Los paleontólogos dicen que los pterodáctilos fueron extintos hace 65 millones de años.
¿Pero realmente desaparecieron completamente?
Pilotos, doctores y exploradores dicen haber visto con sus propios ojos insisten que las criaturas existen…
Alaska: sobrevuelo prehistórico
John Bouker, un piloto veterano del 22 años del Alaska Bush, pensó que se había vuelto loco. Mientra se dirigía hacia Manokotak el 15 de octubre de 2002, él y sus pasajeros pensaron que ellos de alguna forma habían volado en una escena de Jurrassic Park.
No lejos de la banda de estribor de su avión una gigantesca criatura alada.
El piloto asombrado y sus pasajeros todos atónitos consiguieron echar un buen vistazo a la cosa.
Al comparar las notas sobre el avistamiento, todos estaban de acuerdo en que la criatura parecía firmemente a las ilustraciones en libros sobre dinosaurios y otros animales extintos.
La criatura voladora no era un ave; era un pterodáctilo vivo.
Algunos ornitólogos sugirieron que lo que el piloto vio fue un águila grande, pero Bouker insiste en que no es lo que era, “tienen que darse cuenta de que la cosa que vi lo confundí con otra Cessna viniendo hacia mí. Esto fue grande, grande, grande. He visto tal vez 100.000 águila, y sé que esto era mucho más grande que una envergadura con alas de 8 pies (2.5 metros). No desearías tener a sus hijos saliendo con este chico alrededor,”el fue citado como el dijo en el Telegraph.
Un testigo en el suelo también vio a la criatura. Dijo a los medios de noticias que definitivamente no era un pájaro. Describió al animal como algo parecido a un prehistórico pterodáctilo.
El biólogo Phil Schemf del servicio de pesca y vida silvestre en Anchorage en Alaska dijo al Telegraphque noticias del avistamiento le habían llegado. “Por lo que sabemos”, dijo al diario, “nada con una envergadura con alas de 14 pies (4.2 metros) ha estado vivo durante más o menos los últimos 100.000 años”.
Brasil: terror del terodáctilo
Se han reportado otros avistamientos de pterodáctilo por testigo en aviones. Un encuentro informado porDavid Hatcher Childress involucrado un aeroplano que por poco colisiona en pleno vuelo con un inmenso pterodáctilo durante el año de 1992 sobre una región montañosa de la selva brasileña poco explorada. El incidente asombroso fue cubierto por un semanal de noticias llamado People.
Childress escribe: “un antropólogo de EE.UU. llamado Dr. George Biles estaba supuestamente a bordo del avión de veinticuatro pasajeros y fue citado diciendo,” se trata de un caso clásico de pterodáctilo blanco con una envergadura de alas gigante. Por supuesto, he escuchado los rumores desde hace muchos años que estas criaturas prehistóricas todavía vagaban por el Amazonas. Pero yo estaba escéptico como todos los demás. Pero eso no era un avión o un OVNI volando junto a nosotros. Era un pterodáctilo.’
“El relato de People dice que el pterodáctilo volaba junto con el avión mientras se estaba preparando para aterrizar y que el piloto se desvió lejos para evitar chocar con el ‘pájaro gigante’. Una azafata llamada Maya Cabon es citada diciendo, ‘Allí estaba este monstruo gigante volando derecho junto al aeroplano. Estaba sólo a unos metros de la ventana- y parecía que me estaba mirando directamente. Pensé que íbamos a morir.”
¿Podrían esas maravillas prehistóricas realmente haber sobrevivido hasta los tiempos modernos? Cuentos de pterodáctilo en el pasado a menudo eran llamados dragones. La descripción del “dragón”, sin embargo, se ajusta la apariencia física de un pterodáctilo grande.
China: el sacerdote y el pterodáctilo
Una historia fascinante a lo largo de estas líneas es contada por el Equipo de investigación de Criptozoología. Un sacerdote ruso relata el avistamiento de un terodáctilo: “aquí esta un reporte interesante, lo que indica que los terodáctilo pueden haber sobrevivido en China en épocas relativamente recientes. A finales del siglo 19, un Santo ortodoxo ruso llamado Saint Barsanuphius que recidia en Manchuria un pastor de los soldados rusos durante la guerra ruso-japonesa.
