El primer secretario del PSC, Pere Navarro (EFE)
El líder del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Pere Navarro, pondrá toda la carne en el asador este fin de semana para encauzar el rumbo de su formación ante el proceso independentista iniciado por los nacionalistas. Y, según destacan fuentes del PSC a El Confidencial, lo que se pretenderá al convocar para este domingo al consejo nacional del partido (máximo órgano entre congresos) es aprobar algunos puntos que serán exigibles a todos los militantes y, especialmente, de ahora en adelante para unificar criterios y dejar de contradecirse públicamente. En otras palabras, Navarro quiere que los críticos del socialismo (mensaje dirigido al sector catalanista) asuman los postulados oficiales del PSC y los respeten.
“¿Qué alguien está a favor de la consulta? No hay problema. Todos lo estamos. Pero se ha de negociar con el Gobierno central. Es un tema de sentido común. Pero todo lo que no venga sustentado por un acuerdo con el Estado se ha de rechazar. No vamos a ir a Madrid exigiendo el referéndum para que otros ganen votos”, dicen a este diario las fuentes consultadas. El razonamiento es claro: mantener el pulso con el Gobierno central sólo está dando votos a Esquerra, puesto que incluso CiU sufre una sangría de sufragios. Por tanto, los socialistas no están dispuestos a seguir haciendo el “caldo gordo” a los republicanos.
La pasada semana, el PSC se negó a secundar el manifiesto aprobado por CiU, ERC e ICV en el que piden al Gobierno central que aplique el artículo 150.2 de la Constitución y delegue en la Generalitat de Cataluña las facultades para poder convocar referéndums. “Nos parece muy bien que se quiera pedir la aplicación del artículo 150.2. Pero se ha de hacer de mutuo acuerdo con el Gobierno central, negociándolo. Y aquí no se ha negociado nada, sino que se exige que se aplique. Con una actitud así, evidentemente, no se va a conseguir nada”, explican fuentes internas socialistas.
Consell nacional del psc
Estas fuentes subrayan que Navarro es consciente de que hay un sector de su partido que está dispuesto a dar la batalla y que asume abiertamente los postulados de CiU y de ERC. Por ejemplo, recientemente se dio de baja del PSC la exalcaldesa de Roses, Magda Casamitjana, que alegó discrepancias con la dirección de la formación en el tema de la consulta. Luego, están los casos del exconsejero Joaquim Nadal, que incluso había sido candidato socialista a la Generalitat. Nadal aceptó encabezar una plataforma unitaria por el derecho a decidir en Gerona bajo los auspicios del alcalde convergente en esta ciudad. Hace quince días, fue nombrado presidente del Institut Català de Recerca en Patrimoni Cultural, un ente que depende del Gobierno de Artur Mas y de la Universidad de Gerona. Junto a él se alinean la exconsejeraMarina Geli o la también exconsejera Montserrat Tura.
Miembros del PSC (EFE)”Si se quieren dar de baja, están en su derecho, perohabrían de ser consecuentes y someterse a las directrices oficiales y a la mayoría”, aseguran desde el partido. E incluso restan importancia al abandono de algunos nombres propios con determinado peso en el ámbito catalanista. “El PSC no se romperá, estamos seguros”, subrayan. Pero aunque pudiera existir el peligro de una escisión, la dirección oficialista está decidida a zanjar de una vez por todas las contradicciones públicas de los dirigentes socialistas y a exigir que no contradigan públicamente al líder del PSC.
Negociación contrarreloj
Navarro y su mano derecha, Antonio Balmón, secretario de Organización, se reunieron el viernes con los representantes del área catalanista Marina Geli yÀngel Ros, alcalde de Lérida (englobados en la corriente Agrupament Socialista), al mismo tiempo que los dirigentes de la corriente crítica AvancemJoan Ignasi Elena y Jordi del Río. La intención era pactar una resolución consensuada de cara al consejo nacional de este domingo, aunque el encuentro ya había sido acordado hace un par de semanas. Durante la tarde del viernes y el sábado, las corrientes críticas y la dirección oficial se intercambiarán borradores para intentar llegar a un consenso sobre el testo final de la resolución del consejo nacional.
Antonio Balmón con Pere Navarro (EFE)
“Lo que hay encima de la mesa es una cierta polémica sobre la aplicación del artículo 150.2 de la Constitución. El partido había votado ya que en el 2014 habría consulta. Y ahora, realmente, el hecho de la delegación de competencias del Gobierno central en la Generalitat mediante el artículo 150.2 es un mecanismo legal. Es pedir hacer la consulta de forma legal y acordada, por lo que si el partido se opone existe una cierta contradicción”, explica a El Confidencial Joan Ignasi Elena, líder de Avancem.
Para el dirigente crítico, “en la opinión pública, existe una cierta sensación de que nos contradecimos. Y no debemos caer en el error de aparecer fuera del bloque que está a favor del derecho a decidir porque eso nos descentra mucho”. Para Elena, las posturas están distantes pero no existe riesgo de ruptura. “Lo que pasa es que todo este proceso ha generado contradicciones internas no sólo en nosotros, sino en todos, puesto que incluso dentro de un mismo partido hay grupos que avanzan a distinto paso que otros. Fijémonos, si no, en cómo han cambiado las cosas: hace un año,Artur Mas se reunía con Mariano Rajoy parea hablar del pacto fiscal y hoy, el PSOE está hablando de reformar la Constitución, el PSC está a favor de una consulta y Artur Mas pregona la independencia”. Aún así, espera que la dirección oficial del partido imponga nada este domingo. “Ni el partido ni la sociedad están para excesos de exigencia, sino que necesitan diálogo, comprensión y mucha inteligencia política”.
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