Ya se sabía que la delegación argentina iba a viajar a Nueva York para encontrarse con el mediador Daniel Pollack, pero esta tarde él mismo lo ha confirmado. Ante los miles de rumores que surgen a raíz del casi inminente "default" en el que va a caer Argentina el próximo jueves 30 de julio, cuantas más veces sea confirmada una noticia, mejor.
Del país sudamericano llega de todo: que la Presidenta, Cristina Fernández, está ya preparándose para el "default" y ha comenzado a blindar bienes del país; que el ministro de Economía, Axel Kicillof, no mueve un dedo por ayudar al país porque planea tomar el mando; etc.
Miles de rumores ante una realidad: como Argentina no llegue a un acuerdo con los "fondos buitre" que litigan con el país antes de mañana, por medio del mediador designado por el juez estadounidense Thomas Griesa, caerá en suspensión de pagos. Una situación que podría evitar mañana a las 17 hora española, cuando se reunan los representantes del país con el mediador, ya que se siguen negando a sentarse en la misma mesa que con los litigantes.
Aunque no parece que vaya a haber acuerdo, más que nada porque Argentina no considera que deba pagar nada. "Argentina no va a estar en 'default' por una razón muy sencilla, esencial, elemental: en 'default' entran los que no pagan y Argentina pagó", aseguró el pasado miércoles Cristina Fernández.
ARGENTINA NO RECONOCE EL 'DEFAULT'
Mientras en el mundo financiero se habla del inminente octavo "default" de la historia argentina, el Ejecutivo de Fernández insiste en que técnicamente no hay incumplimiento porque el país pagó en el momento de girar a Estados Unidos, el pasado 26 de junio, el dinero destinado a inversores con bonos derivados de los canjes de deuda de 2005 y 2010.
Sin embargo, esos fondos no llegaron a las cuentas de los acreedores el 30 de junio, día del vencimiento, y quedaron en los bancos encargados de hacer efectivos los pagos, atrapados en un limbo judicial derivado del litigio de los fondos buitre contra Argentina.El Ejecutivo de Fernández insiste en que técnicamente no hay incumplimiento porque el país pagó en el momento de girar a Estados Unidos
Y es que a raíz de este juicio, por el que los fondos reclaman a Argentina 1.500 millones de dólares, entre capital e intereses, por bonos en mora desde 2001, el juez del caso, Thomas Griesa, bloqueó los fondos destinados a los acreedores de deuda reestructurada con el fin de asegurar la cobranza a los querellantes, que ya tienen una sentencia a favor en firme por parte de ese magistrado.
En teoría, Argentina tenía un mes de gracia para regularizar su compromiso con los tenedores de bonos antes de ser declarada en "default" técnico, plazo que vence este miércoles, y en este mes Buenos Aires ha solicitado varias veces a Griesa, sin suerte, una medida cautelar para liberar los fondos.Argentina insiste en que siempre manifestó 'voluntad de pagos' y la estrategia es que la responsabilidad recaiga sobre el juez
En paralelo, ha advertido que el magistrado deberá afrontar consecuencias legales por retener fondos que son de terceros y no ya de Argentina pues alega que el solo giro del dinero constituye ya un pago, argumento que también ha comunicado a sus acreedores en "avisos legales" para cubrirse ante eventuales juicios. "Van a tener que encontrar un nuevo término que refleje que un deudor pagó y alguien bloqueó y no deja llegar ese dinero, que es de terceros, a esos terceros, que son los tenedores del canje de 2005 y 2010 que entraron de buena fe", insistió Fernández.
En uno de sus tantos avisos legales a los tenedores de bonos, Argentina advirtió que deslindaba toda responsabilidad si los inversores no podían acceder a su dinero por culpa de un fallo judicial que excede al país sudamericano.
Argentina insiste en que siempre manifestó "voluntad de pagos" y la estrategia es que la responsabilidad recaiga sobre el juez.
El pasado sábado, Carlos Zanini, secretario de Legal y Técnica de la Presidencia argentina y "mano derecha" de Cristina Fernández, advirtió que Griesa va afrontar "alguna consecuencia porque no puede afectar así la propiedad de terceros".
EL PAÍS TIENE RECURSOS SUFICIENTES PARA PAGAR
Argentina tiene recursos suficientes para pagar a los litigantes todo lo que reclaman, en efectivo, pero Buenos Aires argumenta que, si lo hace, incumplirá una cláusula legal que le impide dar mejores condiciones de pago a otros acreedores por sobre las que admitieron quienes entraron a los canjes de 2005 y 2010 y convalidaron fuertes quitas sobre el capital y bonos a largo plazo.
