Un estudio reciente basado en el modelado de la geología y los datos satelitales de Nueva York ha llegado a conclusiones alarmantes de que la ciudad se está hundiendo lentamente y sus rascacielos están contribuyendo a su destrucción. El hundimiento, o el hundimiento gradual de la superficie de la Tierra, ocurre cuando los depósitos blandos o las cargas que presionan el suelo hacen que se profundice. Aunque las causas del hundimiento son muchas, rara vez se ha estudiado el efecto del peso de las propias ciudades.
Un estudio realizado por científicos del Servicio Geológico de EE. UU. mostró que Nueva York se está hundiendo a un ritmo de 1-2 milímetros por año bajo el peso de sus rascacielos. Si bien unos pocos milímetros pueden parecer una cantidad pequeña, algunas áreas de la ciudad se están hundiendo a un ritmo mucho más rápido, comparable al ritmo al que las placas tectónicas se recuperan del derretimiento de los glaciares.
Este hundimiento podría ser un problema para una ciudad baja de más de 8 millones de habitantes. Los resultados obtenidos deben servir de impulso para el desarrollo de estrategias para mitigar y contrarrestar el creciente riesgo de inundaciones y aumento del nivel del mar.
También es un recordatorio de la grandeza de la construcción humana. Según los científicos, el peso de todas las estructuras creadas por las personas ya supera el peso seco de toda la vida en la Tierra. Los edificios y las carreteras pesan más que todos los árboles y arbustos juntos, y el plástico duplica el peso de los animales.
Nueva York no es la única ciudad que sufre hundimientos. Una cuarta parte de la capital de Indonesia, Yakarta, podría quedar bajo el agua para 2050. Algunas áreas de la ciudad se están hundiendo 11 centímetros al año debido a la extracción de agua subterránea. Más de 30 millones de residentes de Yakarta están considerando actualmente reubicar la ciudad o intensificar la acción climática, incluido el cambio a autobuses eléctricos.
Un estudio de 2022 que abarcó 99 ciudades costeras de todo el mundo descubrió que el hundimiento podría plantear un problema grave, quizás incluso subestimado, en comparación con el aumento del nivel del mar. En la mayoría de las ciudades estudiadas, la tierra se hunde más rápido de lo que sube el nivel del mar, lo que significa que los residentes experimentarán inundaciones antes de lo que predicen los modelos climáticos.
Para Nueva York y otras ciudades que sufren hundimientos, esto significa que se deben tomar medidas urgentes para proteger la infraestructura y la población de la ciudad. La construcción de islas artificiales sostenibles, el refuerzo de presas y la sensibilización sobre los riesgos climáticos podrían ser estrategias clave para hacer frente a este problema.
Además, es necesario replantear el enfoque urbanístico y tener en cuenta el factor de la instalación en el desarrollo de nuevos proyectos. Es importante tener en cuenta no solo el peso de los edificios, sino también el estado de las capas de suelo sobre las que se construyen. El estudio se publica en Earth's Future
https://www.extranotix.com/2023/05/nueva-york-se-esta-hundiendo-lentamente.html