sábado, 18 de enero de 2020

El Vampiro Drácula fue una mujer

Llegar hasta aquí no es fácil. No hay muchos medios de transporte que pasen por la pequeña aldea de Cachtice, al oeste de Eslovaquia y en pleno corazón de los Pequeños Cárpatos. 

Pero nosotros lo hicimos el pasado verano con un grupo de valientes porque la historia que aquí ha ocurrido merece la pena que sea conocida, y es que Drácula fue una mujer...

El vampiro Drácula fue una mujer

Los vampiros vuelven a estar de moda. Por nueve millones de dólares se ha puesto a la venta uno de los establecimientos más emblemáticos de Rumanía: el castelul Drácula de Bistrita-Nasaud, al norte del país, o por algo menos se puede subscribir a Netflix y ver la última adaptación que se ha realizado para la pequeña pantalla del clásico de Bram Stoker; adaptación con «estilo» propio, todo hay que decirlo… La historia del castelul Drácula de Bistrita-Nasaud, fundado en la década de los ochenta, asegura la periodista Bianca Sara que «es digna de una película.

 Fue pensado y construido por Alexandru Misiuga, jefe de la Oficina de Turismo cuando el país permanecía bajo la órbita comunista de la extinta URSS. Misiuga murió hace unos años y fue el pionero del turismo dramático en nuestro país, miembro fundador de la “Sociedad Drácula” en Londres y de la “Sociedad Transilvania Drácula”». 





Él fue quien pensó en los primeros bocetos del castillo, que originalmente estaba destinado a atraer a los turistas que buscaban al personaje más famoso de la literatura de terror, especialmente al turista norteamericano que acudía a esta tierra para ver los lugares reales que aparecen en la novela, entre ellos, el célebre castillo del conde transilvano. Ahora bien, ¿y si en realidad el castillo no estuviera aquí ubicado –se encuentra más al sur–? ¿Y si el Drácula de la novela, en realidad, hubiese sido inspirado por la historia de una mujer?

Cuando Bram Stoker decide iniciar su obra, utiliza el nombre de un príncipe nacido en la localidad transilvana de Sighisoara, cuyo perfil sanguinario se adaptaba perfectamente a la personalidad que quería imprimir al vampiro de su novela.

 Porque del Drácula histórico, más conocido en Rumanía como Vlad Tepes –Vlad «el empalador»–, sabemos que en la segunda mitad del siglo XV gobernó estas tierras de frontera del este de Europa, evitando las invasiones del poderoso ejército turco; sabemos igualmente que su modo de ejecución favorito consistía en empalar en postes de cuatro metros a sus enemigos; y sabemos que solía comer en bosques de moribundos empalados, ya que las crónicas aseguran que en apenas diez años de gobierno sacrificó a más de cuarenta mil enemigos. 

Por tanto, el gusto por la sangre –por contemplarla, al menos– lo hicieron firme candidato a protagonizar el universal libro de vampiros. Pero, pese a todo, hubo un personaje histórico más cercano a los actos que cometió el conde de la novela, que además poseía el mismo título nobiliario –conde– y que gozaba con la sangre de las doncellas vírgenes. 

Y es muy probable que su historia sirviese a Stoker para documentar la de su vampiro. Únicamente cambió el género del protagonista…



Hoy día pocos se acercan a Cachtice. Probablemente las historias que rodean a la fortaleza que se alza en lo alto de un cerro, a cuyos pies se sitúa la aldea, hayan contribuido a que así sea. Porque aquí los testigos afirman que, especialmente durante las noches de Luna llena, se oyen lamentos procedentes de su interior. 

Dicen además que son gritos de mujer… los de Erzsébet Báthory, la condesa húngara más poderosa de su tiempo que fue condenada a principios del siglo XVII a morir emparedada por sacrificar a más de seiscientas doncellas para bañarse en su sangre. 





¿El motivo? 

No lo sabemos, pero sí existe la certeza de que la noble húngara optó por esta técnica sanguinaria y atroz para así preservar su belleza, como le había indicado una de sus sirvientas, que al parecer se decía hechicera. Esto sirvió para que Bathory haya pasado a la historia como la primera psicokiller de la historia, y para que un autor irlandés creara una novela cuyo protagonista, Drácula, ha alcanzado la inmortalidad…

Sobre este personaje y los lugares en los que se desarrolló la novela, hablaremos largo y tendido en el espectacular viaje que vamos a realizar a Transilvania y Bucovina, la próxima Semana Santa. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario