lunes, 27 de enero de 2014

El Negocio de la Inseguridad y su proposito illuminati

""

Hombres de Negro: Visitantes de la Dimensión Desconocida (¿o del más allá?)

Algunas personas que han hecho un avistamiento OVNI o tienen un encuentro cercano, posteriormente reciben extrañas visitas extrañas de siniestros 'hombres de negro' (MIB), que acosan, amenazan e intimidan y les impiden hablar de su experiencia.1


Suelen aparecer incluso antes de que el testigo haya reportado el incidente OVNI, y por lo tanto, deben tener acceso a información que no está disponible públicamente. Investigadores OVNI también han sufrido acoso por parte de MIB. La persona que recibe la visita por lo general está sola, y ningún MIB ha sido capturado o interrogado.

Hasta donde se sabe, las víctimas MIB que han ignorado las amenazas no han sufrido como resultado. 

Los MIB trabajan a veces solos, a veces de a dos o de a tres. Pueden llegar en un gran coche negro, a menudo un modelo fuera de fecha, con placas de circulación que luego resultan ser falsas. Visten trajes oscuros, sombreros oscuros, corbatas oscuras, zapatos y calcetines oscuros, pero camisas blancas, y los testigos comentan a menudo sobre su ropa aparentemente flamante e inmaculada y nueva. A menudo son de tez oscura, quizá de aspecto oriental, y frágil. 

Conforme a una imagen estereotipada de la CIA, ellos dicen ser agentes del gobierno o producen tarjetas de identidad que resultan falsas. A veces se disfrazan de periodistas, vendedores de seguros, o personal de la fuerza aérea. Sus movimientos son rígidos, su manera es formal y fría, con los rostros adustos y sin expresión, su rebuscado lenguaje es reminiscente a un diálogo de alguna película clase B.

En un caso, un MIB tenía una gran grabadora con él, pero no sabía cómo hacerla funcionar. A veces no hay una visita personal, sólo una llamada telefónica, o no hay ningún coche negro, sólo una brusca aparición y desaparición. 

En mayo de 1975, dos semanas después de un espectacular avistamiento OVNI desde su avión - un avistamiento confirmado en las pantallas de radar en el aeropuerto de Ciudad de México - un joven piloto fue perseguido por la autopista por cuatro hombres de aspecto escandinavo, vestidos de negro, en una limusina negra.

Después de forzarlo hacia un lado de la carretera, le advirtieron que no hablara de su avistamiento, el piloto estaba en su camino a dar una entrevista de televisión. Un mes más tarde, uno de los extraños reapareció y lo amenazó de nuevo mientras él se dirigía a un hotel para hablar con el destacado investigador de ovnis Allen Hynek.

Él describió a los MIB muy altos y extrañamente blancos, y dijo que nunca los vio parpadear.2

En la noche del 11 de septiembre de 1976, Herbert Hopkins, un médico de familia de Maine, que estaba estudiando un incidente con un OVNI, estaba solo en casa cuando un hombre que dice ser un investigador OVNI llamó para preguntar si podía visitar para discutir el caso, y afirmó que era de una organización OVNI que más tarde se encontró con que no existe.

El médico estuvo de acuerdo, y tan pronto como la llamada telefónica terminó, él encendió la luz del porche trasero - sólo para ver al hombre ya subiendo los escalones del porche. El hombre vestía un traje negro, era calvo, tenía la piel muerta de color blanco, sin cejas ni pestañas, y llevaba el lápiz labial rojo brillante. Estaba sentado casi inmóvil, casi sin abrir la desdentada boca en forma de ranura. 

Le dijo a Hopkins que tenía dos monedas en su bolsillo izquierdo - esto era correcto.

Él le dio instrucciones de poner una moneda en la palma de su mano. Hopkins vio entonces a la moneda desvanecerse poco a poco en una 'borrosa bola azul' vaporosa y desaparecer.

"Ni usted ni nadie más en este plano verán alguna vez esta moneda otra vez", dijo el visitante.

Habiéndoles pedido a Hopkins destruir las cintas, correspondencia, o literatura que tenía sobre el caso OVNI que estaba estudiando, el MIB se levantó tambaleándose, diciendo:

‘Mi energía se está agotando... debo irme ahora... adiós’

Al salir de la casa, se dirigió hacia una luz azul-blanca que brillaba en la calzada.

Hopkins asume que esto pertenecía al coche del visitante, aunque él no lo vio ni lo oyó salir. Las marcas en el centro de la calzada no eran de neumáticos de coches, y desaparecieron al día siguiente. En shock, Hopkins borró las cintas y abandonó el caso OVNI. Nunca volvió a saber nada de su visitante.3 

El siguiente incidente ocurrió durante las visitas del Hombre Polilla en Virginia Occidental.

Una noche, en enero de 1967, Mary Hyre, una periodista que había escrito mucho sobre los avistamientos locales, estaba trabajando hasta tarde en su oficina cuando un hombre entró por la puerta. Su estatura era de unos cuatro pies y seis pulgadas de alto.

Aunque la temperatura exterior estaba muy por debajo del punto de congelación, llevaba solamente una camisa azul de manga corta y pantalones azules delgados. Sus ojos eran oscuros y hundidos, y llevaba gafas de gruesos cristales. Tenía el pelo largo y negro que estaba cortado en ángulo recto. Hablaba de una manera difícil de entender, un sonsonete ", como una grabación", y le preguntó cómo llegar a Welsh, West Virginia.

Hyre lo encontró aterrador.

"Se acercaba cada vez más y más a mí - dijo ella - sus extraños ojos mirándome casi hipnóticamente."
Alarmada, llamó al gerente de circulación del periódico a su oficina y juntos le hablaron al extraño hombre, que parecía saber más acerca de West Virginia que ellos.

