Imagínese que se encuentra en un templo antiguo, con poca luz solar.
Una luz que, de forma tenue, se introduce a través de las pocas grietas existentes en los muros.
Un oficiante del templo enciende la llama votiva del altar y, de pronto, se echa hacia atrás.
¡Una estatua comienza a moverse mientras se realizan las ofrendas al dios para quien se creó dicho templo! Una puerta se abre tras el altar y la estatua de dicho Dios aparece.
Detrás de tal derroche místico se escondía el ingenio de los inventores, no los milagros de los dioses.
Herón de Alejandría (10–70 A.D.), ingeniero y matemático helenístico, describió en “La Neumática” (uno de sus muchos tratados sobre mecánica), cómo funcionaban tales dispositivos:
la estatua descansaba en un pedestal conectada al altar por un tubo que se introducía en el interior de la escultura donde había una taza sujeta.
la estatua descansaba en un pedestal conectada al altar por un tubo que se introducía en el interior de la escultura donde había una taza sujeta.
El agua era depositada dentro del pedestal a través de un agujero que luego se taponaba.
Altar maravilloso, imagen del libro “Magia, Ilusiones de Escenario y Diversiones Científicas Incluyendo Trucos Fotográficos.”
Cuando el altar se encendía, el aire se expandía con el calor y empujaba el tubo dentro del pedestal obligando al agua a subir por el tubo, por la taza y a salir.
Las puertas se abrían automáticamente por un mecanismo similar.
Aunque en este caso, en vez de taza de agua, se necesitaba de un cubo que, al llenarse con el líquido elemeno, se volvía pesado, sirviendo como contrapeso.
A su vez el cubo descendía por el peso del agua, tirando de un cordón que envolvía a una serie de cilindros adjuntos a las puertas, haciendo que éstas se abriesen.
Mecanismo para abrir y cerrar las puertas cuando se encendía un fuego sobre el altar, ilustrado en el libro “Magia, Ilusiones de Escenario y Diversiones Científicas Incluyendo Trucos Fotográficos.”
Las puertas de los templos se abrían cuando se encendía un fuego sobre el altar, ilustrado en el libro “Magia, Ilusiones de Escenario y Diversiones Científicas Incluyendo Trucos Fotográficos.”
Adicionalmente se añadían a la magia de los templos, diversas estatuas de gran tamaño de los dioses que, en algunos casos, tenían cavidades interiores hasta donde los sacerdotes se introducían, a través de túneles secretos, para entregar oráculos y haciendo que dichas estatuas divinas pareciera que hablaban.
San Agustín dijo que las lámparas que ardían de forma perpetua en el templo de Amón en Egipto y otros templos, como los descritos por Plutarco, quizás se mantuvieran encendidas por la intervención de demonios.
El Padre Athanasius Kircher (1602–1680), considerado por algunos como el padre de la Egiptología, cita a un árabe de nombre Schiangia:
“En Egipto había un prado cuyas zanjas estaban repletas de brea y betún líquido.
Filósofos, quienes comprenden las fuerzas de la naturaleza, construían canales que conectaban sitios como estos con lámparas ocultas en el fondo de las criptas subterráneas.
Por estos medios la lámpara, una vez encendida, quema eternamente, por la afluencia continua de betún y la falta de combustibilidad de la mecha.”
Un grabado en madera de Athanasius Kircher (1602-1680). (Biblioteca Del Congreso)
En el libro “Magia, Ilusiones de Escenario y Diversiones Científicas Incluyendo Trucos Fotográficos.” Albert A. Hopkins escribió que un artificio de esta naturaleza pudiera haber sido lo que mantenía vivas las llamas descritas por Plutarco:
“Sólo fue necesario, de hecho, que la mecha, hecha de tela de asbestos o alambre de oro, se mantuviera intacta, y el cuerpo de la lámpara se comunicará con una reserva puesta en un apartamento vecino de tal forma que el nivel de aceite se mantenga constante.”
Plinio el Viejo (23–79 A.D.), antiguo científico e historiador romano, escribió que cuando las rejas del laberinto de Tebas eran abiertas, un ruido como de un relámpago sonaría.
Esta gran descripción pudo deberse al engranaje que ocultaban. Heron de Alejandría describió por su parte cómo hacer sonar una trompeta al abrir una puerta.
Aparato para hacer sonar una trompeta cuando se abre la puerta del templo, dibujo del libro “Magia, Ilusiones de Escenario y Diversiones Científicas Incluyendo Trucos Fotográficos.”
De esa forma, cuando se abría la puerta, un sistema de poleas, varillas y cordones empujaban un cilindro sólido dentro de un cubo con agua, como en la Figura 1. Luegom el Aaire comprimido por el agua era empujado a través de la trompeta, haciendo que ésta sonase.
Imagen Destacada: Bocetos de Invenciones de Leonardo da Vinci. Fuente: BigStockPhoto
El artículo ‘ Magia Antigua: Las ilusiones creadas en Templos por Inventos Increíbles’ . Fue publicado originalmente en The Epoch Times y ha sido republicado con permiso.
Por: Tara MacIsaac , Epoch Times
3 MAYO, 2015 - 04:30 ANCIENT-ORIGINS
https://www.ancient-origins.es/artefactos-tecnolog%C3%AD-antigua/magia-antigua-las-ilusiones-creadas-templos-por-inventos-incre%C3%ADbles-002481