En
Virginia e Indiana, Simon Property, el dueño de 393 propiedades en todo
el mundo, entre ellas el Centro de Aurora (el centro comercial situado
cerca del Teatro del Siglo 16 en Colorado, donde el rodaje de Batman
tuvo lugar) se asociará con Seguridad Nacional y Janet Napolitano para
participar en la campaña "See something, say something" que convierte al ciudadano promedio en la moderna Stasi.
Los nuevos participantes en la campaña de vigilancia de Seguridad Nacional son representantes de las Grandes Ligas de béisbol, la Soccer Major League, National Basketball Association, National Hockey League y la National Football League.
Según Napolitano, "estamos todos más seguros cuando todo el mundo está alerta y comprometido" y quiere que el público estadounidense espíe a los demás, porque nuestra seguridad en todo momento es "una responsabilidad compartida".
Los nuevos participantes en la campaña de vigilancia de Seguridad Nacional son representantes de las Grandes Ligas de béisbol, la Soccer Major League, National Basketball Association, National Hockey League y la National Football League.
Según Napolitano, "estamos todos más seguros cuando todo el mundo está alerta y comprometido" y quiere que el público estadounidense espíe a los demás, porque nuestra seguridad en todo momento es "una responsabilidad compartida".
Con la asistencia de los centros comerciales de Simon, se
animará a los dueños y empleados a usar la técnica Delphi en espionaje y
presentar informes de "comportamiento sospechoso" entre sus compañeros
de trabajo y clientes.
Napolitano dijo que Seguridad Nacional ampliará su Stasi a cada ciudad, cada estado, cada universidad, cada empresa privada, cada depósito de transporte y cada hotel y tienda al por menor mediante el lavado de cerebro al público haciéndole creer que con espiar para el gobierno de EE.UU. estás siendo un patriota.
Napolitano explicó: "Cuando cada uno de nosotros hace su parte, mantenemos segura a nuestra nación, un pueblo unido."
Se informó el mes pasado en los principales medios la premisa de que Seguridad Nacional tenía razones para creer que había una suposición razonable de que los extremistas radicales podrían poner en peligro los centros comerciales. Las autoridades locales y federales estaban en alerta de que militantes islámicos de Oriente Medio o militantes extremistas de derecha podrían y probablemente pondrán en peligro un centro comercial para infundir miedo en el público en general.
El Southern Poverty Law Center, que es patrocinado por el FBI y la Liga contra la Difamación controlada por los sionistas, informó de que ambos grupos de milicias en los EE.UU. habían aumentado a 824 y que hubo una intensificación del odio racista de los movimientos de supremacistas blancos.
Equiparar el movimiento patriota con extremistas radicales en los principales medios de comunicación efectivamente desdibuja la línea entre el terrorismo patrocinado por el gobierno y el apoyo a nuestra República Constitucional.
De acuerdo con un informe de Seguridad Nacional de 2004 titulado " Características y vulnerabilidades comunes, Categoría de infraestructuras: Centros Comerciales", afirma que todos los centros comerciales en los Estados Unidos son un "blanco fácil", que podría ser utilizado por los terroristas para causar daño económico, causar bajas e infundir temor".
Seguridad Nacional (DHS) especifica que entre otros tipos de violaciones de la seguridad, los explosivos (por ejemplo, un coche bomba o un terrorista suicida) encabeza la lista de posibles "amenazas preocupantes" con respecto a los centros comerciales.
El mes pasado, el DHS, a través de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA) solicitó 1.400 libras de nitrato de amonio y A-5 RDX Flake - los mismos ingredientes necesarios para una bomba de fertilizante casera. Curiosamente, el DHS, por petición del Congreso, formó el Programa de Seguridad del Nitrato de Amonio en el que se supervisan las compras de ingredientes que pueden utilizarse para producir un explosivo improvisado (IEDs).
Un ataque contra un centro comercial podría potencialmente causar unas 46.000 víctimas según la Oficina Nacional de Investigación. El DHS plantea que las vulnerabilidades en la construcción de los centros comerciales, podrían ser aprovechadas por los terroristas. Al infiltrarse en los sistemas de ventilación, sistemas eléctricos o de telecomunicaciones y tuberías de agua y alcantarillado, un centro comercial típico en una región en general podría ser utilizado como un arma devastadora.
En respuesta a la gestión de esta amenaza potencial, el DHS lleva a cabo ejercicios de entrenamiento con socios del sector estatal, local y privado "para mejorar el conocimiento de las amenazas terroristas contra la infraestructura crítica de la nación y los recursos clave."
Goldman Sachs está promoviendo las propiedades de Simon como una inversión segura. Goldman Sachs está empezando a apoyar la corporación de propiedades con sus declaraciones: "Creemos que el mercado va a estar gratamente sorprendido por el potencial de crecimiento debido al beneficio anual del 2012 de las adquisiciones y la resistencia de la línea de desarrollo de empresa de la compañía."
Goldman Sachs ha estado involucrado en muchos desastres y ataques de falsa bandera en el interior de EE.UU. con la manipulación de la bolsa justo antes de un desastre.