En un momento, sonó el teléfono y mientras Hyre contestaba, el hombrecillo cogió una pluma de su escritorio y la miró con asombro como si nunca hubiera visto una antes. Cuando Hyre le dijo que podía tenerla, le dio una risa peculiar en voz alta, salió corriendo y desapareció en una esquina. 

Varias semanas más tarde, Hyre estaba cruzando la calle cerca de su oficina y vio al mismo hombrecito. Pareció sorprendido cuando se dio cuenta de que ella lo miraba, se dio la vuelta rápidamente y corrió hacia un coche negro grande que repentinamente dio la vuelta de la esquina. Subió y rápidamente se alejó. 

En ese momento, la mayoría de los avistamientos del Hombre Polilla habían llegado a su fin. Pero el 15 de diciembre de 1967, el puente de 700 metros que une a Point Pleasant con Ohio repentinamente colapsó mientras estaba lleno de tráfico en hora pico. Decenas de vehículos cayeron al río Ohio y 46 personas perdieron la vida.

Durante la semana de Navidad, un hombre bajito, de piel oscura entró en la oficina de Mary Hyre.

Iba vestido con un traje negro, con un lazo negro, y tenía apariencia vagamente oriental. Tenía los pómulos altos, ojos estrechos, y un acento no identificado. Él no estaba interesado en el desastre del puente, pero quiso saber sobre avistamientos locales de ovnis.

Hyre estaba demasiado ocupada para hablar con él y le entregó un archivo de recortes de prensa relacionados. No estaba interesado en ellos e insistió en hablar con ella.

Ella finalmente lo sacó de su oficina. Esa misma noche, un hombre de aspecto idéntico visitó las casas de varios testigos de la zona que habían reportado haber visto luces en el cielo. A todos ellos los puso muy incómodos y molestos y aunque él afirmó ser un reportero de Cambridge, Ohio, sin querer admitió que no sabía dónde estaba Columbus, Ohio, a pesar de que las dos ciudades se encuentran a pocos kilómetros de distancia.4 

John Keel dice que el comportamiento MIB es una reminiscencia de los engaños de hadas y juegos de una época anterior. Otros investigadores consideran a los MIB como una forma de entidad psíquica demoníaca.

Como Michael Grosso dice,
'Los MIB parecen deslizarse dentro y fuera de la realidad, comportándose como fantasmas o pesadillas en un momento y asumiendo otra realidad al día siguiente'.5
El fenómeno MIB es probablemente impulsado por la paranoia por parte de los testigos y los ufólogos. 

Keel señala que los grupos que investigan el asesinato del presidente Kennedy han sufrido acoso similar a la experimentada por los investigadores OVNI.

Sus teléfonos se descontrolan, son seguidos por coches misteriosos y por sospechosos caballeros de aspecto oriental, y su correo es puesto patas arriba.

Los estudiantes de brujería, miembros de grupos religiosos fanáticos, e incluso los miembros de los movimientos de derechos civiles y grupos políticos del ala derecha e izquierda, todos se convierten en víctimas de este acoso. Y cada grupo trata de encontrar una causa o culpable para explicarlo - el más popular es la CIA o el FBI.

Miles de personas están sufriendo este tipo de acoso constante, y ninguna agencia del gobierno es lo suficientemente grande, tiene suficiente personal o un presupuesto suficientemente grande como para ser culpable de todos estos incidentes.

Tampoco ninguna agencia del gobierno es responsable de estar motivado para gastar una fortuna para acosar a adolescentes aficionados a los ovnis y ancianitas recogiendo recortes de John F. Kennedy.6

Parece que cualquier persona involucrada en cualquier investigación controversial tiene que enfrentarse a la hostilidad generalizada y sujeta a la paranoia puede encontrarse sufriendo acoso similar.

Por ejemplo, T. Henry Moray (1892-1974) inventó una máquina de energía radiante que convierte la energía del espacio en energía utilizable y fue capaz de producir más energía de la que es requerida para ejecutarlo. Varios científicos lo examinaron y estaban convencidos de que era genuino.

Sin embargo, Moray también se enfrentó a un enorme escepticismo y oposición, tuvo problemas para obtener las patentes de su dispositivo, y se hizo muy sospechoso. 

Comenzó a sufrir extrañas formas de acoso. Se convirtió en objeto de amenazas de muerte, y tanto a él como a su esposa les dispararon un número de veces. Los Morays decidieron pedir un coche a prueba de balas.

Uno de sus hijos recordaba haber sido conducido por la ciudad cuando el coche fue alcanzado por una lluvia de balas disparadas desde un misterioso sedán negro. Otro de sus hijos, dice que su madre recibió una serie de llamadas telefónicas anónimas amenazando sus vidas.

En una de ellas, le dijeron que la vida de su marido no valía ni 'cinco centavos enchufados', a menos que cooperara con los agentes de la persona que llamaba a través de la máquina de la energía radiante. La casa y el laboratorio de Moray fueron asaltados en varias ocasiones en, pero la máquina no fue robada. En un posterior incidente, Moray recibió un disparo en la pierna mientras trabajaba en el laboratorio.

Moray firmemente cree que todo esto era parte de un complot para hacerlo entregar la invención

Fuente: http://veritas-boss.blogspot.com.es/2014/01/visitantes-de-la-dimension-desconocida_23.html

La NASA corta la transmisión después de mostrar en directo un extrañísimo objeto junto a la ISS


El usuario Streetcap1 de Youtube ha registrado este extrañísimo objeto cerca de la Estación Espacial Internacional esta semana gracias a la retransmisión online que realiza la propia NASA. Además se presenta una luz que está cayendo contra la pared exterior de la propia ISS. Captura increíble que pudo ser grabada antes de que cortaran el plano de lo que se estaba viendo.