“Se me ocurrió escuchar a los soldados que estaban en los puestos en la estación de Hantanza, cuarenta millas de Mullin, hace dos años, a menudo vieron un enorme dragón alado colarse en una de las cuevas de la montaña. Les aterrorizó, y nuevamente se ocultaron en las profundidades de la cueva. No lo han visto desde ese momento, pero esto demuestra que los cuentos de los chinos y japoneses sobre la existencia de los dragones no son todas fantasías o fábulas, a pesar de que los los naturalistas ilustrados niegan la existencia de estos monstruos.
Pero después de todo nada se puede negar, simplemente porque no está a la altura de nuestra comprensión.”
Falsas alarmas de pterodáctilo
Lo paranormal, Ovnis, animales criptozoológico, todos son presa de mitómanos y engaños. Informes de pterodáctilo no son una excepción. En los últimos años han surgido algunos engaños que hacen que las investigaciones serias de la existencia de las criaturas mucho más difícil.
Embrión (izquierda) desde un sitio Web de ciencia junto a un Photoshopeada cabeza de ave en un cuerpo de murciélago (derecha)
Los ejemplos incluyen vídeos falsos publicados en Youtube, cuentas cuestionables por gente en busca de notoriedad y un buen número de imágenes de photoshop que tienen por objeto ser imágenes reales de pterodáctilo con vida.
Sin embargo, algunas fotos, son reales. Un ejemplo de uno legitimo y cómo puede ser confundido con una foto que se ha desmentido a continuación:
Desmentida foto de la ‘Guerra Civil’ de EE.UU. de un pterodáctilo
Foto real de la Guerra Civil de EE.UU. con presunto pterodáctilo
Foto de Ropen (pterodáctilo) en Papua Nueva Guinea
Cazando terodáctilo vivos: las expediciones de Papua Nueva Guinea
Informes como estos aparecen a lo largo de la historia. Los pueblos de Mesoamérica también documentan avistamientos de criaturas que coinciden con la descripción de los pterodáctilo.
Hoy en día, continúa la caza del pterodáctilo. Una criatura llamada Ropen se sabe que habitan en las regiones de la Tierra primitiva de Papua Nueva Guinea.
En 1944, en Nueva Guinea, Duane Hodgkinson y su amigo vieron un pterodáctilo con una envergadura similar a un Piper Tri-Pacer (29 pies).
Expediciones a la zona y entrevistas con muchos testigos presenciales nativos presta apoyo a la evidencia de que algunos pterodáctilos todavía vagan por los cielos. Fosiles vivientes desde un pasado muy antiguo.
Los Nativos Africanos Peleaban con Dinosaurios?
¿Los dinosaurios aún caminan sobre la tierra? Muchos investigadores incluido algunos científicos universitarios lo creen. Dinosaurios han sido reportados por todo el planeta durante miles de años.
Algunos lo han deslizado dentro de mitos como dragones, otros en leyenda moderna como el monstruo de Lago Ness. Sin embargo, desde Papúa Nueva Guinea a América del Sur, desde Canadá al Reino Unido y de los lagos ocultos de Rusia a las tórridas selvas de África central, los informes de dinosaurios y bestias monstruosas persisten. Recientemente, nuevas evidencias ha surgido aumentando la credibilidad que los nativos africanos ha matado a un dinosaurio en una feroz batalla entre guerreros tribales desesperados y un enfurecido… salvaje monstruo del pantano
Cuando los guerreros avanzaban, arrojando sus lanzas tomados con fuerza en sus puños, ninguno sabía si alguno de ellos podría sobrevivir los próximos eternos minutos. Antes de ellos, emergiendo de la ciénaga, se levantó una criatura de pesadillas, un monstruo de las brumas del infierno que debió haberse esfumado hace incontables milenios. Pero allí estaba, resoplando, con los ojos desorbitados, listo para matar.
