viernes, 3 de mayo de 2013

Carta abierta a los responsables del programa “El Intermedio”, en la Sexta (programa-TV) por Chemtrails Galicia

A los ciudadanos de a pie que estamos luchando todos los días para acabar con la lacra de las fumigaciones que envenenan nuestro suelo, el aire, las aguas nos produce lástima por ustedes que nos califiquen de “iluminados”, insensibles a los problemas que asolan a nuestra sociedad.

Es mucho suponer: somos sensibles al problema de que nos fumiguen con la misma dimensión de preocupación por la colectividad que nos provoca estar en primera línea reivindicativa respecto del paro, el abuso de poder dominante, el recorte de nuestros derechos en materia laboral, sanitaria, educativa y de asistencia social.

Somos activos luchadores por remontar esta crisis sobre la base de que no tengan que soportarla los más débiles y estamos presentes en Anpas, asociaciones de consumidores, plataformas reivindicativas en la persecución de la corrupción, luchadores por un gran pacto social que garantice que se puede salir de la crisis sin condenar a la exclusión a la tercera parte de la población, etc.

Nos califican ustedes de illuminati sin haber realizado el trabajo de campo a que les obliga su código deontológico y los mínimos principio de la ética. Si lo hubieran hecho, encontrarían que el propio Obama ha reconocido las fumigaciones y que el Parlamento Europeo ha pedido al presidente de los EE.UU. que ordene a su ejército que las detenga.

Si hubieran sido profesionales habrían accedido sin necesidad de viajar, con los miles de documentos verificados disponibles a través de la red, a la constatación de daños irreparables en cuatro estados de EE.UU., en Hawai, en Argentina, en Brasil, en la India, donde se han suicidado en masa agricultores atrapados en el círculo maquiavélico de tener que cultivar semillas de la gran Corporación Biotecnológica en suelos fumigados y estériles para otras patentes; semillas que han de reponer todos los años enfangándose en créditos impagables hasta que pierden sus tierras.

Si ustedes hubieran sido profesionales sabrían que hace quince días el Parlamento Europeo albergó, con el ciceronazgo de Partidos con amplia representación, la conferencia de Michael Murphy, que destapó el tema en origen, en los EE.UU., hace más de quince años.

Sabrían que la presión popular consiguió parar las fumigaciones en la Europa de la “primera velocidad”, y que ello fue posible a la vez que se prohibía el cultivo de trangénicos y el uso de glifosatos producidos por la misma empresa de Bioingeniería, ya con un amplio historial en el campo de las patentes: agente naranja, factor de crecimiento bovino, vacuna gripe A, y en cuyo accionariado encontrarán a gente ilustre que también participa como donante en la construcción de macrosilos subterráneos donde guarda millones de semillas sin modificar y en la experimentación de HAARP, que nació como un proyecto de escudo antimisiles y que con el paso del tiempo se ha consolidado como un medio potente de deformar con una gran inyección de millones de vatios un punto de la ionosfera, de 12 kilómetros de diámetro, para arrastrar tras de si las corrientes húmedas de las capas más altas de la atmósfera y decidir en que regiones del planeta debe llover y en cuales no.

Todo esto es prolijo. Nos llevaría meses introducirles en el tema, y sobre todo nos falta información. Sólo tenemos la que ha llevado a Argentina y a Bolivia a luchar por ser territorios libres de transgénicos, de glifosatos y de Chemtrails.

Otros muchos países lo intentan de momento en vano porque la sociedad civil en lugar de encontrar apoyo de una clase periodística valiente, independiente y buscadora de la verdad se convierte en aliada de un Gobierno que no nos contesta y nos encasilla con el chascarrillo efectista de que somos unos iluminados.

Y yo le digo, Sr. Wyoming, ¡Ojalá lo fuéramos y todo esto fuera sólo fruto de nuestra imaginación! Los polímeros pringando nuestras propiedades los días de intensas fumigaciones, las decenas de aviones sin identificar que dejan un rastro de reacciones alérgicas, crisis asmáticas y a saber qué grado de responsabilidad en el crecimiento exponencial de enfermedades autoinmunes y degenerativas.

En varios puntos de la península se han cursado denuncias por presencia brutal de aluminio en suelos y agua. Muchos ayuntamientos están preparando la documentación para llevar a pleno la exigencia de transparencia al Gobierno.

Ustedes, mientrastanto, en lugar de documentarse, o más sencillo aún, en lugar de mirar al cielo y ver como en días de fumigaciones un cielo azul se concierte en una niebla blanquecina y permanente tras el paso de grandes aljibes a 11.000 pies, sigan con el chascarrillo, que nosotros estaremos dispuestos a dejarnos la vida en la defensa de nuestros derechos y de nuestra integridad, seguros de que cuanto más nos ataquen con mayor fuerza buscaremos la verdad y el desenmascaramiento de los intereses de una oligarquía que nos trata como a cobayas con la complicidad de una clase política corrupta y atrapada.

Y sobre todo no se les olvide que no somos ni cabalísticos, ni iluminados ni hostias en vinagre. Somos padres de familia, jóvenes y viejos, mediopensionistas, autónomos, funcionarios, del Betis, del Sevilla, pobres de solemnidad y algún forrado… somos ciudadanos sensibles a los problemas actuales de una sociedad y un entorno cambiantes; y el hecho de que nos envenenen sistemáticamente se nos antoja importante.

Chemtrails Galicia, coordinadora de la Reunión en Madrid para la fundación de la Asociación Española contra las fumigacione tóxicas.

1 comentario:

  1. Buena respuesta, si señor. Si Wyoming ha caído es que la cosa está cada día peor. No obstante, cuando se le mantiene en los medios de contaminación, es porque aunque sepa vender perfectamente la moto, come de la mano de aquellos que ostentan el poder.

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