WhatsApp, nueva vía de troleros y pícaros para llegar a sus víctimas

Una mujer sostiene un teléfono inteligente. EFE/Archivo / EFE

“Si usted conduce de noche y ve un vehículo sin las luces encendidas, no le avise”, se trata de un “juego de sangre” de aspirantes a entrar en una banda que deben agredir a la primera persona que les advierta. Éste es uno de los bulos que circulan en los últimos días por WhatsApp.

El texto incluso alerta de que “este próximo fin de semana” será de “iniciación” y pide a los ciudadanos que tomen precauciones, adviertan a sus familiares e incluso que contacten con el 062 o el 112.

Se trata de una antigua leyenda urbana que se suma a otras informaciones falsas recibidas por los usuarios de este servicio de mensajería, cuyo efecto es mayor en municipios pequeños, donde llegan a casi todos los habitantes y generan “alarma social”.

Es el caso de Calamonte, una localidad extremeña de poco más de 6.000 habitantes, cuyos vecinos han recibido esta semana un mensaje que alerta de la presencia de varios delincuentes por la zona que han escapado de prisión e incluso indica que la noticia ha sido transmitida por medios locales y el ayuntamiento.

La noticia es “falsa totalmente”, señala a Efe la teniente de alcalde de este municipio, Magdalena Carmona, quien asegura que la información ha generado “alarma social” y “desconfianza”.

“Se aprovechan de las nuevas tecnologías” y le dan un uso “inadecuado”, añade uno de los responsables de la radio local, quien desmiente que se haya informado de esta falsa noticia.

La Policía Nacional a través de su perfil en Twitter ha desmentido bulos como el secuestro de niños en Sevilla o el supuesto violador en una zona de Madrid, un mensaje que incluye una fotografía y que los agentes instan a no reenviar para no “hundir la vida del inocente chaval”.

Cada día aparece una nueva mentira, como la que informa de ladrones en aparcamientos que colocan papeles en los vehículos y aprovechan el descuido de los conductores cuando van a retirarlos para robar el coche, según explica el responsable de Comunicación de la Policía Nacional en Extremadura, Juan Manuel de la Cruz.

Para diferenciar si se trata de un bulo, De la Cruz recuerda que la Policía no informa a particulares a través de servicios como el WhatsApp, sino que utiliza los medios de comunicación y sus canales oficiales.

“Aplicando la lógica se puede discernir que se trata de bulos, por lo que se apela a la conciencia de cada uno”, afirma, al tiempo que señala que si se sospecha de que el mensaje puede ser falso se contacte con el 091.

Otros mensajes van más allá y buscan estafar a los ciudadanos. “Los listos del día: intentan que llames a un teléfono de alto coste y hablar así de un amigo. ¡No llames! FRAUDE”, advierte la Policía en Twitter.

La organización de consumidores FACUA ha denunciado a cuatro empresas por cometer fraude masivo al enviar mensajes que incitan a responder al simular ser un contacto de WhatsApp. Se busca que la operadora cargue al usuario elevadas cantidades en el recibo de su teléfono, ya que se trata de un servicio Premium.

Enrique Piñero es miembro del gabinete Jurídico de FACUA y explica que si no se ha contestado a ellos es preciso identificar a la empresa y denunciar este hecho ante la Agencia Española de Protección de Datos.

Aquellos que ya hayan respondido deben exigir a su compañía que no les cargue su coste y presentar denuncias ante la Oficina de Atención al Usuario de Telecomunicaciones y la autoridad de consumo de su región.

Piñero aconseja desconfiar de mensajes recibidos de números “sospechosos” y cuestionar la veracidad de aquellos cuyo contenido incluso está redactado con faltas de ortografía.

Frenar la proliferación de este tipo de mensajes no parece fácil, Policía y consumidores apuntan a la concienciación y el sentido común como herramientas para combatir las mentiras y estafas de los nuevos troleros y pícaros del WhatsApp.

Por Isabel Barrena

Los judíos que combatieron como piratas.

Fue sólo después de la dinastía de los Asmoneos, cuando el sumo sacerdote Simón (142- 134 a.e.c.) anexó la ciudad de Jope o Yafo a sus dominios que los judíos pudieron disponer de un puerto marítimo propio. 

Igualmente se tienen noticias de que posteriormente, cuando el hijo de Simón y sucesor, Juan Hircano (134-104 a.e.c.), tomó Ashdod, y más tarde, el rey Alejandro Janeo (103- 76 a.e.c.) se anexó Gaza y la Torre de Strato (más tarde llamada Cesarea), se constituyó un pequeño grupo de marinos judíos al servicio de la realeza.

En el siglo I antes de la era común hay evidencia de judíos que combatieron como piratas. En la tumba de Jasón, en Jerusalén, existe un dibujo grabado sobre piedra de un barco de guerra persiguiendo a dos buques mercantes. Sobre la proa del buque de guerra aparece Jasón con un arco y flechas preparado para disparar.

Ya el historiador Flavio Josefo relataba ataques de marineros judíos tenidos entre los suyos por grandes héroes, quienes partiendo del puerto de Jope (Yafo) atacaban a barcos romanos en pequeñas embarcaciones. Flavio Josefo escribe en su Antigüedades judías que en el año 63 a.e.c., dos líderes judíos, Hircano y Aristóbulo, llegaron a Damasco, donde cada uno de ellos defendió ante Pompeyo sus razones para ser nombrado rey de los judíos con preferencia de uno sobre el otro. Durante este debate, Hircano acusó a Aristóbulo de organizar actividades realcionadas con la «piratería en el mar».

En el siglo VI de la era común, cuando el mundo judío ya se desarrolla principalmente fuera de Palestina, es decir, en la diáspora, tenemos testimonios de sacerdotes cristianos que hablan de piratas judíos en la costa del norte del continente africano.

Un documento clerical del siglo VI que informa acerca de la toma de Cairuán, en Túnez, gran centro de la cultura sefardí en el norte de África, hace referencia a piratas judíos que no navegaban en Shabat (sábado), por ser un día sagrado para ellos. Este curioso documento también relata cómo fue capturado el obispo Sinesio por tales piratas en represalia a encarcelamientos que aquel ordenaba contra los hebreos.

Durante el siglo XII el propio Maimónides, en una carta escrita a su hermano, le advierte a éste que hay embarcaciones piratas de propiedad compartida por judíos y musulmanes.

Como consecuencia de la expulsión de los judíos en España en 1492 y posteriormente de Portugal en 1496, estos se dispersaron por varios países. Algunos se establecieron en los reinos moros de Marruecos e incluso en Siria; otros en el sur de Francia o se dirigieron a Holanda y las ciudades hanseáticas del norte de Alemania, como Bremen o Hamburgo. Hubo quienes se establecieron en países como Dinamarca, Suiza o Italia. Sin embargo, la gran mayoría de los sefardíes fueron recibidos con gran beneplácito por el sultán Bayaceto II en el Imperio turco otomano, el mayor imperio conocido antes del español.

Muchos otros judíos permanecieron en España y Portugal bajo una supuesta apariencia cristiana (estos judeoconversos son conocidos como criptojudíos o marranos) y posteriormente se trasladaron a algunas islas del Caribe, como Jamaica, o a colonias españolas y portuguesas en América, tales como Perú, México y Brasil entre otras.

Las expulsiones de judíos acaecidas a finales del siglo XV en España y Portugal y la posterior persecución inquisitorial contra los marranos incitaba ciertamente a la venganza por parte de las víctimas y ello quizá pueda explicar la adhesión a partir del siglo XVI de algunos judíos a la piratería o a las actividades de corsarios, no sólo al servicio de las potencias enemigas europeas, tales como Inglaterra y Holanda, sino al servicio de los turcos otomanos.

Tal es el caso de Sinan Reis, corsario judío nacido en Esmirna, Turquía, quien alcanzó el rango de capitán pashá (Almirante de la flota turca) entre 1550 y 1553. Aliado con el corsario Barbarroja (o Barbarrosa), Sinan Reis llegó a ser su segundo al mando, y se destacó en combates navales contra los enemigos del Imperio Otomano. Entre estos cabe destacar especialmente la Batalla de Preveza, en septiembre de 1538, contra la flota combinada de la Liga Santa, constituida por los Estados Pontificios, España, el Sacro Imperio Romano Germánico, la República de Venecia y la Orden de Malta, al mando de Andrea Doria. Esta victoria aseguró el dominio turco sobre el Mediterráneo hasta la Batalla de Lepanto en 1571.

A partir del descubrimiento del Nuevo

Mundo, la persecución a los judíos se expandió desde la península ibérica a las nuevas colonias americanas y las leyes inquisitoriales fueron aplicadas en éstas con el mismo rigor que en la metrópolis, lo cual explica que hubieran expulsados judíos transformados en piratas y corsarios cuyos veloces navíos surcaban las aguas de Caribe causando preocupación y temor a los marinos de la corona de España y su Inquisición en respuesta a la violencia e injusticia cometidas contra ellos y sus familias.

Corsario o «privateer» era el nombre que se concedía a los navegantes que, en virtud del permiso concedido por un gobierno en una carta de marca o patente de corso, capturaban y saqueaban el tráfico mercante de las naciones enemigas de ese gobierno.

El corsario estaba limitado en su acción por la patente, pudiendo sólo capturar mercantes de determinados países y teniendo que repartir botín y rescate con el Estado en muchas ocasiones. Esta es la principal diferencia con el pirata, que atacaba a cualquier buque sin tener que rendir cuentas a nadie. Francis Drake es un buen ejemplo de esa época. Fue y sigue siendo una figura controvertida: en una época en la que Inglaterra y España estaban enfrentadas militarmente, fue considerado pirata por las autoridades españolas, mientras en Inglaterra se le valoró como corsario y se le honró como héroe.

Piratas sefardíes

En el siglo XVI ya aparece registrado uno de los primeros piratas sefardíes que, además, actuó en ocasiones como corsario. Se trata de un judío español llamado Simón Fernández, que se había escapado de la Inquisición. No sabemos cuándo nació, pero sí que provenía de las islas portuguesas de las Azores y que por el año 1571 estaba trabajando con el pirata galés John Callis, ahorcado en Newport en 1576.

Debido a que tanto Fernández como Callis solían atacar principalmente barcos franceses y españoles, el gobierno británico les permitió a ambos operar desde los puertos británicos. Incluso cuando fue encarcelado por el delito de piratería era tal su poderoso círculo de amistades que pronto pudo contar con personas influyentes para sacarlo de la cárcel. Desde 1579 hasta 1583, se embarcó con varias personas allegadas al célebre pirata y corsario inglés sir Walter Raleigh, llegando a convertirse en el capitán piloto del propio Raleigh. En estos viajes, Fernández viajó a las Indias Occidentales, la costa noreste de América del Norte y las Molucas, islas del océano Pacífico ricas en especias.