Justo antes del derrame de la plataforma Deepwater Horizon de BP, Goldman Sachs se deshizo del 44% de sus acciones en BP.
Goldman Sachs se benefició de los ataques del 11 de Septiembre mediante la financiación de la construcción de una nueva sede donde una vez estuvieron las Torres Gemelas, que calificó a la firma de banca globalista para vender mil millones de dólares en bonos libre de impuestos, así como recoger $49 millones en subvenciones al empleo, exenciones fiscales y descuentos en la energía.
En mayo de 2012, la Campaña Mundial contra Artefactos Explosivos Improvisados (GCAIED) escribió una carta a Obama con las firmas de 23 miembros del Congreso para alcanzar un "consenso" contra la amenaza de las IED. Con información recopilada por el Sistema Mundial de Incidentes del Centro Nacional de Contraterrorismo, se ha duplicado la cantidad de IED que se fabrican anualmente por civiles. La GCAIED afirma que las IED se utilizarán para atacar a la población civil con la intención de interrumpir la rutina diaria, la salud y las elecciones de noviembre.
Las operaciones de bandera falsa son una forma efectiva del gobierno para ganar el control sobre sus ciudadanos. Cuando la dialéctica hegeliana (problema-reacción-solución) se utiliza, como hemos visto en clásicas falsas banderas dirigidas por los globalistas, se nos presenta a un cabeza de turco, entonces esa persona comete un acto terrorista contra el pueblo, y es necesario que el gobierno de los EE.UU. intervenga con las restricciones a las libertades para aumentar la seguridad pública.
¿Podría el DHS estar preparando una falsa bandera que envuelva a nuestros centros comerciales con el fin de introducir un nuevo sistema de control que restrinja aún más nuestras libertades bajo un estado policial más fuerte y de más alcance?
Napolitano dijo que Seguridad Nacional ampliará su Stasi a cada ciudad, cada estado, cada universidad, cada empresa privada, cada depósito de transporte y cada hotel y tienda al por menor mediante el lavado de cerebro al público haciéndole creer que con espiar para el gobierno de EE.UU. estás siendo un patriota.
Napolitano explicó: "Cuando cada uno de nosotros hace su parte, mantenemos segura a nuestra nación, un pueblo unido."
Se informó el mes pasado en los principales medios la premisa de que Seguridad Nacional tenía razones para creer que había una suposición razonable de que los extremistas radicales podrían poner en peligro los centros comerciales. Las autoridades locales y federales estaban en alerta de que militantes islámicos de Oriente Medio o militantes extremistas de derecha podrían y probablemente pondrán en peligro un centro comercial para infundir miedo en el público en general.
El Southern Poverty Law Center, que es patrocinado por el FBI y la Liga contra la Difamación controlada por los sionistas, informó de que ambos grupos de milicias en los EE.UU. habían aumentado a 824 y que hubo una intensificación del odio racista de los movimientos de supremacistas blancos.
Equiparar el movimiento patriota con extremistas radicales en los principales medios de comunicación efectivamente desdibuja la línea entre el terrorismo patrocinado por el gobierno y el apoyo a nuestra República Constitucional.
De acuerdo con un informe de Seguridad Nacional de 2004 titulado " Características y vulnerabilidades comunes, Categoría de infraestructuras: Centros Comerciales", afirma que todos los centros comerciales en los Estados Unidos son un "blanco fácil", que podría ser utilizado por los terroristas para causar daño económico, causar bajas e infundir temor".
Seguridad Nacional (DHS) especifica que entre otros tipos de violaciones de la seguridad, los explosivos (por ejemplo, un coche bomba o un terrorista suicida) encabeza la lista de posibles "amenazas preocupantes" con respecto a los centros comerciales.
El mes pasado, el DHS, a través de la Administración de Seguridad del Transporte (TSA) solicitó 1.400 libras de nitrato de amonio y A-5 RDX Flake - los mismos ingredientes necesarios para una bomba de fertilizante casera. Curiosamente, el DHS, por petición del Congreso, formó el Programa de Seguridad del Nitrato de Amonio en el que se supervisan las compras de ingredientes que pueden utilizarse para producir un explosivo improvisado (IEDs).
Un ataque contra un centro comercial podría potencialmente causar unas 46.000 víctimas según la Oficina Nacional de Investigación. El DHS plantea que las vulnerabilidades en la construcción de los centros comerciales, podrían ser aprovechadas por los terroristas. Al infiltrarse en los sistemas de ventilación, sistemas eléctricos o de telecomunicaciones y tuberías de agua y alcantarillado, un centro comercial típico en una región en general podría ser utilizado como un arma devastadora.
En respuesta a la gestión de esta amenaza potencial, el DHS lleva a cabo ejercicios de entrenamiento con socios del sector estatal, local y privado "para mejorar el conocimiento de las amenazas terroristas contra la infraestructura crítica de la nación y los recursos clave."
Goldman Sachs está promoviendo las propiedades de Simon como una inversión segura. Goldman Sachs está empezando a apoyar la corporación de propiedades con sus declaraciones: "Creemos que el mercado va a estar gratamente sorprendido por el potencial de crecimiento debido al beneficio anual del 2012 de las adquisiciones y la resistencia de la línea de desarrollo de empresa de la compañía."
