2 EJEMPLOS QUE EXPLICAN LA DECADENCIA DE EEUU
Quien más, quien menos, empieza a ser consciente de la acelerada decadencia que está viviendo EEUU como superpotencia mundial.
Las causas para esta “caída del imperio” són múltiples y podrían escribirse gruesos tratados políticos, económicos, sociológicos y militares sobre ellos.
Pero en este artículo, solo expondremos un par de ejemplos que, de alguna forma, exponen el por qué de esta decadencia imparable.
UN CASCO DE 400.000 DÓLARES
¿Alguien cree que es sostenible económicamente un ejército en el que un casco puede costar 400.000 dólares?
Bien, pues esto es lo que se está gastando el gobierno de EEUU (con dinero de sus contribuyentes) para equipar a los pilotos del avión de combate F-35 Lightning II.
Cabe destacar que el súper-mega-ultra-moderno F-35 es considerado el mayor fiasco de la aviación militar a lo largo de su historia.
Una pequeña introducción al maravilloso mundo del F-35, tal y como nos lo explican en la web de Gizmodo:
Estaba destinado a ser el caza más avanzado de la historia pero va camino de quedarse en el mayor fiasco. Con casi una década de retraso en su desarrollo y un coste el doble de lo estimado inicialmente, el F-35, fabricado por Lockheed Martin, sigue presentando infinitos problemas técnicos que ponen en duda su futuro.
El primero de ellos fue una horrenda planificación desde el 2001 y cambios constantes en el diseño y los requerimientos tecnológicos.
La principal consecuencia de esa terrible planificación fue que los costes se dispararon.
Inicialmente, el coste del programa iba a ser de 233.000 millones de dólares. En 2013, sin embargo, el coste se disparó a 390.000 millones de dólares, un 67% más. Hoy sigue rondando la cifra de los 400.000 millones (y aumentando sin parar).
Sin embargo, si nos fijamos en la línea de número de aviones a suministrar la cifra es aún peor. Los 233.000 millones de dólares originales iban a comprar 2.886 F-35. Más de una década después, los 390.000 millones de dólares comprarán 2.457 aviones. Es decir, menos aviones a un precio muchísimo más alto: casi 160 millones por unidad.
Y el asunto del casco del piloto del F-35 es especialmente chocante.
Teniendo en cuenta que cada casco cuesta casi medio millón de dólares y que se van a necesitar 2.400 de esos cascos, la factura total, solo en cascos de piloto, se acercará a los ¡1000 millones de dólares!
Este gasto en aviones y cascos de piloto, podría justificarse de alguna manera, si permitiera que dichos aviones fueran una arma invencible en los cielos…pero no es así.
Precisamente es todo lo contrario.
Como informamos en el Microlector:
Parece que el ridículo del avión más caro y sofisticado de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el avión sigiloso F-35, no va a terminar nunca.
En unos recientes tests en la base aérea de Edwards, en California, se ha realizado un simulacro de combate aéreo entre el ultra moderno F-35 y un F-16, un avión inicialmente diseñado en la década de 1970…y el F-35 ha perdido el enfrentamiento.
F-16, frente. F-35, fondo
Según el piloto de pruebas del F-35, el nuevo avión, que ha costado más de 350.000 millones de dólares, es demasiado lento y difícil de manejar para esquivar el fuego enemigo.
Dicho piloto consideró que el caro avión es totalmente inapropiado para establecer un combate con otras aeronaves dentro del alcance visual.
El pilot Informó que el F-35, diseñado por Lockheed Martin, estaba en desventaja cada vez que se realizaba una maniobra, a pesar de que el F-16 está lastrado por dos tanques de combustible extra.
Además, según el piloto de pruevas, el casco hecho a medida de alta tecnología y que cuesta medio millón de dólares y que presuntamente le debe dar al piloto una vista de 360 grados fuera del avión, le impedía mover cómodamente la cabeza dentro de la estrecha cabina y eso significaba que el F-16 podía acercarse por detrás sin que él se diera cuenta.
“El casco es demasiado grande para el espacio interior de la cabina para mirar adecuadamente hacia atrás”
¿Alguien es consciente de la magnitud del ridículo que está haciendo los EEUU, solo con este avión de combate?
Es obvio que en todo este asunto, lo que predomina es una corrupción rampante y generalizada. Todos estos cientos de miles de millones en tecnologías inútilmente complicadas, van a parar a los bolsillos de las empresas armamentísticas y de las élites que las controlan.
EEUU ya tiene un largo historial de corrupción relacionada con el sobre gasto militar,.
En la década de 1980, se produjo el famoso escándalo del “asiento de inodoro de seiscientos dólares”.
A partir de 1981, el presidente Ronald Reagan inició una expansión en el tamaño y las capacidades de las fuerzas armadas de Estados Unidos, lo que implicó mayores gastos en nuevas adquisiciones de armas.
A mediados de la década de 1980, este gasto se convirtió en un escándalo cuando el Proyecto de Supervisión del Gobierno informó que el Pentágono había pagado en exceso por una amplia variedad de artículos; los ejemplos más notorios y escandalosos, fueron pagar 435 dólares por un martillo, 600 dólares por un asiento de inodoro, y 7.000 dólares para una cafetera.
