Grecia ya no figura en las primeras páginas de la escena internacional.
No sale en los medios de comunicación como antes se hacía a diario. Su situación ya no es noticia, no quieren que veamos las consecuencias de haberse rendido ante la Troika.
¿Qué nos quieren ocultar?.
Grecia se muere por culpa de la Troika y sus políticas de genocidios económico neoliberal capitalista contra el pueblo. Grecia apenas ocupa espacio en los medios, sus problemas apenas son un murmullo entre el estruendo, entre los papeles de Bárcenas, el caso de los eres, los problemas de la Infanta Cristina de España con la justicia, etc.
Grecia ya no existe, es un montón de cenizas bajo una gran cortina de humo, es la actual situación del país. No quieren que veamos lo que está sucediendo en Grecia y…¿quién es el enemigo?, pues somos nosotros. Por eso hay un silencio absoluto y lo que no esconde el silencio, que lo esconda los casos de corrupción.
Quizás sea pura prevención, quizás sea por nuestro bien, quizás sea que lo que fue Grecia, se ha transformado en una inmensa bola de cristal. Puede ser que refleje con detalles nuestro próximo porvenir, lo que está por llegar, por eso; ya no se habla de esos millones de griegos quien no hace mucho parecían ser el centro de la economía del mundo, el epicentro de la gran quiebra occidental.
Acuérdense que decían que Grecia tiene que aceptar el rescate de la mafia de la Troika si o si, pues quizás no sea por ninguna de esas razones, sino porque ha comenzado la voladura controlada del mundo que conocimos.
Siento curiosidad por saber, como para llegado el momento volver a conectarnos con aquel pozo de miseria, cuáles serán las palabras que justifiquen tan prolongada desconexión.
Su salida en la portada de los grandes periódicos cómo enlazarán la simple crisis con ese infierno que se ha convertido Grecia, gracias a la Troika.
Nos dirán que todo ocurrió ayer, nos dirán medias verdades, y los embalsamados enviados especiales que, simplemente callarán que es lo que están haciendo ahora, o lo harán.
Saltarán de la nada al holocausto que eso siempre es noticia en los telediarios, luego poco a poco irán administrando las imágenes más duras los testimonios doblados.
Todo ligeramente desenfocados, los rostros difuminados con aspecto de catástrofe, en un país que nos pintaban de muy lejano y muy distinto cuando esto significará que va a ser lo mismo que pasará en España, y otros países.
Lo que ocurre allí en Grecia es muy fácil de entender y eso es que la crisis ya pasó, y han entrado en un indefinible estado de agonía a medio camino entre la guerra civil, y la postguerra.
El documento de la rendición griega se llama “Memorandum de Entendimiento”.
Allá por el mes de febrero del 2012 los parlamentarios griegos expusieron su firma que no es más que una condena a muerte de todo un país. Por eso se llama “Memorandum de Entendimiento” es decir; la entrega sin condiciones de la soberanía de Grecia en manos de bancos y empresas transnacionales.
Páginas y páginas en las que se diseña el paulatino y sistemático desmantelamiento del Estado, la usurpación de sus bienes, de sus recursos naturales, de su industria, es decir; lo más necesario para la supervivencia de su pueblo. La Troika impone normas estrictas para todos, pero siempre para los mismos, es decir; para el pueblo.
Desde la reducción de gastos en medicamentos de vital necesidad, a las limitaciones impuestas a los comercios minoristas en las ventas de productos de categorías restringidas como alimentos para bebés.
En otro apartado exigen recortes de sueldos a los funcionarios y trabajadores del gobierno.
La descapitalización de los fondos de la Seguridad Social, y pensiones, privatización de activos de propiedad pública, y una consecuente reducción del Producto Interno Bruto (PIB).
Algunos de sus párrafos dicen que si el gobierno griego está comprometido a sacar a la venta las participaciones, es que aún mantiene empresas que son propiedad del Estado si es necesario para alcanzar el objetivo de la dilapidación total.
El control público será puramente testimonial y limitado sólo a casos críticos. El gobierno no propondrá, ni implementará medida fija de modo alguno.
