miércoles, 18 de diciembre de 2013

¿Ves a los Hombre Sombra?

Alguna vez, mientras que estas viendo la televisión, puede que te haya llamado la atención algún movimiento percibido por el rabillo del ojo, pero al mover la cabeza, seguramente descubriste que allí no había nada. 

Puede que te haya ocurrido esto en la cama, en esos momentos en los que estás conciliando el sueño, cuando te parece percibir que algo o alguien pasa por los pies de tu cama, e incluso puede que al mirar en la dirección de lo que viste, encuentres allí alguna sombra que te confunde y que no sepas identificar. Pero al encender la luz, nada. Allí no hay nada.

Si buscáis en internet por “gente sombra”, o “shadow people”, o “shadow entities”, encontraréis que siempre que surge este tema en foros, los hilos se llenan de testimonios de personas que cuentan historias asombrosas, que en ocasiones son inventadas, y en otras ocasiones son percibidas como ciertas aunque no lo sean.

El mito de la gente sombra fue popularizad por la escritora y conferenciante Heidi Hollis, que en sus intervenciones en el programa radiofónico norteamericano De Costa a Costa en 2002 y 2006, los definió como entidades paranormales negativas, que han existido desde el principio de los tiempos y que se relacionan con entidades alienígenas malignas como los reptiles o los grises. Hollis va más allá, e incluso se atreve a proponer medidas para alejar a las entidades de las sombras de nuestras casas:

Aprender a dejar de lado nuestro miedo.
Mantenerse firmes y negarles el acceso a nuestra persona.
Centrarse en pensamientos positivos.
Pronunciar repetidamente el nombre de Jesús para repelerlos.
Mantenga una luz encendida.
Bendecir la casa con agua de manantial embotellada.

Al menos no nos dice la marca del agua que debemos usar.

El ojo humano percibe las imágenes en la retina, o película interior del ojo, que contiene dos tipos de células sensibles a la luz: los conos y los bastones.

Los bastones son más numerosos que los conos, unos 120 millones de bastones frente a 6,5 de conos, y son mucho más sensibles a la luz. Los conos se ubican principalmente en la zonza central de la mácula del ojo llamada fóvea. Son los responsables de la visión en color y de la agudeza visual. Los bastones sin embargo están dispersos por el resto de la retina con una menor densidad a medida que nos vamos alejando de la mácula. Están muy adaptados a la visión periférica y a la detección de movimiento.


Así, mientras que estamos observando nítidamente un árbol, cuya imagen en color se percibe sobre la fóvea, podemos percibir un objeto moverse en la periferia. Debido a la diferencia de sensibilidad de conos y bastones, puede que estemos viendo periféricamente una estrella, y que al mirarla directamente no podamos distinguirla.

Evolutivamente estamos predispuestos a identificar como una amenaza cualquier movimiento periférico que identifiquemos en la oscuridad, momento en el que el ser humano era más vulnerable a sus depredadores. Pero el poder identificar rasgos, como que una figura lleve o no sombrero, escapa de la posibilidad de estas células periféricas. Aunque bajo la sugestión, y si se está predispuesto a ello, puede que incluso seamos capaces de tener la certeza de estar viendo ese detalle y muchos más.

Ante la ausencia de evidencias materiales, lo único que se puede decir para explicar lo visto por los testigos es que se trata de sombras percibidas en la zona de visión periférica.

Las fotografías y vídeos que ilustran estos hechos, son en la mayoría sombras normales, y en otros casos directamente falsificaciones.

Así por ejemplo, este vídeo de una presunta entidad oscura, se trata de la sombra proyectada por el pilarote de la barandilla de la escalera, producida por una segunda fuente luminosa que se mueve por detrás de la cámara.
Esta otra que fue grabada en un sanatorio de Waberly Hills, es alguien que ha pasado por delante de la lámpara que produce la luminosidad del fondo del pasillo.
Esta otra, es un defecto de saturación de la luz de la cámara mezclado con una pareidolia.


O esta otra, muy famosa, que posiblemente solo sea una mujer morena con tejanos que ha salido movida.


2 comentarios:

  1. No son gente oscura. Se llaman tulpas. La mayoría de la gente los crea sin razón o sin saber que existen. Se basan en nuestra energía. Investiga un poco más de eso para que sepas. Pueden llegar a ser tan visibles y táctiles como nosotros los humanos. Supongo que la explicación es que al no saber que los estamos creando, no tienen una forma definida.

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  2. Me pasó a mi,y es verdad y no soy un loco.

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