Si viola esta salvedad legal, que caduca a finales de este año, Argentina, según alega el Gobierno de Fernández, se expone a demandas por parte de los acreedores de su deuda reestructurada, con costos que Buenos Aires calcula en 120.000 millones de dólares, un peso que el país, con reservas monetarias por 30.000 millones, no podría afrontar.La última vez que Argentina entró en mora fue en diciembre de 2001, cuando declaró un cese voluntario de pagos por 102.000 millones de dólares
La última vez que Argentina entró en mora fue en diciembre de 2001, cuando, en medio de una severa crisis económica, social y política, declaró un cese voluntario de pagos por 102.000 millones de dólares, considerado el mayor cese de pagos de la historia moderna.
Con dos operaciones de canje, en 2005 y 2010, el país reestructuró la mayor parte de esa deuda, con una quita del 65 % y la adhesión del 93 % de sus acreedores.
Pero parte de los bonos que no ingresaron al proceso fueron adquiridos en 2008 por fondos de inversión que llevaron a Argentina a los tribunales en un juicio que se ha convertido en un verdadero quebradero de cabeza.
http://www.elconfidencial.com/mercados/inversion/2014-07-28/argentina-apura-hasta-la-vispera-para-tratar-de-evitar-el-default-con-una-nueva-reunion_169409/
LA AGENCIA S&P REDUCE CALIFICACIÓN DEL PAÍS
Kicillof ya ha salido de la reunión con el mediador: en breves informará
Tras seis horas, se ha acabado la reunión entre el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el mediador Daniel Pollack. El ministro dará una conferencia de prensa en el Consulado argentino de Nueva York, en breves momentos. Todavía no hay ninguna confirmación oficial sobre el curso de las negociaciones.
El optimismo sobre si Argentina evitará finalmente caer el default o suspensión de pagos es cada vez mayor. A unas horas de que expire el plazo acordado por el juez Thomas Griesa, la situación se torna en favor del país sudamericano. Y todo gracias, en parte, a Kicillof y a la banca privada argentina.
El ministro ha esperado hasta la víspera para tomar cartas en el asunto. Desde que llegó ayer al despacho del mediador, Kicillof ha estado reunido tanto con él como con los fondos buitre que litigan con el país -por lo que se ha unido al grupo que ya lleva reuniéndose varias semanas para intentar buscar una solución, entre los que se encuentran la procuradora del Tesoro, Angelina Abbona; el secretario de Finanzas, Pablo López y el secretario de Legal y Administrativo del Ministerio de Economía, Federico Thea.
Este miércoles las negociaciones han proseguido ya con Kicillof al mando. Y es que la cosa es seria: si no llegan a una solución con el mediador, el país sumaría el octavo default a su historia.Como no lleguen a una solución con el mediador, el país sumaría el octavo 'default' a su historia
Una situación que a esta hora parece un poco menos probable:
los bancos privados del país han hecho una oferta tentadora a los bonistaspara intentar salvar al país. Este miércoles han asegurado que ofrecerán comprar los títulos con descuento a los tenedores de bonos. Una oferta que aún está por concretarse, ya que la Asociación de Bancos Privados de Capital Argentino, ha enviado a un representante a Nueva York para negociar con los bonistas la cantidad extacta, los plazos y la forma de pago.
A esta hora, y tras cuatro intermedios, no hay informaciones claras. La última noticia que ha llegado ha sido que la agencia Standard & Poor's ha reducido la calificación crediticia de Argentina a 'default selectivo'.
Lo único seguro es que al país se le agota el tiempo para evitar caer en la suspensión de pagos. De hecho, le quedan horas para conseguir llegar a un acuerdo con los fondos especulativos de inversión, que reclaman al país sudamericano el pago de la deuda en mora por un valor de 1.500 millones de dólares.
Pero ante todo Argentina no pierde la fe, ya que espera que Griesa otorgue una medida cautelar que permita al país la reestructuración de la deuda total con sus acreedores. Así
lo afirmó este martes Capitanich, que además añadió que en el litigio existe "una actitud beligerante y de mala fe que no permite resolver el problema".
Tras varias semanas de reuniones con el mediador, no ha habido novedades en el caso. Tanto Argentina como los fondos siguen defendiendo sus posturas. El juez Griesa, por su parte, también sigue a la espera de que ambas partes lleguen a un acuerdo. Sus últimos movimientos radican en la
aprobación excepcional del pago de bonos de deuda reestructurada por parte de Citibank, con el objetivo de no interrumpir el cobro de los bonos emitidos para pagar la expropiación de Repsol.
Tic-Tac. Si ni Kicillof ni la banca privada consigue salvar al país, nadie lo hará.