Macià Alavedra (derecha), junto a su esposa, a la salida de la cárcel Brians 2, en 2009. (EFE)
Durante las pasadas décadas, dos de los principales escuderos de Jordi Pujol tejieron un entramado de sociedades pantalla y fondos por medio mundo que les permitieron defraudar millones de euros. Eran Macià Alavedray Lluís Prenafeta, ambos implicados en la Operación Pretoria, para los que el fiscal pide 6 años y 10 meses de cárcel y multas de 10,3 y 13,7 millones de euros respectivamente.
El más conocido es Alavedra, uno de los puntales del Gobierno catalán durante una década, que fue considerado incluso como posible sucesor del propio Pujol. Alavedra, hijo del poeta Joan Alavedra, fue consejero de Gobernación para pasar luego a ser de Industria y, finalmente, de Economía entre 1989 y 1997, cargo en el que le sustituyó Artur Mas. Desde entonces, se dedicó en cuerpo y alma a hacer negocios en la empresa privada. Y vaya si los hizo: el fiscal asegura que desde 1997 a 2008 “percibió por su actividad ilícita” al menos seis millones de euros, de los que más de 637.000 “derivan de la actividad delictiva cometida por su labor de intermediación en las adjudicaciones públicas realizadas en las localidades de San Andreu de Llavaneres y Badalona”. Otros 290.000 euros le fueron pagados por Gas Natural y 288.000 euros más se los entregó la empresa Buic, propiedad de Lluís Prenafeta, el otro de los escuderos, que había formado parte del Gobierno catalán en los años 80.El relato fiscal es contundente: 'Macià Alavedra utilizó una sociedad instrumental domiciliada en Liechtenstein, Vernet Foundation, para ocultar parte de sus ilícitas ganancias, aflorando tres millones de dólares en el año 1997 y más de un millón de dólares en 1998'Para ocultar su fortuna, el antiguo consejero catalán se sirvió de varios métodos. El primero fue esconder el dinero en un fondo de las Islas Caimán. El relato fiscal es contundente: “Macià Alavedra utilizó una sociedad instrumental domiciliada en Liechtenstein, Vernet Foundation, para ocultar parte de sus ilícitas ganancias, aflorando 3 millones de dólares en el año 1997 y más de un millón de dólares en 1998 mediante la adquisición de un fondo denominado Fondo Premier Fund LP, domiciliado en las islas Caimán y gestionado por la entidad norteamericana William Miller & Co. Inc”.
Los intereses accionariales
En diciembre de 2001, transmitió estas participaciones a su mujer y en marzo del 2006 llevó el dinero a Andorra, donde lo repartió en tres cuentas bancarias que abrió en el país pirenaico a nombre de su esposa, Doris Malfeito, ya fallecida. Según los movimientos de cuentas a que ha tenido acceso El Confidencial, durante los meses siguientes, la pintora (la esposa de Alavedra era pintora de profesión) se dedicó a invertir en acciones. Los paquetes más importantes que compró fueron de Telefónica (unos 257.000 euros), Deutsche Telecom (casi 240.000), Arcelor (más de 236.000), Sogecable (más de 146.000) y MAPFRE (140.000).
Pero hubo más ocultamientos al fisco español de sus movimientos de dinero. Su empresa Vernet Foundation abrió también una cuenta en el Liechtensteinische Landesbank AG, en Vaduz, la capital del pequeño principado centroeuropeo. Allí depositó 18.500 euros en 1997 y envió otras dos remesas de 112.000 y de 24.000 euros al año siguiente. A partir del año 2000, adquirió a través de esta sociedad las acciones de otra sociedad panameña denominada Vernet Investment Inc, en la que ingresó más de 236.000 euros no declarados al fisco. Y a través de la panameña escamoteó al fisco español otros 22.000 euros en 2001. “En definitiva, el total de las ganancias que ocultó entre los años 1997 y 2001 sirviéndose de la sociedad instrumental Vernet Foundation ascendió a 3.971.207,15 euros”, subraya el informe del fiscal.
Las cuentas de la amiga
En Andorra, no obstante, no sólo contaba con las tres cuentas de Doris Malfeito, sino con otras tres a nombre de Gloria Torres (“con quien mantenía una fluida relación personal”). En sus cuentas, Alavedra escondió otros 1,2 millones de euros.
Otra de las cuentas recibió tres transferencias: una de ellas, de 298.000 euros, llegó desde la cuenta suiza Brega. Las otras dos, de 200.000 y 500.000 euros, fueron realizadas por la compañía andorrana Auge i Gracia Patrimoni. Todos estos fondos fueron invertidos en activos y productos financieros y trasladados, en el 2007, a otra cuenta de Andorra.
De Nueva York a Nueva Zelanda
A partir de ese momento, Macià Alavedra volvió a dirigir la mirada hacia los paraísos fiscales del trópico. “Durante el año 2008, a través de una compleja estructura fiduciaria integrada por sociedades constituidas en Belice, Nueva Zelanda y Nueva York transfirió fondos por importe de 290.337,69 euros”.
Aquí se lucraron tanto Alavedra como sus socios en la empresa Contagás,Enrique Escassi y Jorge Presas: Gas Natural contrató a esta compañía como asesora en un proyecto de explotación de gas en Angola. Y ellos exigieron los pagos a través de Contagás International Ltd: un total de 2.710.000 dólares. Una vez cobrado el dinero, en vez de declararlo al fisco, fue transferido a una sociedad instrumental norteamericana, Jewell Ventures LLC, que a su vez envió un millón de dólares a Rosecity Limited.
Para mantener la opacidad de la operación, asegura también el informe fiscal, se utilizó la sociedad Ibero Services, domiciliada en Belice, a través de la cual el exconsejero catalán invirtió su parte “en fondos depositados en una de las entidades filiales del grupo portugués Millennium BCP –en concreto en sufilial en las Islas Cayman Millennium BCP Bank & Trust– destinándolos a la adquisición de un depósito a plazo fijo y diversos productos estructurados”.
La complementaria
El informe aclara, no obstante, que “si bien estos fondos no fueron incluidos por Macià Alavedra en su declaración del IRPF correspondiente al año 2008, el 17 de diciembre de 2009 –una vez incoadas las presentes diligencias previas– presentó una declaración complementaria de la anterior aflorándolos”. No le falta razón: aquel ejercicio, el exconsejero había pedido una devolución de 35.549,40 euros al fisco, pero con la complementariaacabó pagando 124.862,54.
Por todos los fondos sin declarar, el Ministerio Público considera que Alavedra también cometió un delito fiscal por no haber pagado a Hacienda un total de 2,6 millones de euros por los ejercicios de 1997, 1998, 2000 y 2006, aunque en estos casos los delitos están prescritos.
En todo este entramado, una de las piezas fundamentales es Philip Bolich, que había sido el principal asesor de las fortunas españolas que buscaban paraísos fiscales durante las décadas de los 80 y 90. Bolich fue el encargado de abrir todas las cuentas de la esposa y la amiga de Alavedra en Andorra y de mover los capitales. Acostumbrado a vivir cómodamente, tenía un mayordomo al que utilizó para repatriar a España 300.000 euros de Macià Alavedra en mayo del 2009.
http://www.elconfidencial.com/espana/cataluna/2015-01-19/la-red-mundial-de-alavedra-el-intimo-de-jordi-pujol-para-evadir-millones-al-fisco_622980/