorar los esfuerzos, dijo.

Notó que habría inconvenientes después de que un investigador le preguntara si las inyecciones de dióxido de azufre en la atmósfera podrían reducir los mariscos al acidificar los océanos.

«Cuando pones aerosoles en la atmósfera, pasan muchas cosas», respondió Fahey. «Eso abre todo este menú de cosas por las que deberías preocuparte», agregó.

Dijo que otros aerosoles como la calcita o la titania «podrían tener menos impacto, pero nadie lo sabe. Queremos verlos en el laboratorio».

Varias naciones más pequeñas se han quejado de que el uso de aviones para inyectar aerosoles en la atmósfera podría alterar el clima o destruir la capa de ozono, que protege a los humanos de algunas de las radiaciones más dañinas de la luz solar.

Fahey sugirió que un enfoque científico requeriría resolver una lista de incógnitas, incluidas pruebas para descubrir qué hay hoy en la estratosfera y cómo lograr que los aerosoles se propaguen allí de manera homogénea. Otra área probable de investigación: consecuencias no deseadas.

«Tenemos que usar observaciones atmosféricas para descubrir lo que estamos haciendo», agregó.

Por el momento, el gobierno no tiene experimentos planificados y la autoridad de NOAA no se extiende a la estratosfera. Pero hay un proyecto de ley en el Congreso llamado «Ley de Investigación de Intervención Climática» que ampliaría su jurisdicción. «Podría haber más de $ 100 millones unidos a esto, me han dicho», explicó.

Hasta ahora, ni el Congreso ni la administración se han aventurado a abordar el tema del Plan B. Lo más parecido a probarlo es un proyecto patrocinado por la Universidad de Harvard llamado «Experimento de Perturbación Controlada Estratosférica» ​​(SCoPEx).

Propone una prueba a pequeña escala utilizando un globo impulsado por hélice. Ascendería a una altura de 12 millas sobre Nuevo México y luego liberaría menos de 1kg de carbonato de calcio.

La idea es crear un área tubular en el cielo, de aproximadamente 1kilometro de largo y 100 metros de diámetro, a través del cual el globo lleno de sensores podría moverse lentamente de un lado a otro, mezclando el aire y monitoreando las habilidades de reflejo solar de los materiales dispersos. También rastrearía el impacto del área tratada en la atmósfera circundante. Pero no sabemos cuando SCoPEx ocrurrirá.

Harvard, sensible a la cuestión de cómo gobernar tales experimentos, ha designado un comité asesor externo para ayudar a supervisar y evaluar la prueba. Según David Keith, un físico de Harvard que es uno de los líderes del proyecto, el comité externo ayudaría a determinar si el experimento debería avanzar y cuándo.

La financiación del experimento provendrá de los fondos de investigación de Harvard y de una lista de contribuyentes externos a un fondo controlado por el Programa de Investigación de Geoingeniería Solar de Harvard. En comparación con los experimentos espaciales, de defensa y relacionados con el clima de EE. UU., El costo del esfuerzo sería minúsculo.

Keith no pudo ser contactado para comentar sobre el anuncio de Fahey, pero Fahey dijo que NOAA apoya la prueba estratosférica de Harvard y ha contribuido con un instrumento para ayudarlo a medir la dispersión de partículas.





«Tendremos que renunciar a algunas cosas para entrar en el Plan B. Es por eso que estaríamos motivados para probar aerosoles de diseño, pero es posible que no tengamos tiempo», explicó Fahey.

«Eso es lo que Harvard quiere hacer. Se remonta a la cuestión de en qué camino quieres estar”, agregó, y señaló la diferencia entre una posible decisión internacional de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o llegar tarde y verse obligado a implementar un Plan B para detener el cambio climático desbocado.

«No quiero estar en el camino tardío, pero la pregunta es qué caminos se nos abrirán», dijo. “Creo que nadie puede jugar todos los movimientos de ajedrez en este tema. Es muy complicado».


2 febrero, 2020

¿Qué Ocultan Algunas Montañas?






Benedicto XVI: “El diablo quiere destruir España”


Por INFOVATICANA | 02 febrero, 2020
El 22 de enero tuvo lugar, en la Universidad CEU San Pablo de Madrid, la presentación de la segunda parte de «La pérdida de España», del conocido profesor e historiador Alberto Bárcena.

El libro narra el periodo de la Historia de España desde la II República a nuestros días. Alberto Bárcena, conocido para los lectores de InfoVaticana, es un hombre que, como dijo Jorge Ferández Díaz -ex ministro del interior y uno de los que intervinieron en la presentación-, considera la Historia como una lucha entre el bien y el mal, “y aplica este modelo para escrutar los hechos acaecidos, aportando datos que lo avalan”.





