Miembros de la "jauría" de argelinos, detenidos en Aicante, por secuestrar y violar a una menor. /Foto: levante.emv.com.
Javier de la Calle.
Es una auténtica plaga.
Las violaciones y agresiones sexuales perpetradas por manadas de inmigrantes están extendiendo el terror sexual por España.
El marroquí detenido en El Ejido.
/Foto: lavozdealmeria.es.
6 de enero de 2019. El Ejido (Almería).
Un joven de 18 años, de origen magrebí, es detenido por el Cuerpo de Policía Nacional por el intento de agresión sexual a una menor.
Además está acusado de 2 robos por el método del tirón de sendos móviles y 4 atracos con arma blanca en uno de los cuales apuñaló en una pierna a una joven de 14 años de edad.
Tenía ordenada la devolución a su país por entrada irregular en territorio español.
5 de enero 2019. Algeciras (Cádiz).
A las 9 de la noche, un varón de 18 años, presentado por los medios de comunicación como “natural de Madrid” y vecino de la cercana localidad de San Roque, junto con dos amigos, aborda, durante la cabalgata de Reyes, a una chica de 14 años y a su novio, al que amenazan y obligan a irse.
En el Llano Amarillo, zona de ocio nocturno, la fuerza a ir detrás de unos setos y la viola.
Unas amigas la encuentran poco después “bloqueada”. El agresor es detenido.
Según la versión de la víctima, los otros dos estuvieron contemplando la escena sin hacer nada para impedirla.
El agresor es de origen argelino, al igual que sus dos amigos.
Los ecuatorianos detenidos son introducidos en el furgón policial.
/Foto: levante.emv.es
31 de diciembre de 2018. Callosa d’en Sarriá (Alicante).
Cuatro “españoles de origen ecuatoriano”, de 19, 21, 22 y 24 años son detenidos por la violación de una joven, a la que previamente drogaron, para que no ofreciera resistencia, llevándola a una casa de campo.
Uno de los violadores grabó la violación. Los cargos son de agresión y abusos sexuales y contra la intimidad. Los investigadores consideran que esta manada ecuatoriana es responsable de otra agresión cometida en octubre y de un total de otras 4 agresiones sexuales.
31 de diciembre de 2018. Burriana (Castellón).
A las 5 de la madrugada, cuando volvía a su casa tras haber estado festejando la entrada de año en la carpa instalada por el Ayuntamiento en la Plaza Mayor, una menor es abordada por 2 varones, que la tapan la cabeza, la introducen en un coche y la llevan a una casa donde la violaron repetidamente hasta que a media mañana decidieron soltarla.
La Policía busca a 2 rumanos.
Estación de Can Peixanet, donde tuvo lugar la agresión. /Foto: lavanguardia.com.
11 de noviembre de 2018. Santa Coloma de Gramanet (Barcelona).
15 marroquíes, 2 de ellos menores, en la estación de Can Peixanet, línea 9 del Metro, perpetran una agresión sexual en grupo. En primer lugar, uno de ellos pega una puñalada al novio de la joven.
Habían llegado a España como “menores no acompañados” y habían estado tutelados por la Generalitat. Vivían en una casa ocupada en la avenida de la Generalitat.
Se trata de un grupo muy conflictivo que habían sido detenidos en un par de ocasiones la semana precedente por robo con violencia, que es su modus vivendi. Estaban contagiados de sarna.Sala Quilombo de Granada.
16 de noviembre de 2018. Granada. Dos senegaleses, de 24 y 26 años, violan a una joven en los servicios de la discoteca Quilombo, en plena zona centro de ocio de la capital granadina.
Cuando una amiga de la agredida acudíó a los servicios, de los que habían atrancado la puerta, los dos senegaleses salieron corriendo. Han sido puestos en libertad con cargos contra la libertad sexual y orden de alejamiento de 200 metros.
13 de junio de 2018. Elche (Alicante).
Tras una investigación de más de un año, la Policía localiza el coche y hace el seguimiento hasta la detención en Elche de un depredador marroquí. Las primeras denuncias se produjeron el 30 de mayo de 2017. El modus operandi era seguir a las víctimas hasta el portal de su casa, introducirse con fuerza y abordarlas sexualmente. Se le imputan 7 delitos contra la libertad sexual.
16 de abril de 2018. Alicante.