Curiel, el pirata

En su divulgado artículo Los piratas judíos de Jamaica, Moshé Vainroj destaca la figura del pirata del siglo XVI Yaakob Koriel (o Curiel), nacido de una familia judía que se convirtió al cristianismo bajo la presión de la Inquisición cuando aún era un niño. En su juventud sirvió como capitán de la flota naval española hasta que fue capturado por la Inquisición. Fue liberado más tarde por sus propios marineros, la mayoría de los cuales eran marranos. Animado por sus deseos de retaliación, Yaacob Curiel se dedicó a la piratería llegando a poseer tres barcos piratas bajo su mando. Poco se sabe acerca de lo que le sucedió más tarde. Algunos creen que con el tiempo hizo su camino a la Tierra Santa, estudió Cábala en la ciudad de Safed como alumno de rabí Isaac Luria y murió arrepentido en serena anciandad, siendo enterrado junto a su venerable maestro.

Un pirata con linaje

Atención merece igualmente para Vainroj otro fascinante personaje del siglo XVI encarnado en la figura de David Abrabanel, proveniente de una un ilustre linaje de sabios (a la que perteneció don Isaac Abrabanel), quien logra zafarse de de la persecución inquisitorial y llega a las Antillas convertido en un temido corsario a favor de los ingleses. Abrabanel asoló las costas sudamericanas bajo el pseudónimo de «Capitán Davis», comandando una flamante nave llamada The Jerusalem. Parece ser que se abstenía de atacar naves en en Shabat.

Los alimentos en su embarcación eran rigurosamente casher y la bitácora de viaje de sus naves estaba escrita en caracteres hebreos. El Capitán Davis, uno de cuyos compañeros fue el pirata Subatol Deul, trabó relación, según afirma Vainroj, con el hijo del corsario sir Francis Drake y con él estableció una alianza antiespañola que, en la historia de la piratería caribeña, es conocida como la «Fraternidad de la Bandera Negra» (Black Flag Fraternity).

Piratas magrebíes

Otro corsario especialmente digno de destacar es don Samuel Pallache, judío sefardí, descendiente de rabinos, nacido en Fez en la segunda mitad del siglo XVI y originario de una reputada familia de la España musulmana. En 1591 fue destinado a España como embajador por el sultán de Marruecos Mulay Zaydan Abu Maali y entre los años 1605 y 1608 vivió en Madrid como embajador de Marruecos ostentando su condición de judío en una época en la que la Inquisición española buscaba por todos los medios juzgar a toda persona sospechosa de ser judía.

Rico comerciante, Samuel Pallache obtuvo del sultán de Marruecos el monopolio del comercio con Holanda y en 1608 fue designado por éste como agente representante del Sultán en La Haya, Holanda. El 23 de junio de 1608 fue recibido por el estatúder (stadholder) Mauricio de Nassau, futuro príncipe de Orange, y los Estados Generales de los Países Bajos para negociar una alianza de mutua asistencia contra la corona de España.

Cuando el rey de España Felipe III se negó a devolver al sultán Mulay Zaydan unos valiosos manuscritos a cambio de la liberación de unos prisioneros, el sultán marroquí firmó un acuerdo con Holanda contra España y el 24 de diciembre de 1610 las dos naciones firmaron un tratado reconociendo el libre comercio entre los Países Bajos y Marruecos, que permitió al sultán la compra de barcos, armas y municiones de los holandeses. Sin embargo, Holanda no podía enfrentarse directamente a España debido a la «Tregua de los doce años» pactada un año antes, en abril de 1609. La solución consistió finalmente en un apoyo de Holanda a Marruecos mediante la entrega al embajador marroquí Samuel Pallache de una nave de guerra con una dotación de marineros holandeses y un documento firmado conjuntamente por Holanda y Marruecos encomendándole que «se apoderase de todas las naves españolas y de piratas que encontraran en el camino a los Países Bajos».

Algunas investigaciones parecieron evidenciar que Pallache actuó como un doble agente que pasaba informaciones clasificadas a España en torno a las relaciones Holanda- Marruecos y al mismo tiempo era informante de Marruecos y Holanda en torno a las actividades españolas, y se dice que el simple rumor acerca de dicha ambigüedad fue la causa de que el sultán le retirara sus favores.

Sin embargo, Samuel Pallache continuó sus actividades como comerciante y su amistad personal con el príncipe Mauricio de Nassau le valió una patente de corso que le permitió dedicarse durante varios años a las actividades de corsario bajo la bandera holandesa, reclutando marranos para su tripulación y vendiendo el botín obtenido a lo largo y ancho de las costas marroquíes.

En 1614 capturó un barco portugués e, impedido de llevar su botín a las costas de Marruecos a causa de un fuerte temporal, se vio obligado a fondear en un puerto inglés donde, a instancias del embajador español, fue arrestado y encarcelado. El príncipe Mauricio de Nassau acudió en su ayuda y eventualmente logró traerlo de vuelta a Holanda. Sin embargo, Pallache había perdido toda su fortuna y poco después cayó enfermo. El 4 de febrero de 1616 falleció en La Haya y fue enterrado en el cementerio judío sefardita Beth Hayim de Ouderkerk aan de Amstel, cerca de Ámsterdam.

Judeoportugués Otro entre los más notables del siglo XVII es el portugués Moisés Cohén Henriques, corsario al servicio de Holanda y acreditado por la captura en La Habana de una flota platera en 1628. Su hermano Abraham Cohén, traficante de armas, utilizaba su poder económico para ayudar a conseguir lugares de protección para otros judíos en desgracia.

Moisés Cohén Henriques se alió en 1628 con el holandés Piet Heine, almirante de la Compañía Holandesa de las Indias Occidentales, quien había servido como esclavo durante cuatro años en las galeras de un galeón español. Ambos, Cohén Hnriques y Hein solían atacar barcos españoles fuera de la Bahía de Matanzas que, procedentes de Cuba, se dirigían a Cádiz cargados de oro y plata, apropiándose de sus tesoros.

