La Policía exige el DNI a una familia por portar una bandera con el lema «Gobierno dimisión»
Les ha vuelto a ocurrir. Pero esta vez, ha sido testigo OKDIARIO. La familia Del Prado, como cada día desde las últimas semanas, se acerca al madrileño Paseo de la Habana para mostrar su desacuerdo con la gestión de la crisis del coronavirus y protestar contra el Gobierno.
Lo hacen con una gran bandera de España con las palabras ‘Gobierno dimisión’ por la que la Policía Nacional les identifica. Manifestar lemas, les dicen, está prohibido.
Lo hacen con una gran bandera de España con las palabras ‘Gobierno dimisión’ por la que la Policía Nacional les identifica. Manifestar lemas, les dicen, está prohibido.
Puntuales a su cita de las 9 de la noche, los Del Prado acudieron este lunes a manifestar su malestar contra la gestión gubernamental. Ellos portan una de las pancartas icónicas de las protestas en este Paseo de la Habana, uno de los epicentros de las caceroladas en la capital.
Como ha ocurrido otros días, los agentes que vigilan este punto no les quitan ojo de encima. En cuanto despliegan la pancarta vuelven a hacer su aparición para identificarles.
Como ha ocurrido otros días, los agentes que vigilan este punto no les quitan ojo de encima. En cuanto despliegan la pancarta vuelven a hacer su aparición para identificarles.
No habían recorrido ni una sola vuelta entre paso de cebra y paso de cebra, ese ‘circuito’ improvisado que sigue la marcha para mantenerse en movimiento y evitar cometer una infracción, cuando dos agentes de la UIP interrumpen su paseo. “Caballero, ¿me permite su identificación?”.
La pregunta ya les suena a los Del Prado. La han escuchado otros días. «Muchos ya», dicen. María, la madre, ya había contado su historia en estas páginas. Normalmente identifican a sus hijos, pero hoy están ellos solos. Prácticamente en todos en los que se han manifestado. Este lunes, OKDIARIO estaba allí y captó toda la escena. “Cómo no, aquí tiene”, les dice el padre de familia mientras les entrega su DNI. “Que sepáis que estamos aquí también por vosotros”, les recuerda.
«Para evitar un mal mayor»
Con ciertas muestras de malestar, pero también con la resignación que aporta la rutina, les entregan sus documentos de identidad. “Nosotros tenemos que cumplir las órdenes a no ser que sean manifiestamente ilegales. Y como pedirles la identificación no es manifiestamente ilegal, ordeno a mi grupo que lo haga”, les responde el agente de la UIP.
“¡Para mí esto es más parecido a que yo haya atracado un banco!”, le responde. El agente les dice que él está tomando medidas “en el caso de la prevención de la delincuencia”. “Se puede dar el caso que dentro de un rato haya 50 personas aquí y usted vaya el primero de esa manifestación.
Le pido la documentación previamente para luego evitar un mal mayor que pueda suceder más tarde”, explica el agente. “Pues me lo podían pedir a los 12 años, no vaya a ser que un día haga algo”, le responde el padre de la familia.
“Pero es que sólo es una bandera”, le advierte María del Prado. “No, eso no es la bandera de España”, le indica el agente. Poco a poco, la escena va a atrayendo a cada vez más curiosos. “No se puede restringir el derecho ni de manifestación ni de reunión, ni siquiera en el estado de alarma”, recuerda María tras plegar su bandera y recoger su identificación.
La discusión va bajando de tono y el hombre le ofrece otro carnet al agente: “El del Atleti no lo quiere, ¿no? A ver si tampoco se va a poder ser del Atleti… ah, bueno, que ahora tenemos un alcalde del Atleti”.
Una mujer que pasa por allí muestra su indignación con una escena que también conoce de otros días: “Tienen que saber que no es legal pararlos”, les dice a los agentes “Ya son muchos días. Todos los santos días. Es ridículo”. “Son las órdenes y ya está”, les recuerda el agente que les ha identificado. “Vamos a ponerlo en un informe y ya está, no va a ningún sitio”, reconoce el agente.
Como advertía hace días a OKDIARIO María, la madre de familia, sospechan que hay “órdenes muy concretas de identificarles” para tratar de “intimidar” a la gente y hacer que no vuelvan a manifestarse. Bajo la sombra de posibles sanciones. Si dejan de ir al Paseo de la Habana será por otras causas, pero no por miedo. “No hacemos nada malo”, recuerdan.
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