Una sudamericana de 19 años denuncia haber sido agredida sexualmente en grupo por tres argelinos. Coincidió con uno de los agresores, de 34 años, en una zona de ocio del Puerto de Alicante y decidieron ir a casa del argelino, aunque ella advirtió que no quería nada de sexo.
Al entrar en la casa, salieron dos jóvenes que empezaron a agredirla sexualmente. El argelino que conoció en el Puerto de Alicante fue detenido en el aeropuerto de El Altet cuando trataba de huir a Argelia. Es el único que está en prisión.Miembros de la “jauría” de argelinos, detenidos en Aicante, por secuestrar y violar a una menor. /Foto: levante.emv.com.
28 de marzo de 2018. Alicante.
10 argelinos mantuvieron secuestrada durante 24 horas a una menor en situación de vulnerabilidad, alojada en un Centro de Menores, sometiéndola a vejaciones y abusos sexuales.
También abusaron de otras dos jóvenes igualmente residentes en el Centro de Menores, a las que ofrecieron drogas, alcohol y dinero. Se dictó prisión sin fianza para 3 por robo con violencia, detención ilegal, hurto y agresión sexual. Otros 2 fueron ingresados en el Centro de Internamiento de Extranjeros.
Conclusiones:
Silencio y ocultación de los medios de comunicación
Todos estos hechos de una extraordinaria gravedad son silenciados y ocultados a la opinión pública en los medios de comunicación. Prácticamente sólo son recogidos en la prensa local de manera poco destacada.
Apenas si salen en los informativos televisivos y de manera elíptica. No se informa, por ejemplo, de la nacionalidad de los agresores o de manera muy suscinta. Es muy ilustrativa de las técnicas de manipulación a las que está siendo sometida la opinión pública española como se ha dado la noticia de la violación en Algeciras de una menor el 5 de enero de 2019 presentando al agresor como “natural de Madrid” y ahora “residente en San Roque”.
Los medios no han considerado relevante el hecho de que el agresor, y sus dos acompañantes, fueran de origen argelino. En la misma línea de ocultación nunca se facilitan los nombres de los detenidos. Del agresor en El Ejido a una menor se dice que se llama AL. El lector puede establecer una comparativa sencilla y obvia con el tratamiento dado a La Manada de Pamplona, que practicó sexo en grupo consentido.
2.- Extraña tolerancia judicial
Parece producirse una extraña tolerancia judicial al ser los agresores extranjeros. Siguiendo con el mismo simil, los 5 miembros de La Manada de Pamplona fueron encarcelados de inmediato y estuvieron en prisión preventiva más de 1 año.
Los dos senegaleses presuntamente violadores de una joven en Granada son puestos de inmediato en libertad con cargos con una leve medida de orden de alejamiento a 200 metros. De los 10 argelinos que secuestraron y agredieron a una menor en Alicante, sólo 3 fueron ingresados en prisión y 2 llevados al CIE. De los otros 3 presuntos agresores a una sudamericana, sólo ingreso en prisión 1.
3.- Nula reacción feminista.
No se ha producido ni la más mínima protesta del movimiento feminista, ni de ninguna de sus numerosas asociaciones. No ha habido ninguna manifestación. Ni concentración ante ningún Ayuntamiento.
No hay constancia alguna de que ninguna de esas asociaciones haya emitido una sola nota de condena, ni de que se hayan interesado por las víctimas, ni las hayan ofrecido asesoramiento jurídico. Silencio completo.
Las violaciones y agresiones sexuales se cometen sobre todo contra menores
Las menores parecen estar en especial peligro, pues casi todas las agresiones sexuales y violaciones cometidas por manadas de extranjeros –en algunos casos, auténticas jaurías- se ceban casi siempre en menores. Así los casos de las agresiones en El Ejido, Burriana, Algeciras, Alicante o Santa Coloma de Gramanet.
5.- Los grupos perpetran agresiones previas a los varones que acompañan a las menores
En Santa Coloma de Gramanet, el novio o acompañante es acuchillado. En Algeciras se amenaza y coacciona al novio para que abandone el lugar. Actúan en grupo con violencia.
6.- Con sensación de impunidad
Las terribles escenas de agresión sexual y violación se producen en un contexto que sugiere sensación de impunidad.
