El Gobierno ha tirado la toalla con la inflación y sigue gastando como si no hubiera un mañana
José Ramón Riera
26/04/2023
Actualizada 04:30
Los precios han vuelto a subir este mes de marzo un 0,4 % a pesar de que los precios energéticos están en caída libre. Por mucho que el Gobierno quiera sacar pecho y nos diga que está controlado, la inflación subyacente está en un 7,5 % y podría colocar el índice mensual en un 5-6 %.
La situación es preocupante: de los doce subíndices de los que consta el IPC, solo dos están en negativo. Y, lo que es peor, si miramos el resultado mensual, hay siete por encima de la media del 0,4 %.
El Gobierno ha tirado la toalla con la inflación y sigue gastando como si no hubiera un mañana, lo que retroalimenta el aumento de precios con el excesivo gasto público.
La vivienda, que incluye la energía, cae un 2 % respecto al mes anterior, por lo que ya no cabe seguir hablando de la guerra de Ucrania. Las comunicaciones también bajan un 0,1 %.
El índice que peor se comporta en marzo es el de vestido y calzado, que aumenta un 3,2 % por delante de los temidos alimentos, que lo hace un 1,1 %. Restaurantes y hoteles, junto a ocio y cultura incrementan su tasa un 0,9 %, seguidos de bebidas alcohólicas (+0,7 %), muebles y artículos del hogar (+0,6 %) y otros bienes y servicios (0,5 %).
Desde una comparativa anual, la energía ha caído un 16,2 %, lo que permite al IPC respirar al 3,3 %. Pero en este punto debemos recordar que el INE cambió completamente el método de cálculo de este subíndice y llevamos doce meses pidiendo un informe paralelo para ver qué estaría pasando si siguiese el modelo anterior.
El otro subíndice que baja sustancialmente es el de transporte, que lo hace en un 4,8 %. Por debajo del 3,3 % están la enseñanza (+1,6 %), las comunicaciones (+2,4 %) y el vestido y el calzado (+3,2 %).
Pero donde tenemos graves problemas es, sin duda, en alimentación que, con una subida del 16,5 % anual, sigue haciendo muchísimo daño a las familias con menores ingresos.
Elecciones a la vuelta de la esquina
El Gobierno sigue sin darse cuenta de es el índice que más le va a castigar en las elecciones. Si las bebidas alcohólicas está en un 8,5 %, la gente puede prescindir de ellas, pero no puede dejar de comprar carne, pescado, huevos, legumbres, verduras frescas o patatas.
Los artículos para el hogar es otro subíndice que toca directamente los bolsillos de las familias. Tener una inflación anual del 7,3 % hace el mismo daño que los trabajadores que tienen que comer de menú y han sufrido un incremento del 7,8 %.
El Gobierno se ha quedado sin ideas. No le ha dado la gana deflactar el IRPF, no le ha dado la gana extender la reducción del IVA, sigue gastando sin ningún control y sigue ingresando a espuertas en impuestos. Pero las elecciones municipales y autonómicas están a la vuelta de la esquina y la falta de medidas va a pasar factura.
https://www.eldebate.com/economia/20230426/no-hay-quien-pare-subida-alimentos-hay-elecciones-vuelta-esquina_110496.html