 “Para el autor, España tiene una marcada identidad cristiana, y nuestros conflictos, una indudable dimensión religiosa, como atestigua haber sido protagonistas de la mayor persecución padecida por la Iglesia”. escribe Jorge Fernández Díaz.

En el acto también intervinieron Alfonso Bullón de Mendoza, presidente de la Asociación Católica de Propagandistas, Luis Alfonso de Borbón, Jorge Fernández Díaz y el propio Bárcena.

Emotiva fue la intervención de Luis Alfonso, que recordó la exhumación de su bisabuelo, Francisco Franco, del pasado 24 de octubre, cuyo féretro portó junto a varios familiares ante los ojos de toda España. En relación a esto, hay que destacar que en la presentación, entre el público, estaba uno de los protagonistas indiscutibles de este episodio, el prior del Valle de los Caídos Santiago Cantera. Cuando Bárcena anunció que se encontraba entre los presentes la ovación fue sonada.

Una de las intervenciones que acaparó más titulares fue la de Jorge Férnandez Díaz. Eso se debió a que el ex ministro de Rajoy hizo públicas unas palabras que el Papa emérito, Benedicto XVI, le dirigió durante un encuentro privado que tuvieron en 2015.

InfoCatólica ha recogido las palabras del ex ministro:

Hablaron entre otras cosas de las visitas que hizo a España siendo Papa reinante. Entonces don Jorge le dijo al papa emérito cómo estaba la situación en España, con el problema de Cataluña, y le rogó que rezara por la nación española. 

Entonces «me interrumpió con toda dulzura y literalmente me dijo lo siguiente: “El diablo quiere destruir España”». Como Fernández Díaz quedó impactado, Benedicto XVI le explicó que«el diablo ataca más a los mejores y por eso ataca a España y quiere destruir España»

A continuación siguió glosando las palabras del papa emérito: “El diablo sabe lo que ha hecho España a lo largo de su Historia: la evangelización de América, el papel de España durante la Contrarreforma, la persecución religiosa durante los años treinta del pasado siglo”

Al ver que el ex-ministro seguía conmocionado, Benedicto XVI añadió:

“Tenga confianza, los enemigos de Dios y de la Iglesia hacen mucho ruido y están muy presentes en los medios, pero sin salir en los medios y sin hacer ruido hay mucha gente que reza. Y esa oración es muy poderosa”.

El papa emérito siguió hablando:

“Le voy a decir las armas por las que van a derrotar al diablo y no va a conseguir destruir España: la primera, la humildad; la segunda, la oración; la tercera, el sufrimiento… (y tras una brevísima pausa)… la devoción a la Santísima Virgen”.

Y entonces añadió:

“Y como en el evangelio del próximo domingo, tenga confianza. En el momento oportuno el Señor actuará”.

Jorge Fernández explicó entonces que cuando acabó la audiencia, comprobó cuál era el evangelio del domingo siguiente y vio que era el relato de la tormenta que puso en peligro la barca en la que estaban Cristo y los apóstoles, y el Señor calmó la tempestad.


La VERDAD Que Nadie Te Cuenta del CORONAVIRUS : El Origen de la Bioarma de Wuhan






Noticias de la ONU: Se espera un Sismo de 9 Grados en América Latina.

Una nota que empieza a circular en redes sociales de habla hispana es de un supuesto terremoto de magnitud 9 que se espera suceda en algún lugar de América Latina.


La ONU difunde en su pagina de noticias la información

Un sitio de noticias de la Organización de la Naciones Unidas (ONU) difundió que estudios sismológicos han identificado que en la brecha sísmica de Arica en el norte de Chile existe la posibilidad de un terremoto de magnitud 9.0

Según los expertos, existe una posibilidad de que un terremoto de magnitud 9,0 afecte a países de América Latina como Chile, Ecuador y Guatemala, seguidos por Costa Rica, Nicaragua y El Salvador.





De acuerdo con la división de Asuntos Humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), desde el año 2000, 152 millones de personas en América Latina y el Caribe han sufrido las consecuencias de constantes fenómenos naturales como huracanes, terremotos, sequías e inundaciones, y según el organismo estas zonas son las más propensas a sufrir sismos de gran magnitud.

En total se han registrado mil 205 desastres naturales derivados de o vinculados con el cambio climático, entre los que se encuentran inundaciones, huracanes y tormentas, terremotos, sequías, aludes, incendios, temperaturas extremas y eventos volcánicos.

De acuerdo con los datos de la ONU, más de 14 millones de personas en América Latina y el Caribe, sumando pérdidas económicas que ascienden a 54 mil millones de dólares.