Goldman Sachs ha estado involucrado en muchos desastres y ataques de falsa bandera en el interior de EE.UU. con la manipulación de la bolsa justo antes de un desastre.
Justo antes del derrame de la plataforma Deepwater Horizon de BP, Goldman Sachs se deshizo del 44% de sus acciones en BP.
Goldman Sachs se benefició de los ataques del 11 de Septiembre mediante la financiación de la construcción de una nueva sede donde una vez estuvieron las Torres Gemelas, que calificó a la firma de banca globalista para vender mil millones de dólares en bonos libre de impuestos, así como recoger $49 millones en subvenciones al empleo, exenciones fiscales y descuentos en la energía.
En mayo de 2012, la Campaña Mundial contra Artefactos Explosivos Improvisados (GCAIED) escribió una carta a Obama con las firmas de 23 miembros del Congreso para alcanzar un "consenso" contra la amenaza de las IED. Con información recopilada por el Sistema Mundial de Incidentes del Centro Nacional de Contraterrorismo, se ha duplicado la cantidad de IED que se fabrican anualmente por civiles. La GCAIED afirma que las IED se utilizarán para atacar a la población civil con la intención de interrumpir la rutina diaria, la salud y las elecciones de noviembre.
Las operaciones de bandera falsa son una forma efectiva del gobierno para ganar el control sobre sus ciudadanos. Cuando la dialéctica hegeliana (problema-reacción-solución) se utiliza, como hemos visto en clásicas falsas banderas dirigidas por los globalistas, se nos presenta a un cabeza de turco, entonces esa persona comete un acto terrorista contra el pueblo, y es necesario que el gobierno de los EE.UU. intervenga con las restricciones a las libertades para aumentar la seguridad pública.
¿Podría el DHS estar preparando una falsa bandera que envuelva a nuestros centros comerciales con el fin de introducir un nuevo sistema de control que restrinja aún más nuestras libertades bajo un estado policial más fuerte y de más alcance?
Fuente: http://www.laproximaguerra.com/2012/09/se-avecinan-ataques-bandera-falsa-centros-comerciales-eeuu.html?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+LaProximaGuerra+%28La+pr%C3%B3xima+guerra%29
Lamento ser consciente de que el único gobierno
ResponderEliminarque ha lanzado artefactos nucleares sobre la población civil (siendo 'presuntamente' beneficiados del ¿ataque? a Pearlharbor, 11S, etc etc
Si, son capaces de hacerlo. Todo apunta a que lo hacen sistemáticamente, porque solo así pueden justificar sus injustificables actos hostiles poe¡steriormente.
Saludos.
Con la intención de protegerse de un eventual ataque terrorista contra centros comerciales, la psicosis que se cierne sobre gran parte de la sociedad estadounidense amenaza con recortar aún más las libertades y garantías constitucionales (recogidas ya en su Declaración de Independencia y en la quinta enmienda de la Constitución). Así, Estados Unidos se desliza peligrosamente hacia la conformación de un estado policíaco, en el cual cada vez habrá menos resquicios de libertad para sus ciudadanos. Este hecho, determinado por una política que trata de establecer una sociedad acrítica y uniforme, conlleva inevitablemente la destrucción del espíritu de rebeldía, propio de una democracia avanzada.
ResponderEliminarEstados Unidos, paradigma de la libertad y la democracia, habrá perdido con ello los ideales por los que se constituyó como Estado libre e independiente.
Siendo comprensible el temor a atentados terroristas contra centros comerciales en Estados Unidos, de ningún modo se puede justificar la agresión que supone esta medida contra las libertades y garantías constitucionales. Bajo estos parámetros, Estados Unidos se está deslizándose peligrosamente hacia un estado policíaco, cuyo objetivo es establecer, en última instancia, una sociedad acrítica y uniformizadora, desligada del espíritu inconformista y de rebeldía presente en algunos sectores de la sociedad estadounidense.
ResponderEliminarTodo ello aleja a Estados Unidos de los ideales con los que surgió como nación independiente, ideales que se basaban en la libertad y la búsqueda de la felicidad (objetivos recogidos en su Declaración de Independencia), y que constituían el paradigma de la libertad y la democracia.
Aún comprendiendo el ambiente de pánico y psicosis suscitado por la amenaza de atentados terroristas en centros comerciales de Estados Unidos, de ningún modo se puede justificar el ataque contra los derechos y libertades individuales que supone esta medida. Por este camino, Estados Unidos se desliza peligrosamente hacia un estado policíaco, que, además, trata de establecer un modelo de sociedad acrítica y uniformizadora, anulando, en todo momento, el espíritu inconformista y de rebeldía presente en un sector importante del pueblo norteamericano.
ResponderEliminarDe este modo, al conculcar los derechos y garantías constitucionales más elementales, Estados Unidos ignora los ideales por los que se convirtió en un Estado libre e independiente, que aspiraba en su Declaración de Independencia a alcanzar la libertad y la búsqueda de la felicidad.