La Tierra se dirige inevitablemente hacia una nueva era de hielo, al menos eso piensan los científicos.
Entre los años 2020 y 2030, los ciclos solares se cancelarán entre sí llevando a un fenómeno conocido como «mínimo de Maunder», que previamente tuvo lugar en la «mini era de hielo» producida entre 1646 y 1715 que llegó a congelar las aguas del río Támesis.
Montaje de imágenes de la actividad solar entre agosto de 1991 y septiembre de 2001 donde se muestra la variación de manchas solares.
Un nuevo modelo de ciclo solar está produciendo predicciones precisas sin precedentes de irregularidades dentro del periodo de actividad de once años de nuestra estrella. El modelo se basa en los efectos dinamo en dos capas del Sol, uno cerca de la superficie y otro profundidad dentro de su zona de convección.
Las predicciones del modelo sugieren que la actividad solar se reducirá en un 60 por ciento durante la década de 2030 hasta condiciones vistas por última vez durante la «mini edad de hielo» que comenzó en 1645.
Los resultados han sido presentados por Valentina Zharkova, profesora de Matemáticas en la Universidad de Northumbria, en la reunión de la Royal Astronomical Society, que celebra esta semana en Gales su reunión nacional. Hace 172 años desde que un científico apreció por primera vez que la actividad del Sol varía en un ciclo que dura alrededor de 10 a 12 años.
Pero cada ciclo es un poco diferente y ninguno de los modelos ha conseguido explicar las causas de estas fluctuaciones completamente. Muchos físicos solares atribuyen estos ciclos a una dinamo causada por convección del fluido en lo profundo del Sol. Ahora, Zharkova y sus colegas han encontrado la adición de un segundo dínamo, cerca de la superficie, que completa el cuadro con sorprendente precisión.
El mínimo de Maunder es el nombre dado al período de 1645 a 1715, cuando las manchas solares desaparecieron de la superficie del Sol, tal como observaron los astrónomos de la época. Recibe el nombre del astrónomo solar E.W. Maunder quién descubrió la escasez de manchas solares durante ese período estudiando los archivos de esos años.
«Hemos encontrado componentes de onda magnética que aparecen en pares, originarios de dos capas diferentes en el interior del Sol. Ambos tienen una frecuencia de aproximadamente 11 años, aunque esta frecuencia es ligeramente diferente, y se compensan en el tiempo. Durante el ciclo, las ondas fluctúan entre los hemisferios norte y sur del Sol.
Combinando ambas ondas juntas y comparándolas con los datos reales para el ciclo solar actual, encontramos que nuestras predicciones mostraron una precisión de 97%», dijo Zharkova. Zharkova y sus colegas obtuvieron su modelo usando una técnica llamada «análisis de componentes principales»de las observaciones de campo magnético desde el Observatorio Solar Wilcox en California.
Examinaron tres ciclos de valoración de la actividad del campo magnético solar, que abarca el período 1976-2008. Además, compararon sus predicciones con números promedio de manchas solares, otro fuerte indicador de la actividad solar.
Todas las predicciones y observaciones fueron muy igualadas. El mínimo de Maunder en 400 años de actividad solar medida por el número de manchas solares. De cara a los próximos ciclos solares, el modelo predice que el par de ondas quede compensado cada vez más durante el Ciclo 25, que culmina en 2022.
Durante el Ciclo 26, que cubre la década 2030-2040, las dos ondas quedarán exactamente fuera de sincronización y esto causará una reducción significativa en la actividad solar.
«En el ciclo 26, las dos ondas se reflejan exactamente entre sí: llegando al mismo tiempo pero en hemisferios opuestos del Sol. Su interacción será perjudicial, hasta casi anularse entre sí. Prevemos que esto dará lugar a un mínimo de actividad solar.
Cuando hay separación de fases completa, tenemos las condiciones vistas por última vez durante el mínimo de Maunder hace 370 años», explica. Publicado el 10 de julio de 20150 comentarios Etiquetas: era de hielo , hielo , ice
Artículo publicado en MysteryPlanet.