La región en general es vulnerable a los terremotos, pero América Central y del Sur tienen una mayor exposición comparadas con el Caribe.

América Central y la costa oeste del continente sudamericano están situadas dentro del "Anillo de Fuego", un camino ubicado a lo largo del Océano Pacífico caracterizado por volcanes activos y terremotos frecuentes.

La costa occidental de América del Sur es una de las zonas más sísmicas del mundo: más de una cuarta parte de los terremotos del mundo de magnitud 8,0 o más ocurrieron allí desde el año 2000.

 Estudios sismológicos recientes han identificado grandes zonas a lo largo de la costa de Ecuador, Perú y el norte de Chile que podrían producir sismos de gran magnitud en el futuro. Existe la posibilidad de un terremoto de magnitud 9.0 o mayor en esta parte de América del Sur, con la brecha sísmica de Arica en el norte de Chile, identificada como el locus de un terremoto tan intenso.

Los países con mayor riesgo de terremotos son Chile, Ecuador y Guatemala, seguidos por Costa Rica, Nicaragua, y el Salvador.

                     Captura de pantalla del sitio de noticias de la ONU news.un.org

Por otro lado un medio de noticias de México informo que el Mega sismo en América Latina es falso; no se pueden predecir: UNAM.

La universidad mexicana recordó que la ciencia no puede predecir ni prever cuándo ni dónde ocurrirá un fenómeno de este tipo, por lo que adjudicó el tema a un rumor de redes sociales.

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) calificó como un rumor el supuesto sismo de gran magnitud que se registrará en América Latina, ya que dijeron eso no se puede predecir.

Por medio de un comunicado, la universidad mexicana recordó que la ciencia no puede predecir ni prever cuándo ni dónde ocurrirá un fenómeno de este tipo.

Vídeo:


            

EXTRANOTIX MISTERIO

TOP 10: FAMOSOS Confiesan Secretos Paranormales






Barajas se prepara para el aterrizaje de emergencia de un avión con daños en un motor y el tren de aterrizaje

SOBREVUELA MADRID PARA SOLTAR COMBUSTIBLE

Un Boeing 767-300 que opera el vuelo AC837 de Air Canada y con destino Toronto con 130 personas a bordo, se encuentra actualmente quemando combustible sobre el sur de Madrid preparándose para un aterrizaje de emergencia, según han informado las autoridades aeroportuarias.

Un F-18 del Ejército del Aire ha despegado de la base de Torrejón para situarse en paralelo al Boeing y poder observar los daños que sufre el aparato e informar al piloto antes del aterrizaje.





El aparato sobrevuela el sur de la capital sobre una zona deshabitada tras haber registrado una incidencia con el tren de aterrizaje cuando despegaba de Barajas a las 14:55. Al parecer le ha estallado al menos un neumático, por lo que el piloto ha decidido regresar al aeropuerto.


El Boeing 767-300 tendría, además, problemas en el motor izquierdo tras haber absorbido piezas del tren de aterrizaje cuando despegaba por la 36L del aeródromo madrileño, según ha informado el SEPLA.

El gestor aeronáutico ha detallado que se están regulando de nuevo las operaciones mientras el vuelo realiza esperas para tomar tierra. Por su parte, desde Aena han señalado que el aeropuerto está prevenido para recibir el vuelo.

El vuelo AC837, operado por Air Canada y con destino Toronto, se encuentra actualmente quemando combustible al sur de la capital tras haber registrado una incidencia con el tren de aterrizaje cuando despegaba de Barajas a las 14:55. [vídeo de @Beatrizxy]




En el aeropuerto la actividad es frenética mientras los servicios de emergencia se preparan para cualquier eventualidad cuando se produzca el aterrizaje. Bomberos, servicios sanitarios, policía, todos los dispositivos de seguridad se disponen a recibir en la pista más larga del aeropuerto al Boeing. En principio sería la 32 L, que se cubrirá de espuma para amortiguar la toma de tierra del avión y, sobre todo, evitar que se produzca un incendio.


El 767 de Air Canada tiene más de 30 años de antigüedad. Realizó su primer vuelo el 31 de marzo de 1989. Air Canada lo compró en 2005 a Virgin, y desde entonces ha operado con la matrícula C-GHOZ.





El incidente se ha producido apenas unos minutos después de levantarse el cierre del espacio aéreo provocado por el vuelo de un dron. El comité de seguridad que Aena, Enaire, Policía y Guardia Civil decidió levantar todas las restricciones del aeropuerto de Adolfo Suárez-Barajas tras hora y media de ‘bloqueo’.

En total, Aena ha informado de 26 vuelos desviados.