Las normas del libre movimiento de capitales, el gobierno debe revocar el derecho a huelgas.
Derogar la legislación sobre el salario mínimo que socava la competitividad de los costes y encima se ha aplicado ya en cuatro veces la Ley Marcial en 2012, 2013, y 2014.
También dice este “Memorandum” que el gobierno establecerá un mecanismo especial para revisar el tratamiento de determinados contenciosos judiciales, o sea; la evasión de capitales. Mecanismo que ha de incluir incluso la posibilidad de eliminar los activos judiciales.
En ciertos casos de ser juzgados en este “Memorandum” como se puede ver se está haciendo que la evasión de capitales sea totalmente legal.
Todo lo que han sufrido los griegos, que están sufriendo ahora con la evasión de capitales, y por esas oligarquías genocidas lo van a ser legal.
Atenas permanece oculta bajo una espesa capa de humo, parte de ese humo provienen de las estufas de quienes ya no pueden pagar la luz, de quienes han arrasado los bosques de la ciudad para conseguir madera y no morir de frío durante el invierno.
Otra parte de ese humo procede de los edificios en llamas, edificios que ya no arden por ser atacados con cocteles molotov, sino con explosivos caseros.
En la Plaza de Charchia en el mismo centro de la capital, ya no existe nada de lo que fue en su día, el pequeño comercio ha desaparecido.
Los traficantes de todo tipo se entremezclan con grupos de jóvenes anciosos por dar con el responsable de su rabia, y de su frustración. La mafia albanesa se ha establecido y campa a sus anchas.
Bandas de chiquillos la emprenden a golpes con todo aquel que tenga aspecto de inmigrante.
No muy lejos de la plaza, cientos de personas con bolsas azules con comida, son repartidos por miembros del partido nazi Amanecer Dorado entre los paseantes previa inscripción voluntaria del partido.
La violencia ya dejó de ser contenida casi al mismo tiempo que la miseria, también hay pintadas desmañadas que cubren cada pared reivindicando ataques a edificios públicos, otros prometen venganza por la muerte del joven miembro del grupo armado Lucha Revolucionaria que falleció en un enfrentamiento con la policía.
También hay muros empapelados con carteles recordando la muerte de un adolescente llamado Alexis Grigorópulos. Todos estos jóvenes muertos a tiros por enfrentamientos con la policía.
Athenas ya no es Athenas, nada es ya como era en Grecia, todo se refleja en un espejo imperfecto que ya nadie llama crisis, todo se ha deformado hasta lo irreconocible.
También existen coches negros con los cristales pintados que llegan de cuando en cuando a las barriadas de inmigrantes para atropellarlos, incluso ante la complaciente mirada de la policía.
Las posibilidades de encontrar trabajo ya no son distintas entre jóvenes y adultos, todo se reduce en empleos por horas, a ganar cinco euros al día por ayudar en un taller, o en una panadería para conseguir algo de pan, o chatarra para vender para así pagar la gasolina del generador eléctrico.
Comprar champú, café y efectos de primera necesidad y por supuesto pilas para la radio para poder escuchar a su Ministro de Economía.
Los griegos se preguntan cuándo comenzó esta guerra que no han visto empezar, esta guerra sin trincheras, sin banderas y sin cartelones llamando a filas. Esta guerra sin bombas, pero con tanta miseria como las demás guerras sin noticias del frente, sin noticias de los medios de comunicación fuera de Grecia.
Amnistía Internacional ha denunciado la Comisión de Derechos Humanos de la Unión Europea el hecho de que, se esté deteniendo a personas sin la asistencia letrada de un abogado, que se les incomunica y se les torture.
Patrullas compuestas por policías y miembros nazis de Amanecer Dorado patrullan las calles, y dan caza a todo aquel con aspecto de inmigrante, y a todo aquel con aspecto de estar en contra de su sistema capitalista y genocida.
Ya son más que habituales los saqueos en los supermercados. La mitad de los griegos viven ya en la pobreza más absoluta. El 9,6% de paro ha pasado al 29,8%.
