El Fondo Monetario Internacional (F.M.I) tiene sus días contados está cada vez más cercado, y cavando su propia tumba ante la involución de un gigante que está dando pasos a ritmo vertiginoso, como lo es la República Popular China y su puesta en escena con la creación del Banco Asiático de Inversiones e Infraestructuras (BAII).
A todo esto la puesta también en escena de Organismos Internacionales como el BRICS (donde China es también miembro), la CELAC, UNASUR, MERCOSUR, están siendo cada día más fuertes en el mercado financiero internacional.
La idea de crear el Fondo Monetario Internacional se planteó en julio del año 1944 en una Conferencia de las Naciones Unidas celebrada en Bretton Woods Nuevo Hampshire (Estados Unidos), cuando los representantes de 44 países acordaron establecer un marco de cooperación económica destinado a evitar que se repitieran las devaluaciones competitivas que contribuyeron a provocar la Gran Depresión de los años treinta.
El Fondo Monetario Internacional promueve la estabilidad financiera y la cooperación monetaria internacional asimismo, facilitar el comercio internacional, promover un elevado empleo, y un crecimiento económico sostenible, reduciendo la pobreza en el mundo. Es administrado por 188 países miembros a los cuales les rinde cuentas.
Actualmente todas y cada una de esas expectativas nunca han sido cumplidas por lo que el FMI se ve en la disyuntiva de una pronta desaparición, o estar condenado a un segundo plano, ya que tanto el BRICS como el BAII están tomando cada vez más protagonismo en la esfera internacional
El Banco Asiático de Inversiones e Infraestructuras (BAII) está admitiendo la entrada de países que no comulgan con el FMI. La implantación del Nuevo Orden Mundial es una realidad, un mundo multipolar basado en el intercambio, el comercio, la economía sin la determinación, ni la imposición del FMI.
El Fondo Monetario Internacional está atravesando una dinámica que poco tiene que ver con sus imposiciones de antaño, que estábamos acostumbrados a aceptar sus mecanismos así como sus altos intereses que sometían a los países a una deuda externa que a veces, en algunos de esos países eran impagables.
El Fondo Monetario Internacional siempre pasa revista a las políticas económicas aplicadas por los países, así como a la situación económica y financiera nacional, regional, y mundial a través de un sistema formal de supervisión. El FMI proporciona asesoramiento a esos 188 países miembros recomendando políticas que promuevan la estabilidad económica.
Pero… ¿dónde va quedar el FMI?, ¿qué papel va a jugar a partir de ahora?. El FMI no puede ni debe impartir clases de sumisión pues el terreno lo tiene ya casi perdido.
Es importante destacar y señalar que el FMI se ha visto implicado en financiar a países de gobiernos dictatoriales, al mismo tiempo; a prestado dinero a largo plazo para la adquisición de armamento por parte de muchas naciones en condiciones sumamente favorables, pero que condenan a los pueblos en la más absoluta miseria, con deudas sumamente gigantescas, eso lleva al impago de la deuda, o lo que es peor endeudamiento prolongado.
Es importante que en la escena internacional en el que estamos inmersos los países que han optado por otros medios bancarios tales como el Banco del BRICS, o el Banco Asiático de Inversiones e Infraestructuras, o el Banco del Sur, tengan la suficiente fortaleza, y fuerza para enfrentar con futuro y esperanza un nuevo equilibrio no sólo en lo económico, sino en lo político y puedan así desprenderse de la dictadura del FMI en la que han estado sometidos.
El Fondo Monetario Internacional, o cambia su política y su rol en pro del beneficio colectivo, en los países del Tercer Mundo, o de lo contrario las llamadas potencias emergentes que forman parte de ésta vorágine económica y multipolar tendrán ante sí una feroz competencia que por muchos que le pesen a algunos, el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronto nos dirá adiós.
Escrito por Félix Román Negrín Rodríguez para Periodismo Alternativo
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