Cuando escribo estas líneas, la única respuesta al envío de los sistemas antimisiles rusos S-300 a Siria ha sido la extensión del conflicto a Líbano y la repentina aparición de unos absurdas manifestaciones en Estambul que a todas luces son una maniobra de distracción. Sin duda que ambos hechos son la respuesta sionista al posicionamiento ruso en el conflicto sirio.
Por primera vez desde su creación, Israel se ha quedado muda, y la razón de ello es que se encuentra acorralada militarmente pues el sistema antimisiles ruso, al parecer, crea una “zona de exclusión aérea” que no sólo acoge a todo el territorio sirio… sino que alcanzaría hasta Israel. La cifra de alcance en kilómetros es de 200, así que echad una mirada al mapa…
Si este sistema derriba todo avión en ese radio a la redonda, tenemos que Israel se habría quedado, en la práctica, sin ataque aéreo. Ni más ni menos.
Sumadle a esto que cualquier tipo de implicación por parte de Francia, Inglaterra o Estados Unidos en el conflicto (sin la aprobación de la ONU, pues Rusia y China se oponen) implicaría que Rusia e Irán entrarían en Siria y ya han avisado que alcanzarían los Montés del Golán (robados a Siria en la guerra de los Seis días). Lo cual es como decir que invadirían Israel. Echad un vistazo al mapa de la zona y comprobaréis que desde los Altos del Golán hasta Cisjordania hay un paso.
Y ahora pensad por un momento en que a los millones de palestinos encerrados en Cisjordania les llegaran un arsenal de tanques y armas de primera generación. ¿Te imaginas?
Sólo de pensarlo, se me sale el corazón de pecho. Los ratones pasarían a ser leones, con la particularidad, arriba indicada, de que los israelíes no podrían atacarlos por aire. Si os acordáis, Gadafi cayó en Libia cuando se decretó una “zona de exclusión aérea” que permitió a la OTAN martillear a las tropas libias. Sin ese bombardeo aéreo, es imposible que los sionistas hubieran triunfado. Pero ahora el “escudo antimisiles” lo tiene Siria. ¡Ajajá! Lo que funciona es el ejército de Tierra: hay que batirse cara a cara. Y ya vimos hace pocos años que los guerreros de Hezboláh son más valientes que el ejército israelí.
Como han indicado sus propios analistas en Debka File, Israel no puede triunfar si no es con la ayuda de Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos. Pero miremos por un momento a la situación de esos tres países.
Francia se ha levantado contra el matrimonio gay y está en medio de una depresión económica que, de seguro, quitará del poder a Hollande en breve. Al ejército no le hará pero que ninguna gracia embarcarse en otra guerra “pro Israel”.
Lo mismo se puede decir de Obama, con el agravante de que tiene varios juicios en marcha contra él: el asunto de Bengasi, las escuchas a periodistas y la persecución del IRS contra el Tea Party. Eso, sin contar con que tienen en el Ministerio de Defensa al ex antisionista Chuck Hagel, que bien podría ser un “topo” para acabar con el sionismo desde dentro. Dejamos abierta esa posibilidad, sin confirmarla. Lo que sí sabemos es que la mayoria de los norteamericanos se oponen a la intervención en Siria. Y encima, Obama es Premio Nobel de la Paz…
Por último, Gran Bretaña está inmersa en una gran crisis de confianza en la Unión Europea, con los antiglobalistas de Nigel Farage posicionándose claramente como la nueva fuerza emergente.
Todo ello, por no hablar del escándalo de las acciones derivadas que ha de ser el mecanismo mediante el cual estalle la burbuja financiera a nivel mundial, y el cual podrían detonar los chinos (aliados de Siria, Rusia e Irán) en cualquier momento.
¿Vais viendo por qué Israel está acorralada?
A nivel político, el conflicto sirio está dejando en evidencia la Monumental Mentira de la política internacional, pues tenemos a los supuestos países cristianos (Francia, Estados Unidos y Gran Bretaña) apoyando a unos “rebeldes sirios” compuestos mayoritariamente por los terroristas islámicos que llevan 10 años “diciendo combatir”. Luchando junto a comunistas, para más inri.
Contradicción irresoluble.
Pero todavía es más inexplicable el posicionamiento del islam sunnita, representado por Arabia Saudita, Qatar y Turquía, que están luchando junto con los judíos contra sus hermanos musulmanes.
Sin duda alguna, si el Profeta Mohamed (Allah le tenga en su gloria) pisara actualmente la Tierra cortaría la cabeza de todos esos impíos, adoradores de Saitán. Leed la Sura 60 del Corán, por ejemplo.
A ver cómo los gobiernos de Turquía, Arabia Saudita y Qatar les explican a sus respectivos pueblos que están ayudando a los asesinos de sus hermanos palestinos a masacrar otros hermanos musulmanes.
La perversión del Bien es tan flagrante dentro del islam que, al mismo tiempo, no queda ningún lugar a dudas y, de paso, ha dejado claro que Los Hermanos Musulmanes son una organización sionista, así como el emir de Qatar y la monarquía saudita y Erdogan, el primer ministro turco, supuesto islamista.
Al Qaeda ha sido un fenómeno criado en las madrasas del islam sunnita, no lo olvidemos, que ha servido para justificar la imposición del monstruoso orden mundial sionista. Es hora de decirlo alto y claro: hay una parte del Islam que trabaja para los judíos, contradiciendo el elemento central del sagrado Corán. ¿Cómo se pueden llamar a sí mismos “musulmanes” esta gente?
Evidentemente, todas estas revelaciones deben estar provocando un auténtico terremoto en el mundo musulmán y debería traducirse en una gigantesca conversión al chíismo, que está demostrando, con la guerrilla libanesa Hezbollah y el presidente iraní Ahmedineyad a la cabeza, tener claro cuál es el Bien y cuál es el Mal.
A todo esto, tenemos al monarca saudita clínicamente muerto y en ese país, Arabia, hay una notable población chiíta…
Con toda esta situación, el falso gobierno islámico de Turquía se encuentra en una situación insostenible, y máxime cuando aparecen noticias como ésta: “detenidos terroristas que portaban gas sarín“, lo que prueba que este país es uno de los focos de tensión en la zona, y de paso explica por qué está tratando de culpar a Siria de todas las barbaries que allí ocurren. Seguro que ahora podrás entender por qué surge, de repente, esta “rebelión en Turquía” porque iban a cortar unos árboles de un parque. Maniobra de distracción, sin duda.
Evidentemente, están tratando de que la Opinión Pública se ponga en contra de Siria, y a favor de las potencias sionistas.
Esa es la respuesta que ha preparado Israel: el terror.
Dado que la batalla se juega en la percepción del Bien y del Mal, es vital que desde vuestros blogs os centréis en Siria porque, al mismo tiempo, y como os he comentado al principio, esta interesante situación se les puede volver como un boomerang y convertirse en la tumba del sionismo.
PD: Os recomiendo especialmente este artículo sobre las últimas declaraciones del líder de Hezbollah, Nasrallah, y cómo el conflicto se está extendiendo a Líbano. Por cierto, que hay una alusión al Papa Bergoglio, que se tendrá que posicionar en los próximos días, pues en Líbano hay una población cristiana muy importante… En cuanto abra la boca, sabremos, por fin, si Bergoglio es un hombre de Dios… o del Demonio.
Fuente: http://www.rafapal.com/?p=21574
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