Más tarde, durante el dominio holandés, Cohén Henriques encabezó a un contingente de judíos hacia las costas de Brasil donde él mismo se estableció en una isla de su propiedad.

Cuando Brasil fue tomado por los portugueses en 1654, Moisés Cohén Henriques huyó de América del Sur y terminó convirtiéndose, nada menos, que en asesor de Henry Morgan, el pirata más conocido de todos los tiempos. Durante los siglos XVI y XVII toda nave de la armada española que se pusiera a tiro de cañón era atacada por los piratas y corsarios judíos, en un acto de venganza contra aquellos que les expulsaron en humillación discriminada, asolando las costas de México y sembrando el terror entre los navegantes españoles. La mayor parte de aquellos se mostraban orgullosos de su origen e identidad y existen documentaciones fidedignas de que daban a sus naves nombres tales como: «Samuel, el Profeta», «La Reina Ester» y «El escudo de Abraham».

Es sumamente difícil conocer con exactitud la cantidad de piratas judíos que surcaron las aguas del Caribe; pero, es cierto que, tal como lo afirma Moshé Vainroj, los viejos cementerios de sus islas están prácticamente sembrados de sepulcros con escrituras hebreas y símbolos de piratería, tal como sucede, por ejemplo, en la tumba de Yaacob Mashaj y de su esposa Deborah en el cementerio judío de Bridgetown, Barbados. En su tumba y en la de su esposa aparece, entre otros símbolos, la típica calavera con las tibias cruzadas.

Especial atención merecen la vieja zona de juderías de Curazao y, sobre todo, la isla de Jamaica, donde todavía en antiguos cementerios judíos es posible ver tumbas abandonadas, casi totalmente derruidas, pero que aún conservan grabados sobre las lápidas los nombres de los difuntos en caracteres hebreos, acompañados a veces por la estrellas de David, junto a los símbolos piratas de las tibias y la calavera.

Cabe señalar, a propósito de lo dicho, que desde el siglo XVI hasta XVIII había muchos marranos o criptojudíos diseminados por el Nuevo Mundo.

Numerosas comunidades judías se unían por rutas de piratería, pues ser israelita en un país gobernado por España o Portugal era ilegal. Por esta razón, cuando Jamaica pasó a manos de la corona británica, en 1670, muchos judíos se radicaron allí. Ya el almirante inglés William Penn (padre del predicador William Penn) al invadir la isla, en 1655, informó que en su tarea invasora tuvo la ayuda de los marranos locales. Para el año 1720, casi el 20% de los residentes de Kingston eran judíos.

Edward Kritzler, periodista afincado en Jamaica, en su libro «Piratas judíos del Caribe » nos deja la idea fundamental de que, pese a que las versiones sobre el mundo pirata en el Caribe están muy ficcionadas, ciertamente fueron «un pequeño grupo de mercaderes y aventureros judíos, los pioneros del comercio pirata en Jamaica», los mismos quienes al mismo tiempo «ayudaron a crear un brote de libertad religiosa ». Estos fueron quienes hicieron de Jamaica un lugar seguro y de refugio para los comerciantes frente a la persecución de la Inquisición española, y a la vez un «centro de comercio pirata» o «centro de bucanería », es decir, el corazón del contrabando que atrajo a los traficantes de productos de la piratería, comúnmente denominados bucaneros.

Los bucaneros franceses A manera de conclusión se hace imperativo mencionar a dos hermanos de origen sefardí quienes actuaron al servicio de la corona de Francia y encabezan la lista de piratas y corsarios más famosos de finales del siglo XVIII y principios del XIX. Se trata de Pierre y Jean Lafitte.

El menor y más conocido de ambos fue Jean Lafitte y su figura fue inmortalizada por Cecil B. DeMille en el film The Buccaneer. Incluso una figura contemporánea a Lafitte, como el célebre poeta Lord Byron, le homenajea en sus versos. La escritora Isabel Allende, en su libro El Zorro, incluye a Lafitte como un personaje clave de la trama, al igual que en su libro publicado en el 2009 La isla bajo el mar. Si bien es muy nombrado como figura histórica y folclórica, tanto los orígenes como la muerte de Jean Lafitte son poco conocidos y constituyen pábulo de especulaciones. Parte de la información que se tiene de éste proviene del presunto diario autobiográfico que se le atribuye.

La versión más extendida es la que le tiene como nacido en Bayona, Francia, de padre francés y madre sefardí cuya familia llegó a Francia huyendo de la Inquisición. Criado en un hogar judío casher, Lafitte contrajo matrimonio con Christina Levine, proveniente de una familia judía danesa.

Los Lafitte establecieron su ideal Reino de Barataria en las ciénagas cercanas a Nueva Orleans después de la compra de Luisiana por parte de los Estados Unidos a Francia, en 1803. En este lugar adquirido por los Lafitte, Jean organizó con su hermano Pierre el comercio del contrabando y la bucanería con los productos obtenidos de sus actividades como corsario en las costas del golfo de México.

Allí, en la bahía de Barataria, a una corta distancia de la costa del Golfo, en el interior de la Gran Isla, construyeron los hermanos su base de operaciones desde donde los barcos mercantes hacían sus entradas y salidas del río Misisipí y desde esta base, en los pantanos de Luisiana, atacaban a los barcos ingleses que surcaban el golfo de México.

Por otra parte, a Jean Lafitte se le acredita junto con su «tripulación de mil hombres» una decisiva intervención marítima en la batalla de Nueva Orleans, la cual decidió la guerra de 1812 y en la que luchó al lado de Andrew Jackson, quien habría de convertirse más tarde en el séptimo presidente de los Estados Unidos. Jean Lafitte salvó con sus barcos y hombres a la ciudad de Luisiana que iba a caer en manos británicas.

