Los mercados temen un contagio emergente por un nuevo 'Efecto Tango'
La caída del peso argentino sacude con fuerza a las divisas de los emergentes
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La mecha está prendida. El derrumbe que sufrió a última hora del jueves el peso argentino, que protagonizó una caída del 13 %, la mayor de la última década, desató todas las alarmas. Después de que la divisa argentina estuviera intervenida durante los últimos tres años, el banco central de Argentina ya no puede gastar más reservas en respaldar su cotización.
Más que nada porque éstas se sitúan ya en los 29.443 millones de dólares, su nivel más bajo de los últimos siete años. Las réplicas no se hicieron esperar. Desde las bolsas, hasta la deuda. Sin olvidar a las divisas. Sacudió a Europa y a Estados Unidos. Pero sobretodo, a los emergentes.
A falta de una semana para que se celebre la reunión de la Reserva Federal (Fed) y se confirme (o no) un nuevo freno en las compras que realiza la institución para dar oxígeno a su economía, los países emergentes se volvieron a situar en el punto de mira de las ventas de unos inversores que confían también en la expectativa de que este año registrarán crecimientos económicos inferiores al de los países desarrollados.
A pesar de que el Gobierno de Kirchner anunció que permitirá comprar dólares a los particulares para contener el desplome económico, las caídas y el efecto contagio de las divisas continuó un día más.
El peso argentino sufrió un nuevo descenso del 1,6% contra el euro. Es decir, un euro se intercambiaba por 10,9 pesos argentinos, el cambio más alto desde la creación de la divisa europea.
Y su derrumbe tuvo un efecto contagio en el resto de divisas emergentes. Sufrieron depreciaciones de más de un 1% contra el euro, el rublo ruso, la lira turca y la rupia india.
También retrocedieron contra la divisa europea monedas como el rand sudafricano o el won surcoreano (con caídas de en torno al 0,6%).
"¿Supone la devaluación del peso argentino un gran problema?
No lo creo. Pero sí supone un coste, asumible.
La depreciación de la lira sí es más grave a nivel mundial. Por su peso, por la inversión internacional que puede revertirse y hasta por la respuesta que pueden dar sus autoridades.
Pero ya no hablamos sólo de Turquía: muchos países en desarrollo están amenazados en un entorno como el actual de creciente inestabilidad financiera", afirma José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi. Y es que, más que el temor al efecto contagio, la verdadera preocupación reside en que Argentina haga default.
La fuga de capitales vivida en las divisas se repitió en la bolsa. Salvo tres (China, Emiratos Árabes y Arabia Saudí), ninguna cerró en positivo.
Ni en Europa, ni en EEUU. Pero lejos de ser considerada una recogida de beneficios aislada fruto del Efecto Tango, los expertos consideran que continuará en los próximos días.
"Argentina no puede permitirse seguir consumiendo reservas en divisas para sostener su divisa, lo que pondrá de manifiesto que las cifras reales de su economía distan de las oficiales y precipitará rápidamente el deterioro del cuadro macroeconómico de su economía, actuando a corto plazo como factor potenciador de las tomas de beneficios en las bolsas", sentencia el equipo de análisis de Bankinter.
España, la que más sufre
La más perjudicada fue la española. El Ibex 35 perdió los 10.000 puntos al ceder un 3,64%, hasta los 9.868 puntos.
Ahora, una vez esfumados los 10.000, el siguiente soporte a vigilar son los 9.250 puntos, según Joan Cabrero, analista de Ágora AF.
De todo el selectivo, Mapfre, AIG, Gamesa y BBVA fueron los valores más penalizados con caídas superiores al 5%.
En el resto de Europa, ninguna caída superó el 3% de la española. La segunda más castigada fue la francesa, que cedió un 2,79 %.
Y la tercera, la alemana, que perdió un 2,48%. Quién mejor soportó el golpe fue la portuguesa, con una bajada del 0,97%. Al otro lado del Atlántico, no fue distinto. Las ventas también tiñeron de rojo a Wall Street.
Y si gran parte de la culpa la tuvo Argentina, la desaceleración de la economía China también puso su granito de arena.
"El mayor castigo que reciben ahora los mercados tiene un nombre: China. Es China, con el riesgo de desaceleración unido a su elevada deuda, lo que más inquieta. Y su impacto negativo se siente en los mercados financieros y en las expectativas de crecimiento mundial", apunta Campuzano.
Pero donde se reflejó de verdad el miedo a todo lo sucedido fue en los CDS argentinos -seguro de riesgo de impago-, que en la semana se han disparado más de 451 puntos básicos, hasta los 2.546 puntos en los que se situó el viernes, su nivel más alto desde octubre.
Así, los inversores pagan 254.600 dólares por cubrir cada millón en deuda argentina -50.000 dólares más en dos días-.
Argentina es el país con mayor riesgo de impago del mundo.
Al igual que en el mercado de divisas, en el de los seguros de crédito también se produjo un efecto contagio hacia otros países.
El CDS de Venezuela se disparó 118 puntos básicos en un solo día, de forma que para asegurar cada millón de deuda venezolana el mercado exigía 142.700 dólares (12.700 dólares más en sólo dos días).
En el resto de países latinoamericanos el riesgo país también se vió incrementado, 9 puntos en el caso de Costa Rica y 4 puntos en el de Perú y Brasil.
Los acreedores de la deuda reestructurada argentina se ofrecen a negociar con los fondos de inversión
REUTERS - 18:24 - 24/01/2014
El grupo de inversores que administra los 7.000 millones de dólares de la deuda soberana argentina reestructurada ha anunciado que está dispuesto a negociar con los tenedores de bonos que se negaron a participar en los canjes propuestos por el Gobierno, lo que podría poner fin a una década de litigio.
Así lo ha anunciado a través de un comunicado Linklaters, asesor legal del grupo Tenedores de Bonos Canjeados, que actualmente representa un 30% de la deuda soberana argentina reestructurada.
"Linklaters está trabajando activamente con Deutsche Bank y se encuentra en proceso de formalizar un compromiso con Deutsche Bank para que le asesore en relación con la estructuración de una transacción entre acreedores", ha dicho. Las automovilísticas congelan la venta de vehículos por la devaluación del peso.
El asesor legal ha creado una comisión especial para negociar con los 'holdouts'. Gramercy Funds Management, uno de los miembros de este equipo 'ad hoc', dijo el pasado mes de noviembre que el objetivo era evitar un cese de pagos por parte de Argentina. Kicillof califica de "positiva" la reunión con el Club de París para pagar la deuda argentina.
Linklaters representa a los acreedores que poseen cerca del 93% de la deuda soberana argentina que acordaron participar en los canjes de 2005 y 2010, por los que obtuvieron entre 25 y 29 céntimos por cada dólar.
Los 'holdouts' liderados por NML Capital, unidad de Elliott Management de Paul Singer, y Aurelius Capital Management se negaron a participar en estas reestructuraciones, exigiendo al Gobierno argentino el pago de todo el importe.
El año pasado, un tribunal estadounidense ordenó a Argentina a pagar a estos fondos de inversión 1.300 millones de dólares, al mismo tiempo que continúa haciendo frente al vencimiento de los pagos de la deuda soberana reestructurada.
El Ejecutivo de Cristina Fernández de Kirchner ya ha anunciado que no cumplirá este fallo, que podría llevar al país sudamericano a un nuevo impago, debido al acelerado descenso de sus reservas internacionales.
C. García / M. López / I. M. Gaspar
http://armakdeodelot.blogspot.com.es/2014/01/efecto-tango-la-caida-del-peso.html