Inexorablemente el gigante avanzo sobre los hombres, pero con valentía se mantuvieron firmes.
Se trata del reporte de la tribu pigmea que afirma haber matado a un dinosaurio. ¿Hay otros que aún quedan? Algunos científicos dicen que hay pocas dudas que existan más de estas bestias.
Recientemente, la historia de la lucha mortal de nativos con la criatura del África Central llamada Mokele-Mbembe fue confirmada por un pastor cristiano.
El pantano Likouala del Congo: terreno mortal de 55.000 millas cuadradas
La historia de los dinosaurios en África
Tal vez el dinosaurio más célebre y el más buscado por expediciones de investigación, es el legendario Mokele-Mbembe.
El nombre de Mokele-Mbembe traducida de la lengua nativa significa “El que detiene el flujo de los ríos”.
El Mokele-Mbembe se acera al tamaño de un elefante
Otros animales que se ajusten a las descripciones del dinosaurio en la región donde mora Mokele-Mbembe es Themela-Ntouka (la “asesina de elefantes;” las descripciones de los nativos encajan con un Rinoceronte prehistórico), el Mbielu-Mbielu-Mbielu (“el animal con tablas creciendo en su espalda,” que puede ser una cresta del Estegosaurio) y finalmente Nguma-Monene (gran serpiente similar a la Yacumama Amazonas excepto que se ha dicho que tiene una cresta aserrada recoriendolo longitudinalmente hacia abajo de su columna vertebral).
Foto del supuesto Mokele-Mbembe nadando en el Lago Tele
Los informes de estos animales se remontan cientos de años y documentado casos de testigos, incluyendo algunos de los misioneros europeos durante el siglo 19, atestiguan el hecho de que algunos tipos de animales previamente desconocidos recorren las selvas y pantanos de una de las zonas más inhóspitas del mundo.
Quizás ese entorno muy inhóspito es lo que mantiene a la mayoría de los seres humanos y otros depredadores en la bahía y permitió a los animales escapar de la extinción total.
Pastor misionero confirma reporte de indígenas
Recientemente, la historia de la lucha mortal de nativos con la criatura del África Central llamada Mokele-Mbembe fue confirmada por un pastor cristiano.
De acuerdo al investigador William Gibbons que emprendió importantes expediciones al Congo durante 1985-1986 y nuevamente en 1992 buscando pruebas de Mokele-mbembe, el misionero Pastor Eugene P. Thomas tuvo conversaciones con dos de los testigos de la tribu de la criatura y juraron que eso era un dinosaurio.
Thomas testifica que los pigmeos de la región del lago Tele, de la tribu Bangombe, fueron molestados al invadir su territorio de pesca por enormes animales. Los animales que provienen del pantanal, afirmaron los nativos, los Mokele-Mbembes fueron los culpables. Para derrotarlos los nativos construyeron barreras de madera para mantener a las criaturas fuera del lago y proteger el territorio de pesca de los pigmeos.
El pastor Eugene Thomas y su esposa conocieron a los nativos que lucharon con las criaturas
El plan parecía una buena idea hasta el día en que dos de las bestias fueron vistos golpeando la barrera intentando romperlo para alcanzar el lago.
En ese momento, los pigmeos, armados con lanzas, echaron afuera a uno de los animales y mataron a la otra. Ellos rebanaron al dinosaurio muerto en trozos durante un período de días.
William Gibbons entrevista a testigos que vieron un Mokele-Mbembe
“Esta tarea [descuartizar] aparentemente tomó varios días debido al tamaño del animal, que fue descrito como más grande que un elefante de bosque con un cuello largo, una cabeza pequeña parecido como al de la serpiente o lagarto, el cual estaba decorado con algo parecido a una cresta.
Los lanceros pigmeos también describieron una cola larga y flexible, una piel suave, de color marrón rojizo y cuatro patas rechonchas, pero potentes patas con garras en los dedos.
El pastor Thomas también mencionó que los dos pigmeos imitaron el grito del animal cuando estaba siendo atacado y lanceado.”