Aparentemente los Lafitte habían establecido en Barataria un sistema económico que beneficiaba el desarrollo de aquella zona produciendo cierta prosperidad en la población lugareña por lo que era apreciado por los acaudalados terratenientes y también por los más pobres, quienes podían obtener fuentes de sustento, tanto del comercio como de la participación en la «incursiones» corsarias de Lafitte y su flotilla. Sin embargo, en 1814, estas propiedades fueron confiscadas por el gobernador William C. Claiborne, quien envió tropas contra las que Laffite se negó a combatir para no enfrentar fuerzas estadounidenses.

Al año siguiente, el 8 de enero de 1815, durante el intento de invasión británica a Nueva Orleans, Laffite puso a disposición de Andrew Jackson todos sus hombres, armas y municiones, defendiendo el sitio desde el llamado French Quarter y con su flota desde la costa. La victoria de los americanos fue total y Laffite recibió parte del mérito. Sin embargo, la intención de Laffite de recibir absolución de sus actividades ilegales y que le fuesen devueltas sus propiedades en Barataria no dieron fruto, a pesar de llegar a presentar su solicitud, entregada por su hermano Pierre, al presidente de los Estados Unidos, James Madison.

A finales de 1816 fue reclutado para apoyar el movimiento republicano de México, por lo que se trasladó a Tejas. En 1817 tomó posesión de la isla de Galveston, en manos del pirata francés Luis Miguel Aury, y desarrolló de nuevo actividades corsarias desde esta base.

Nuevamente perseguido por el gobierno de Estados Unidos en 1820 a causa del ataque por parte de uno de sus capitanes del barco mercante «Alabama», Laffite hubo de trasladarse a Nueva Orleans para clamar por su inocencia alegando un malentendido y solicitando la libertad de los tripulantes del barco captor del mercante, los cuales habían sido arrestados.

De regreso a Galveston abandonó Tejas sin oponer resistencia, quemando su propiedad y supuestamente llevando a bordo de su buque insignia The Pride una inmensa cantidad de riquezas. Hay quienes aseguran que en esta época Jean Lafitte actuaba como espía a favor de España.

Después de abandonar Galveston, aparentemente se fue, luego de su salida de Tejas, a la península de Yucatán donde continuó su actividad como corsario. Se encuentra enterrado en Dzilam de Bravo, México. En la década de 1950 apareció el manuscrito de un diario personal, supuestamente atribuible a Jean Lafitte. Narra cómo, en la década de 1820, Lafitte se retira a vivir tranquilamente en San Luis, Misuri, hasta su muerte en la década de 1840, supuestamente pidiendo que no se publicaran sus memorias hasta 107 años después de su muerte.

Jean Lafitte describe en su diario su infancia en la casa de su abuela judía, Sara Madrimal, quien, según él mismo expresa «era una fuente inagotable de atrapantes relatos de familias judías que se escapaban a las mazmorras de la Inquisición».

El manuscrito original del diario fue adquirido en los años 1970 por el gobernador de Tejas, Daniel Price y se encuentra en el Sam Houston Regional Library and Research Center en Liberty.

Si se comprobase su autenticidad, el diario demostraría, entre otras cosas, que Lafitte era judío y que las patentes de corso a las que hacía referencia eran auténticas y, por tanto, su actividad no sería considerada piratería.

Por José Chocrón Cohén

Fuentes: http://www.rafapal.com/?p=24607
http://www.centroestudiossefardies.com/Revista%20Magu%C3%A9n-Escudo/Revista%20156/historias-de-piratas-corsarios-y-bucaneros-por-jose-chocron-cohen

Efecto Tango: La caída del peso argentino sacude con fuerza a las divisas de los emergentes

Los mercados temen un contagio emergente por un nuevo 'Efecto Tango'

La caída del peso argentino sacude con fuerza a las divisas de los emergentes

elEconomista.es en Twitter

La mecha está prendida. El derrumbe que sufrió a última hora del jueves el peso argentino, que protagonizó una caída del 13 %, la mayor de la última década, desató todas las alarmas. Después de que la divisa argentina estuviera intervenida durante los últimos tres años, el banco central de Argentina ya no puede gastar más reservas en respaldar su cotización.

Más que nada porque éstas se sitúan ya en los 29.443 millones de dólares, su nivel más bajo de los últimos siete años. Las réplicas no se hicieron esperar. Desde las bolsas, hasta la deuda. Sin olvidar a las divisas. Sacudió a Europa y a Estados Unidos. Pero sobretodo, a los emergentes.

A falta de una semana para que se celebre la reunión de la Reserva Federal (Fed) y se confirme (o no) un nuevo freno en las compras que realiza la institución para dar oxígeno a su economía, los países emergentes se volvieron a situar en el punto de mira de las ventas de unos inversores que confían también en la expectativa de que este año registrarán crecimientos económicos inferiores al de los países desarrollados.

A pesar de que el Gobierno de Kirchner anunció que permitirá comprar dólares a los particulares para contener el desplome económico, las caídas y el efecto contagio de las divisas continuó un día más. 

El peso argentino sufrió un nuevo descenso del 1,6% contra el euro. Es decir, un euro se intercambiaba por 10,9 pesos argentinos, el cambio más alto desde la creación de la divisa europea. 

Y su derrumbe tuvo un efecto contagio en el resto de divisas emergentes. Sufrieron depreciaciones de más de un 1% contra el euro, el rublo ruso, la lira turca y la rupia india. 

También retrocedieron contra la divisa europea monedas como el rand sudafricano o el won surcoreano (con caídas de en torno al 0,6%).

"¿Supone la devaluación del peso argentino un gran problema? 
No lo creo. Pero sí supone un coste, asumible. 

