El naturalista y criptozoólogo estadounidense Ivan T. Sanderson acuñó el término OOPArt, que significa artefacto fuera de lugar (out of place artifact en inglés).
Estos son objetos de interés histórico, arqueológico o paleontológico que se han encontrado en un lugar muy inusual, considerándose demasiado avanzados para su tiempo o que demuestran la presencia de los humanos antes de que se supiera que existían.
El acrónimo es usado raramente por los historiadores o científicos y se limita principalmente a la terminología de los criptozoólogos, defensores de las teorías de los antiguos los astronautas y viajes en el tiempo.
Los detractores argumentan que algunos expertos usan métodos cuestionables para interpretar estos sorprendentes hallazgos. Creen que la mayoría de los OOPArts son simplemente interpretaciones erróneas o de la suposición de que una cultura particular no podría haber creado un artefacto o tecnología debido a su falta de conocimiento.
Pero incluso así se han descubierto cientos de OOPArts en todo el mundo que continua sin explicación. Dicho esto, si Cristóbal Colón descubrió el Nuevo Mundo en 1492, entonces, ¿cómo una moneda española acuñada 200 años antes de su llegada ha terminado en Utah?
Esa es la pregunta que los funcionarios del Servicio de Parques Nacionales (National Park Service o NPS en sus siglas en inglés) están tratando de responder luego del reciente descubrimiento de dos misteriosas monedas cerca del lago Powell.
Las extrañas monedas
Según ha informado el medio estadounidense KSL, el pasado septiembre un excursionista caminaba cerca de Halls Crossing Marina cuando se encontró con dos objetos circulares de metal que pensó que eran basura, una del tamaño de “25 centavos” y la otra más pequeña que una moneda de “10 centavos”.
Pero cuando los miró más de cerca más tarde, observo atónito que realmente eran dos monedas españolas de hace cientos de años.
El excursionista comenzó a buscar monedas en Internet y descubrió que la más grande coincidía con las monedas españolas acuñadas en Madrid en la década de 1660, mientras que la más pequeña parece que se remonta a la década de 1290.
Controversia con las líneas temporales
Parece ser que la moneda más pequeña es la que ha creado misterio al descubrimiento, ya quees anterior a la llegada de Colón al Nuevo Mundo.
También es curioso como las monedas españolas han acabado en Utah, ya que los viajes de exploración posteriores a través del oeste americano no están cerca del área donde se ha encontrado la moneda.
Según los historiadores, el conquistador español Francisco Vázquez de Coronado fue el primero en viajar cerca de Utah en su búsqueda de las míticas “Siete ciudades de oro” a principios de la década de 1540. Pero lo más cerca que llegó fue hasta las aldeas Hopi en el norte de Arizona, más de 160 kilómetros al sur.
El excursionista entregó las monedas al Servicio de Parques Nacionales después del descubrimiento, y los funcionarios ahora están buscando expertos que les ayuden a averiguar si las monedas son reales y, de ser así, cómo terminaron en el parque.
Varias teorías
Brian Harmon, el arqueólogo del Servicio de Parques Nacionales dijo a Business Insider que existen algunas posibilidades diferentes que se están investigando.
Esas posibilidades incluyen escenarios en los que las monedas son reales y fueron traídas al área por los primeros exploradores o colonos españoles, y terminaron en Utah después de ser intercambiadas. Otra opción es que sean reales, pero se perdieron accidentalmente en el lago, tal vez por un buscado de tesoros.
Finalmente, existe la posibilidad de que las monedas sean falsas o reproducciones. Si bien Harmon, admite que no es un experto en monedas, cree que son verdaderas y que terminaron en Utah por un antiguo colono o explorador español, ya que significaría que había una presencia española en la zona mucho antes de lo que inicialmente se creía.
Los funcionarios del parque mantuvieron el descubrimiento en secreto hasta hace poco, y no han querido revelar la ubicación exacta donde se descubrieron las monedas. También advierten que el uso de detectores de metales en los parques nacionales es ilegal.
El arqueólogo estadounidense dijo que está pensando viajar al lugar donde se encontraron las monedas para buscar pistas sobre cómo llegaron las monedas.
Y esto ha provocado un acalorado debate en las redes sociales sobre el verdadero origen de las moneadas.
Es cierto que son muchos los coinciden con la teoría de Brian Harmon, pero también es cierto que otros señalan que las monedas son OOPArts, artefactos fuera de lugar y de tiempo.
Además, recuerdan que el hallazgo en Utah es similar a la misteriosa moneda encontrada en una obra en México en 2018.
En este caso lo que más le llamó la atención fue las inscripciones que había grabado en ella: 2039, el símbolo del Partido Nazi, el águila y la esvástica, además de unas palabras escritas en español que decían “Nueva Alemania”.
¿Qué piensas sobre las monedas de Utah? ¿Se trata de OOPArts? ¿Una prueba de viajeros del tiempo? ¿O hay una explicación lógica y racional?
Por MEP
Publicado el 10/05/2019