El agresor de la menor de Algeciras perpetra la violación simplemente detrás de unos setos y es detenido después en la zona. El depredador marroquí detenido en Elche está más de un año perpetrando 7 agresiones sexuales; la manada ecuatoriana de Callosa d’Ensarriá puede haber llevado a cabo 4 violaciones.
Los 15 jóvenes de Santa Coloma de Gramanet vuelven a la casa que tienen ocupada. Sólo los dos senegaleses de Granada salen corriendo y uno de los argelinos agresores de la sudamericana de Alicante trata de salir del país para irse a Argelia.Nuria Parlon.
/Foto: lavanguardia.com.
7.- Ninguna reacción de los partidos políticos
Las noticias ofrecidas sobre estos casos de gravedad extrema no reflejan ninguna condena por parte de los partidos políticos. No se conoce reacción alguna. Nadie –con la excepción de Vox, de manera genérica- está denunciando esta plaga ni se está haciendo eco del estado de miedo e inquietud existente en la población.
El único hecho que produjo alguna polémica política fue el de la agresión en grupo en Santa Coloma de Gramanet, pero de una forma harto curiosa, en relación con que entidad administrativa tenía la responsabilidad, no de atender a la víctima, sino de haber cuidado a los agresores.
Así la alcaldesa, la socialista Nuria Parlon declaró que “se trata de un problema que no puede ser abordado localmente sin el apoyo del Gobierno de la Generalitat y, por ello, hacen falta medidas urgentes” y reseñó que “el grupo de detenidos responden al perfil de jóvenes sin residencia fija y que ocupan viviendas deshabitadas”.
Un problema que está generalizado en Cataluña en relación con quienes llegan como “menores no acompañados” y a los 18 años son soltados a la calle, desprotegiendo a los ciudadanos, y especialmente a las mujeres.
La Dirección General de Atenció a la Infancia y Adolescencia de la Generalitat responsabilizó, por su parte, al Ayuntamiento. Los partidos políticos callan con un silencio tan espeso como el de los movimientos feministas.
8.- Una sociedad desprotegida
La conclusión tremenda es que la sociedad española está desprotegida ante la plaga de agresiones sexuales cometidas por manadas de extranjeros. No se informa de ella, no se condena, no se toman medidas e incluso hay una extraña tolerancia judicial.
Mientras tanto, estas manadas no tienen el más mínimo respeto por los derechos de las mujeres, a las que tratan de la peor manera como objetos. La sociedad española está desprotegiendo a las mujeres y especialmente a las menores.
Mantener la ficción de que no hay relación entre inmigración y delincuencia
El silencio total de las asociaciones feministas, el mirar para otra parte de los partidos políticos, la ocultación y manipulación de los medios de comunicación sugiere que se trata de mantener la ficción del dogma de que no hay relación entre inmigración y delincuencia.
La España oficial parece atenazada por la teoría porque afrontar la realidad cuestionaría las políticas laxas de inmigración y establecería responsabilidades muy serias e intensas por parte de los responsables políticos, que están obligados a mantener el orden público y a proteger a los ciudadanos.
Hay un dato oficial contundente que establece sin ningún género de duda la relación directa entre delincuencia e inmigración: la población reclusa. En noviembre de 2016, el número de reclusos en las cárceles españoles –hombres y mujeres- era de 60.175, de los que 17.147 eran extranjeros; es decir, 1 de cada 3 reclusos es extranjero. Es altamente probable que la situación haya empeorado. De los 17.147 reclusos extranjeros, el 25% era marroquí, grupo responsable del 18% de los asesinatos anuales.
10.- Una auténtica plaga de violaciones por extranjeros llegados de culturas que no respetan a las mujeres
Estamos ante una auténtica plaga de violaciones, ante la que no están tomando medidas ni generando ni tan siquiera debate.
En 2017, según los datos oficiales, sólo en el municipio de Murcia hubo 11 violaciones con penetración, por 4 en 2016, un incremento del 175%. En el primer semestre de 2018, el número de violaciones con penetración en la comunidad murciana –una de las de mayor población extranjera, con el 13,7%- se había elevado a 26.
Esas violaciones son cometidas, sobre todo, contra españolas autóctonas, menores, por extranjeros provenientes de culturas donde la mujer es despreciada y considerada un ser inferior, como sucede con los marroquíes y argelinos musulmanes.