Pero que nadie se engañe: la decadencia de EEUU no se debe solo a la corrupción asociada básicamente al capitalismo (aunque la corrupción no conoce fronteras ideológicas, como bien sabían en la antigua Unión Soviética); la decadencia de EEUU está basada en una forma de pensar determinada y en una actitud concreta a la hora de afrontar los problemas y los proyectos, como se demuestra claramente en el siguiente ejemplo…
EL AGUA QUE BEBEN LOS ASTRONAUTAS
Los EEUU y Rusia están enfrentados en escenario de la política mundial. Sin embargo, en el espacio, los astronautas norteamericanos y los cosmonautas rusos, colaboran estrechamente en la Estación Espacial Internacional (ISS).
Curiosamente, cada sección de la ISS, ha dispuesto de sistemas de soporte vital diferenciados para cada país, lo que ha servido para darnos una nueva lección de incompetencia norteamericana.
Durante años, el lado estadounidense de la ISS ha utilizado el yodo como agente para purificar el agua que consumen los astronautas, mientras que la parte rusa aprovechaba el enorme poder antibacteriano de la plata coloidal como agente purificador del agua.
Y durante todo este tiempo, los astronautas de EEUU, han estado pidiendo parte del agua sobrante de la parte rusa, puesto que el proceso de purificación de agua de Rusia, siempre ha sido mucho más eficiente que el de los EEUU.
Sin embargo, los EEUU han tardado años en aceptar la evidencia, hasta que finalmente, la NASA, tomó recientemente la decisión de adoptar de una vez por todas el método de purificación del agua de los rusos, que es más fácil, más eficaz, y mucho más eficiente que la adición de yodo.
“A diferencia del yodo, la plata no tiene que ser filtrada y extraída del agua”, explica un informe de Bloomberg, en el que señala que el yodo tiene que ser filtrado fuera del agua de Estados Unidos después de su uso.
Además, el exceso de yodo puede causar que la glándula tiroides se agrande, mientras que la plata ionizada en estado coloidal, según diversos estudios, no tiene efectos negativos para el organismo (y en todo caso, necesita de cantidades mucho mayores para ello).
Y he aquí otro de los aspectos contradictorios del asunto.
Mientras que la NASA se ha visto obligada a aceptar que la plata coloidal es un agente purificador eficaz, la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de EEUU), se dedica sistemáticamente a perseguir y poner trabas a todo tipo de empresas que comercializan suplementos de plata coloidal, por considerarlos “inseguros”.
(aunque siempre aconsejamos informarse bien antes y tomar precauciones)
Nanopartículas de plata en estado coloidal
Sin embargo, la posible toxicidad de la plata coloidal, tal y como muchos defienden, debe ser puesta en entredicho: el hecho de que la plata sea ahora el principal método para potabilizar el agua de los astronautas dice mucho de su potencial terapéutico, de su poder bactericida y de su baja toxicidad.
Durante décadas, sino siglos, se ha sabido que la plata es un agente bactericida y purificador del agua.
Los rusos lo adoptaron directamente y sin más rodeos para purificar el agua en la estación espacial MIR.
Sin embargo, los norteamericanos “se complicaron la vida” inncecesariamente, utilizando un sistema de purificación efectivo, pero ineficiente, basado en el yodo, que exigía de un proceso mucho más largo y complejo.
Y esto, lo que hace es reflejar una determinada forma de pensar y de actuar ante los problemas por parte de los EEUU, a nivel social.
Es un asunto muy curioso y digno de estudio a nivel psicológico.
Su propia riqueza sobredimensionada, la fácil disponibilidad de excesivos recursos obtenidos con relativo poco esfuerzo y las prácticas capitalistas que permiten hacer uso de todos esos recursos para enriquecer a unos cuantos, han derivado en una suerte de deformidad psicológica específicamente norteamericana.
Todo en EEUU tiene que ser “grande”: las botellas de refrescos, las hamburguesas, los coches, el gasto energético…
Y todo tiene que ser complicado tecnológicamente, aunque tanta complicación sea innecesaria.
Pero nos encaminamos a un mundo en el que predominará la escasez de recursos y la necesidad de eficiencia y ahorro.
Y la forma de pensar de los norteamericanos no tiene cabida en él.
Ni tan solo en el aspecto militar tendrán futuro. Ahí están sus enormes y carísimos portaaviones; poderosísimas armas de guerra…que pueden ser fácilmente destruidas en la actualidad por un simple misil enemigo. Algo que podemos ver en el artículo:
Por lo que parece, a EEUU le esperan tiempos muy duros, a medida que vayan sucediéndose sus ridículos públicos, como el recientemente experimentado con el carísimo dirigible que se desató y se estrelló en Pennsylvania (un programa de dirigibles que cuesta la friolera de 2700 millones de dólares).
Por esa razón, podemos concluir que EEUU está en decadencia y que su imperio se acerca a su final…por razones que en su raíz profunda, son psico-sociales.
No parecemos ser conscientes de ello, pero las naciones tienen una psique propia, debida a sus características culturales y sociales…
Y eso nos lleva a preguntarnos: ¿Hay terapia para la psique norteamericana o acabará encerrada en un manicomio?