Los locales dibujaron a Mokele-Mbembe en la arena.
Según los dos testigos que contaron el incidente al pastor, el pueblo celebró la victoria sobre los dos Mokele-Mbembe. Como era tradicional, la carne de un animal conquistada en batalla fue asada y comida.
Fue un gran error.
Gibbons además escribe:
“Sin embargo, quienes participaron en la fiesta finalmente murieron de intoxicación alimentaria o de causas naturales. Debe señalarse que los pigmeos rara vez viven más allá de 35, y las mujeres pigmeas dan a luz a la edad de 12 años. También creo que la mitificación (poderes magícos, etc.) alrededor de Mokele-mbembes que comenzó con este incidente. “
Durante la expedicion al Congo de Gibbons habló con muchos de los que habían visto a las bestias, pero fue incapaz de encontrar uno mismo.
A los Mokele-Mbembes le gustan las flores de la planta de Molambo
Otra expedición a la misma región, montada por los japoneses durante 1988, informaron que observaron “una gran joroba de un animal, que se mueve lentamente, como si estuviera buscando alimento en el fondo del lago…
Gibbons entrevisto a Jose Bourges, un oficial de fauna congoleña que participo en el esfuerzo japonés. Bourges confirmó el avistamiento de un Mokele-Mbembes por todos los miembros de la expedición.
Los Mokele-Mbembes tienen su nido en cuevas como ésta
Los expertos han desestimado otros animales en el pasado
Mientras que los relatos anecdóticos no constituyen una prueba científica, es interesante observar que los zoólogos ortodoxos desestiman los increíbles informes realizados por los exploradores europeos y aventureros que regresaban de África durante el siglo XVIII ellos lo describían como de piernas largas, cuello largo, seres que en realidad eran como jirafas.
También rechazado rotundamente por los expertos fueron los testimonios de una bestia con un único cuerno que vive en las llanuras de África. La criatura se decía que era un animal basada en el mítico unicornio — hasta que los propios científicos vieron la prueba absoluta de la bestia que eventualmente llegó a ser conocida en el mundo occidental como el Rinoceronte.
Famoso investigador Ivan T. Sanderson cree todavía que los dinosaurios existen
A pesar de no investigar las pruebas, muchos zoólogos modernos desestiman los informes de los dinosaurios vivientes.
Aunque el Mokele-Mbembes ha sido visto cientos de veces o cerca del pantano de Likouala, a los informes se le restó importancia por parte de todos, excepto por algunos científicos.
Un diario cuenta que Herman y Kia Regusters se encontraron con un dinosaurios en el Congo
Las cuevas se han localizado donde indios afirman que las criaturas viven, y algunos cazadores tribales que han visto a las criaturas alimentarse dicen que la criatura es atraída por las flores de la planta de Molambo.
Interpretación artistica de un Mokele-Mbembes cruzando el río
Un problema serio que enfrentan los investigadores es la región que está infestada de enjambres de insectos que pican, como las abejas asesinas. Los pantanos, las sanguijuelas, y una variedad de serpientes venenosas que habitan en la zona.
Otro desafío a la intención de los investigadores de rastrear a la bestia es el minúsculo tamaño del pantano de Likouala. El pantano, el pantanal y el lago adyacente cubren aproximadamente el mismo tamaño de New York.
Encuentros anecdóticos de muchos pescadores que avistaron a Mokele-Mbembe en el río no es prueba suficiente de que las criaturas existen.
Y sin embargo los informes continúan llegando a las autoridades por parte de los científicos lugareños que continúan en su búsqueda.
El Mokele-Mbembes se parece a un brontosaurio
Prácticamente todos los testigos que afirman que han dado un buen vistazo al animal están de acuerdo en que el Mokele-mbembes es muy similar en apariencia a la extinto Apatosaurio.
Muchas más expediciones están previstas en el futuro. Quizás en los próximos años la existencia del misterioso dinosaurio con vida, Mokele-Mbembes, finalmente será demostrada.