Sólo uno de cada ocho desempleados percibe algún tipo de subsidios, subsidios que oscilan entre un mínimo de 180 y un máximo de 468 euros por un período de un año.
Los “mas afortunados”, los pensionistas y los que aún conservan su trabajo se han visto obligados a aceptar un recorte del 50% de sus ingresos y a renunciar a sus derechos de estar asegurado.
En Grecia ya no existe ningún tipo de deducción fiscal para familias numerosas, en paro, o con miembros discapacitados. Por el contrario se han creado nuevos impuestos sobre la vivienda y las rentas del trabajo lo que llamamos en España IRPF.
Las deducciones fiscales a las grandes multinacionales han alcanzado en algunos casos el 60%. La carga impositiva sobre pequeñas y medianas empresas se han incrementado en un 422% y con ese dinero se rellena esos agujeros negros llamado recapitalización bancaria, o pago de la deuda estafa.
El consumo de gasóleo para la calefacción ha caído en un 78% y aún así, su precio se ha multiplicado por tres desde 2009 a pesar de que la Corte Suprema Griega ha declarado inconstitucional el corte de luz por impago.
El gobierno por supuesto, ha cedido a las presiones de las grandes compañías energéticas transnacionales, y un tercio de los hogares de Grecia no reciben suministro eléctrico desde hace meses.
El presupuesto sanitario ha quedado reducido a la mitad, el copago de las medicinas se ha duplicado. Una gran mayoría de los griegos no pueden pagar sus medicamentos, los diabéticos no pueden costearse la insulina.
El uso de antidepresivos y otros fármacos para prevenir los suicidios están fuera del menú.
Las tasas de tuberculosis y el VIH son altísimas. Esto es un genocidio controlado por las mafia de la Troika.
El Centro de Control y Enfermedades de la Unión Europea, ha emitido un informe que avisa contra el más que probable rebrote de todo tipo de infecciones y enfermedades contagiosas.
La Asociación de Médicos advierte del espectacular incremento de casos de pacientes con problemas estomacales, por los que muchos no pueden pagar los adecuados tratamientos.
A los hospitales llegan muchos desesperados, enfermos corroídos por la sarna. Una mujer con tumor en el pecho del tamaño de una naranja. Médicos que salen de los dispensarios en los hospitales, para que los pacientes no les vean llorar.
Grecia tiene y debe de salir rápidamente del euro, y aún a riesgo de la definitiva destrucción de su economía. Su moneda ha de ser devaluada entre un 20 y un 30%.
La situación actual ha llegado a un punto tal de degradación que se podría ser considerada como tragedia humanitaria, por tanto deberíamos empezar a barajar la hipótesis de pedir la intervención de la ONU.
Estas son las recomendaciones de un reciente informe con urgencia ante el Consejo de Europa, y la Oficina de Presupuesto y Hacienda de la Unión Europea. Está firmado por los más influyentes economistas de Alemania, entre ellos; Hans Berner, asesor personal de la hija de Ángela Merkel.
Probablemente seguiremos escuchando palabras como rescate, ayudas, o recuperación durante mucho tiempo. Pero las palabras como genocidio, catástrofe humanitaria, o crímenes contra la humanidad todavía tardaran en llegar…si es que llega.
Alguna razón habrá para que ya nadie hable de Grecia. ¿Será por ocultarnos ese futuro que nos viene?. ¿Será por no alterar esa falsas esperanzas de que todo este infierno será para bien?.
O tal vez sencillamente ha sido porque Grecia no ha soportando tanta estafa, porque Grecia ha muerto aplastada por el rescate,
quizás porque bajo el silencio, y tras la gran cortina de humo, Grecia ya no existe y comienzan a surgir otras nuevas Grecias.
Pensar que esta situación que se está viviendo en Grecia está muy lejos de nosotros, es no mirar a la realidad, pensar que hoy día estas situaciones exactamente las mismas son las que nos están imponiendo la mafia de la Troika.
Tenemos que pensar un poco, pararnos a pensar y decir ¡NO A LA TROIKA! ¡NO AL NUEVO ORDEN MUNDIAL!.
Está en juego nuestro futuro y el de nuestros hijos
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