La depreciación de la lira sí es más grave a nivel mundial. Por su peso, por la inversión internacional que puede revertirse y hasta por la respuesta que pueden dar sus autoridades. 

Pero ya no hablamos sólo de Turquía: muchos países en desarrollo están amenazados en un entorno como el actual de creciente inestabilidad financiera", afirma José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi. Y es que, más que el temor al efecto contagio, la verdadera preocupación reside en que Argentina haga default.

La fuga de capitales vivida en las divisas se repitió en la bolsa. Salvo tres (China, Emiratos Árabes y Arabia Saudí), ninguna cerró en positivo. 

Ni en Europa, ni en EEUU. Pero lejos de ser considerada una recogida de beneficios aislada fruto del Efecto Tango, los expertos consideran que continuará en los próximos días.

"Argentina no puede permitirse seguir consumiendo reservas en divisas para sostener su divisa, lo que pondrá de manifiesto que las cifras reales de su economía distan de las oficiales y precipitará rápidamente el deterioro del cuadro macroeconómico de su economía, actuando a corto plazo como factor potenciador de las tomas de beneficios en las bolsas", sentencia el equipo de análisis de Bankinter.

España, la que más sufre

La más perjudicada fue la española. El Ibex 35 perdió los 10.000 puntos al ceder un 3,64%, hasta los 9.868 puntos. 

Ahora, una vez esfumados los 10.000, el siguiente soporte a vigilar son los 9.250 puntos, según Joan Cabrero, analista de Ágora AF. 

De todo el selectivo, Mapfre, AIG, Gamesa y BBVA fueron los valores más penalizados con caídas superiores al 5%.

En el resto de Europa, ninguna caída superó el 3% de la española. La segunda más castigada fue la francesa, que cedió un 2,79 %. 

Y la tercera, la alemana, que perdió un 2,48%. Quién mejor soportó el golpe fue la portuguesa, con una bajada del 0,97%. Al otro lado del Atlántico, no fue distinto. Las ventas también tiñeron de rojo a Wall Street.

Y si gran parte de la culpa la tuvo Argentina, la desaceleración de la economía China también puso su granito de arena. 

"El mayor castigo que reciben ahora los mercados tiene un nombre: China. Es China, con el riesgo de desaceleración unido a su elevada deuda, lo que más inquieta. Y su impacto negativo se siente en los mercados financieros y en las expectativas de crecimiento mundial", apunta Campuzano.

Pero donde se reflejó de verdad el miedo a todo lo sucedido fue en los CDS argentinos -seguro de riesgo de impago-, que en la semana se han disparado más de 451 puntos básicos, hasta los 2.546 puntos en los que se situó el viernes, su nivel más alto desde octubre. 

Así, los inversores pagan 254.600 dólares por cubrir cada millón en deuda argentina -50.000 dólares más en dos días-. 

Argentina es el país con mayor riesgo de impago del mundo.

Al igual que en el mercado de divisas, en el de los seguros de crédito también se produjo un efecto contagio hacia otros países. 

El CDS de Venezuela se disparó 118 puntos básicos en un solo día, de forma que para asegurar cada millón de deuda venezolana el mercado exigía 142.700 dólares (12.700 dólares más en sólo dos días). 
En el resto de países latinoamericanos el riesgo país también se vió incrementado, 9 puntos en el caso de Costa Rica y 4 puntos en el de Perú y Brasil.


Los acreedores de la deuda reestructurada argentina se ofrecen a negociar con los fondos de inversión
REUTERS - 18:24 - 24/01/2014

Foto: Archivo

El grupo de inversores que administra los 7.000 millones de dólares de la deuda soberana argentina reestructurada ha anunciado que está dispuesto a negociar con los tenedores de bonos que se negaron a participar en los canjes propuestos por el Gobierno, lo que podría poner fin a una década de litigio.

Así lo ha anunciado a través de un comunicado Linklaters, asesor legal del grupo Tenedores de Bonos Canjeados, que actualmente representa un 30% de la deuda soberana argentina reestructurada. 


"Linklaters está trabajando activamente con Deutsche Bank y se encuentra en proceso de formalizar un compromiso con Deutsche Bank para que le asesore en relación con la estructuración de una transacción entre acreedores", ha dicho. Las automovilísticas congelan la venta de vehículos por la devaluación del peso.
El asesor legal ha creado una comisión especial para negociar con los 'holdouts'. Gramercy Funds Management, uno de los miembros de este equipo 'ad hoc', dijo el pasado mes de noviembre que el objetivo era evitar un cese de pagos por parte de Argentina. Kicillof califica de "positiva" la reunión con el Club de París para pagar la deuda argentina.

Linklaters representa a los acreedores que poseen cerca del 93% de la deuda soberana argentina que acordaron participar en los canjes de 2005 y 2010, por los que obtuvieron entre 25 y 29 céntimos por cada dólar.
Los 'holdouts' liderados por NML Capital, unidad de Elliott Management de Paul Singer, y Aurelius Capital Management se negaron a participar en estas reestructuraciones, exigiendo al Gobierno argentino el pago de todo el importe.

El año pasado, un tribunal estadounidense ordenó a Argentina a pagar a estos fondos de inversión 1.300 millones de dólares, al mismo tiempo que continúa haciendo frente al vencimiento de los pagos de la deuda soberana reestructurada.

El Ejecutivo de Cristina Fernández de Kirchner ya ha anunciado que no cumplirá este fallo, que podría llevar al país sudamericano a un nuevo impago, debido al acelerado descenso de sus reservas internacionales.

C. García / M. López / I. M. Gaspar
http://armakdeodelot.blogspot.com.es/2014/01/efecto-tango-la-caida-del-peso.html