¿Por qué es que un niño con un sombrero de MAGA [NdT.- Siglas para Make America Great Again, «Hacer a Estados Unidos Grande Otra Vez»] sonriendo ante los tambores de los nativos americanos en su cara puede convertirse en un escándalo nacional, pero una actuación de la corriente dominante puede incluir a un intérprete rodeado de figuras demoníacas, bailando en llamas y mostrando representaciones de la Estatua de la Libertad en ruinas, y nadie parece ni pestañear?
Me refiero, por supuesto, a la actuación de Madonna en Eurovisión 2019 en Israel. Tenga en cuenta que Eurovisión no es un acontecimiento menor. En 2018, tuvo casi 190 millones de espectadores, lo que representa casi el doble de los 98 millones de la Super Bowl.
Las imágenes abiertamente satánicas son bastante comunes en las actuaciones de Madonna, y con las actuaciones de los principales cantantes de pop, en general, esto no fue especialmente inusual para ella. Pero la aparente falta de atención que reciben estos temas nos dice algo acerca de lo retorcidos que se han vuelto los estándares en el entretenimiento.
La verdadera ironía es que de todas las cosas de las que las agencias de noticias tradicionales podrían haberse quejado durante su actuación, las críticas se centraron sólo en la calidad del sonido, y en que aparentemente ella hizo un llamado a la paz entre Israel y Palestina mostrando a los artistas con las banderas de los países sobre sus espaldas al final.
La actuación de Madonna comenzó con su canción de 1989 Like a Prayer (Como una oración), y mostró figuras oscuras y encapuchadas en una escalera con una cara de diablo con cuernos proyectada sobre ellas en luz roja.
Esto dio lugar a la interpretación de una de sus nuevas canciones, Future (Futuro), junto al rapero Quavo. Los bailarines se quitaron la toga para revelar algunos vestidos de blanco o negro, y máscaras de gas de la Primera Guerra Mundial. Madonna finge acariciar y luego matar a los que están vestidos de blanco, como ella misma declara: «Creen que no somos conscientes de sus crímenes, pero es sólo que no estamos preparados para actuar», mientras que una pantalla en la parte de atrás muestra imágenes que se asemejan a sacerdotes católicos.
Entonces ella pregunta: «¿No oyes fuera de tu capucha suprema el viento que empieza a aullar?» Ella sopla sobre los bailarines de apoyo, que pretenden morir, y el escenario entonces se envuelve en llamas infernales. Luego ella declara: «No todo el mundo viene al futuro.
No todos los que están aquí van a durar», mientras la imagen de fondo cambia para mostrar la estatua de la Libertad rota y en ruinas en una ciudad de Nueva York destruida, y transiciones a otras escenas infernales, como mostrar el escenario envuelto en llamas.
La representación está llena de imágenes demoníacas y oscuro simbolismo ocultista.
Algunos espectadores señalaron el hecho de que Madonna llevaba un parche en el ojo con una «X», que supuestamente representaba su nuevo personaje de «Madame X». Por supuesto, es posible que sólo usara el parche porque piensa que le da estilo, pero sus usos anteriores del símbolo de cubrir un ojo, y el uso frecuente del símbolo por otras estrellas del pop, han levantado algunas sospechas en cuanto a su significado.
Muchos señalan al «Ojo de la Providencia» o al «Ojo de Horus» como referencia. Si bien esto fue entendido más tarde como un símbolo masónico, se remonta más atrás, a las sectas iluministas y luciferinas.
En las primeras iniciaciones luciferinas de los rosacruces, un iniciado era conducido con los ojos vendados a través de un laberinto, y luego se le quitaba la venda ceremonialmente. Cubrir un ojo y descubrir el otro se refiere a ver a través de las ilusiones fabricadas del mundo. Esto tiene otros significados desde dentro del ocultismo oscuro, donde Lucifer es considerado como el «traedor de luz» que «ilumina» a los seguidores con el conocimiento, lo que juega con la historia del Jardín del Edén, donde el diablo convenció a Eva de que comiera el fruto prohibido del Árbol del Conocimiento.
Aquellos en el ocultismo oscuro a menudo persiguen el conocimiento mundano bajo la creencia de que puede darles poder sobre otros.
En las sectas luciferinas, invierten la historia de la caída del hombre del Edén, para pintar el engaño de Lucifer como un regalo, refiriéndose a él como el «Prometeo» y la «estrella de la mañana». Jugando con el concepto iluminista de la luz luciferina, Madonna afirma: «Podemos iluminar la oscuridad. Todo el mundo tiene una chispa.»
En las sectas luciferinas, invierten la historia de la caída del hombre del Edén, para pintar el engaño de Lucifer como un regalo, refiriéndose a él como el «Prometeo» y la «estrella de la mañana». Jugando con el concepto iluminista de la luz luciferina, Madonna afirma: «Podemos iluminar la oscuridad. Todo el mundo tiene una chispa.»
En el ocultismo occidental, la idea de que «todo el mundo tiene una chispa» emerge del concepto de la dualidad interna. Creían que cada persona tenía un ángel y un demonio, y muchos tratan de usarlos en sus propias actividades de poder mundano y conocimiento, creyendo que pueden manipular a los ángeles y demonios a su antojo.
El rey Jaime advirtió de estas prácticas en su libro de 1597, Daemonologie, que en su creencia de que pueden controlar estas fuerzas, los individuos son engañados por su orgullo y esclavizados por fuerzas demoníacas que creían haber dominado.
Esto también se relaciona con el concepto de «arriba y abajo», donde el «Mago» se representa como apuntando hacia arriba y hacia abajo. Una representación bien conocida de esto es la imagen satánica del demonio Bafometo con cabeza de cabra, que a menudo se muestra apuntando tanto hacia arriba como hacia abajo. Madonna y otras estrellas del pop han representado a menudo este mismo símbolo.
Ya que se trata de alguien que estudia la Cábala, es poco probable que Madonna esté haciendo esto por casualidad. En el ocultismo oscuro, señalar hacia arriba se considera una referencia a la «luna blanca» de Chesed en el Árbol de la Vida, mientras que señalar hacia abajo se refiere a «la negra» de Geburah.
Una creencia común en el malvado «camino de la mano izquierda» del ocultismo oscuro es que tanto el bien como el mal se encontrarán en el mismo resultado, y que pueden alcanzar la «salvación a través del pecado».
Madonna parece representar esto al final de su actuación, cuando los artistas en blanco y negro la siguen mientras ella y Quavo caen hacia atrás del escenario, una probable referencia a su inmersión en el abismo, donde el bien y el mal se unen en una destrucción apocalíptica.
Por supuesto, es posible que estas estrellas del pop no tengan idea de lo que están haciendo, y sólo estén tratando de ser vanguardistas.
Pero, ¿cómo es posible que la sociedad pueda ver casualmente imágenes demoníacas como estas y no tener ningún problema con ello (incluso cuando se muestra a casi 200 millones de personas); sin embargo, incluso la sugerencia de valores que se oponen a su lema de «haz lo que quieras» puede convertirse en un escándalo nacional?
Comentario: El espeluznante (o patético, usted decida) espectáculo de Madonna en Eurovisión 2019:
mayo 27, 2019
https://es.sott.net/article/66992-Eurovision-2019-Por-que-nos-hemos-vuelto-insensibles-al-entretenimiento-demoniaco