A medida que el sistema se prepara para soportar la reacción al aumento de las tasas en la Reserva Federal, Trump también está quitando los grilletes impuestos por la Ley Dodd-Frank que instituyó ciertas protecciones para los consumidores.
La crisis económica de 2008 penalizó a todo el mundo con un ciclo completo de congelación de salarios, inanición laboral y dependencia aplastante de los programas gubernamentales de asistencia.
Wall Street y los banqueros en general, sin embargo, se salvaron de la culpa o de las reparaciones a una sociedad que fue totalmente robada por ellos.
En cambio, ocho años de flexibilización cuantitativa enviaron una marea de dinero fácil al sector financiero que creó lo utilizó para la compra de activos, especialmente viviendas, donde las altas tasas están forzando a las familias a convertirse en arrendatarias en lugar de en propietarias.
La elección del Presidente Trump creó optimismo sobre nuestras perspectivas financieras colectivas.
Pero los banqueros fueron los que lo celebraron más; los mercados de valores se dispararon y las posiciones clave en la Casa Blanca fueron ofrecidas a los hombres de Goldman Sachs y a otros de su clase.
Ahora, el Presidente Trump ha emitido una orden ejecutiva que hará feliz de nuevo a Wall Street y les hará felicitarse por respaldar al hombre adecuado.
Como informa el Independent:
Se espera que Donald Trump ordene una revisión de la Ley Dodd-Frank, que fue implementada después de la crisis financiera de 2008, para prevenir una repetición de la peor crisis financiera desde la Gran Depresión.
Dicha ley permite dividir los bancos que se cree que podrían plantear un riesgo sistémico para el orden financiero global. También tiene la capacidad de exigir que los bancos mantengan mayores reservas, o búferes de dinero en efectivo, para minimizar un apretón. Por otra parte, la Ley Dodd-Frank también creó la Oficina de Protección Financiera del Consumidor, para supervisar los productos financieros de los consumidores, como las hipotecas.
Una parte clave de la Ley es la Regla Volcker, que restringe la forma en que los bancos están autorizados a invertir y coloca restricciones al comercio especulativo. También restringe a los bancos de involucrarse en el llamado comercio de propiedad, o de negociar para la ganancia directa de la empresa, en lugar de en nombre de un cliente.
Así, en efecto, la norma está diseñada para separar la inversión y los negocios comerciales de los bancos.
Parece claro que esta medida de Trump beneficiaría a los que están en la cúspide de la pirámide, pero un informe de Bloomberg que cita directamente a altos mandos de Wall Street y a gente de la propia Administración Trump, deja muy claro cuáles son las intenciones:
Altos ejecutivos de Wall Street, entre ellos Lloyd Blankfein de Goldman Sachs Group Inc. y Jamie Dimon de JPMorgan Chase & Co. han estado presionando por cambios durante años, argumentando que la industria financiera se ha viso demasiado limitada por el sistema impuesto por la Ley Dodd-Frank.
“Vamos a atacar todos los aspectos de la ley Dodd-Frank”, dijo Gary Cohn, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, en una entrevista con Bloomberg Television.
“Vamos a involucrar a la Cámara, vamos a involucrar al Senado. Están igualmente interesados en reformar algunos de los procesos regulatorios. Podemos hacer bastante sin ellos, pero mientras más ayuda obtengamos del Congreso, mejor vamos a quedar”.
Si estas limitaciones a los bancos se levantan, por inadecuadas que fueran, podrían abrirse de nuevo, de par en par (si no lo estaban bastante ya) las puertas para una nueva y gigantesca crisis.
Según expone el artículo de The Independent…
Algunos economistas sostienen que deshacerse de la ley Dodd-Frank podría allanar el camino para otra crisis.
Lo que hace las cosas mucho peor, es que muchos expertos creen que los sistemas financieros globales y las economías son más vulnerables ahora que lo que eran antes de la última crisis financiera. Así que si sufrimos otro accidente importante, el daño tiene el potencial de ser mucho más grave.
Los bancos centrales de todo el mundo ya han reducido las tasas de interés a mínimos históricos, dejándolos con una munición muy limitada para impulsar nuevos estímulos al crecimiento económico. La deuda del gobierno también se ha disparado durante la década desde la última crisis.
Añadamos a ello la desastrosa política de la Reserva Federal durante los últimos años.
Las políticas pro-empresariales y pro-americanas de Trump pueden ayudar si se implementan correctamente, pero permitir que el sector financiero se desboque y se corra el riesgo de un colapso de las masivas burbujas de derivados, no es la opción más saludable.
Tal y como expone Matt Taibbi en Rolling Stone.com…
Donald Trump, el hombre que se presentó como el “escudo del hombre común contra Wall Street”, firmó una serie de órdenes pidiendo revisiones o retrocesos de las regulaciones financieras. Lo hizo después de reunirse con algunos ayudantes muy “amistosos”.
CNBC describió la multitud de CEOs de Wall Street que recibió Trump antes de ordenar una revisión tanto de la Ley Dodd-Frank como de la norma fiduciaria, que obligaba a los asesores de inversión a actuar en interés de sus clientes:
“Trump también se reunirá en la Casa Blanca con importantes CEOs, incluyendo Jamie Dimon de JPMorgan, Steve Schwarzman de Blackstone y Larry Fink de BlackRock”.
Liderando este amplio surtido de héroes populistas estará el ex-presidente de Goldman Sachs, Gary Cohn, ahora consejero económico principal de Trump.
Dimon, Schwarzman, Fink y Cohn representan colectivamente una galería de los mayores responsables de la crisis de 2008.
Es curioso ver cómo se envalentona cuando habla de refugiados sin dinero, y como se doblega servilmente ante los chicos que tienen más dinero que él.
Esta es la auténtica realidad sobre Donald Trump, que tantos y tantos medios alternativos y trolls afines, no quieren que la población vea.
Y ahora, estimados lectores, si así lo desean, pueden pasar a la salita de estar del blog, es decir, al acogedor espacio de comentarios, y disfrutar del patético espectáculo de los Trolls Trumpistas, que confirmando la existencia de una campaña de propaganda a gran escala para promocionar a Trump como un presunto héroe anti-elitista, (que ya denunciábamos en anteriores artículos), procederán a demostrar de nuevo, que teníamos razón.
¡Contemplen sus acrobacias, estimados lectores, en todo su esplendor!
Véanlos esgrimiendo, espuma en boca, todo tipo de excusas y subterfugios malabarísticos de media neurona (a cada cual más delirante), para que ustedes no perciban la diáfana realidad: que Trump es el títere impuesto por las élites y los poderes más oscuros de Wall Street.
https://elrobotpescador.com/2017/02/09/otra-muestra-mas-de-que-trump-es-el-titere-de-las-elites-y-wall-street/#more-16531