En junio de 2015, una investigación de Sky News descubrió al menos 20 antenas de telefonía falsas operando en la ciudad de Londres.
Los receptores IMSI, también conocidos como Stingrays, imitan a las antenas de telefonía móvil y “engañan” a los teléfonos para que se conecten con ellas y poder identificar a los usuarios y acceder a sus datos y llamadas.
Esta tecnología de vigilancia sofisticada escucha las conversaciones de los teléfonos móviles sin el permiso del propietario.
Al igual que sucede con todas las técnicas de vigilancia, son supuestamente utilizadas por los organismos de seguridad para vigilar a los criminales.
Al igual que otros métodos de recolección de datos, Stingray monitorea miles de teléfonos a la vez y se apoderan de la información de todos los dispositivos en el área.
VICE News fue más allá, con una investigación en profundidad que reveló la presencia de los Stingray en varios lugares de la capital británica, como el área alrededor del Parlamento, durante una protesta pacífica contra la austeridad, y frente a la embajada ecuatoriana, donde está retenido el fundador de WikiLeaks, Julian Assange.
Londres se ha convertido pues, en la capital mundial de la vigilancia sobre los ciudadanos, con cientos de miles de cámaras y artefactos ilegales de vigilancia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario