La antigua necrópolis de Otuzco es una muestra palpable del esplendoroso pasado de la gente de la provincia peruana de Cajamarca.
Poco se sabe sobre esta curiosa maravilla arqueológica o sobre sus constructores, e incluso hoy en día no se le presta la atención que merece…
Pero eso podría cambiar pronto. De acuerdo a un reporte de Peru This Week, se ha llegado a un acuerdo entre el sector público y privado de esta nación, para hacer el sitio más accesible a cualquiera que quiera apreciarlo.
El proyecto involucra a la Cámara de Comercio local, al Departamento Cultural Descentralizado del Ministerio de Cultura, y a la Asociación Los Andes de Cajamarca (ALAC). La necrópolis, conocida popularmente como las Ventanillas de Otuzco, está situada en el distrito de Baños del Inca a 8 km al noroeste de la ciudad de Cajamarca y a unos 2,515 msnm.
La fecha de su construcción es incierta, pero algunas piezas de cerámica halladas en los alrededores han sido datadas del 1400 a.C., indicando que el ancestral lugar antedata a la cultura Caxamarca (500-1450 d.C.), una pequeña urbe en las tierras altas peruanas que sería conquistada y anexada al imperio Inca por Pachacútec. Hay un total de 337 nichos en Otuzco, la mayoría de ellos cuadrados o rectangulares de 50 a 60 cm de altura. Tallados en las paredes del cerro, se asemejan a ventanas y pueden alcanzar hasta 8 y 10 metros de profundidad.
Algunos de estos orificios conducen a un corredor a través del cual se llega al corazón del macizo rocoso donde se hallan más nichos, en su mayoría simples, aunque también hay nichos múltiples que constituyen pasadizos con nichos laterales. Cuenta la tradición, que los incas vaciaron el interior de la roca y dieron a los nichos un uso diferente, los convirtieron en depósito de granos para lo cual reorientaron las entradas contra el viento para mantenerlos frescos. También se dice que a través de algunas ventanillas se puede ingresar a galerías oscuras y misteriosas, cuyo final inalcanzable inspiró la imaginación del hombre en la creación de pasadizos secretos que unirían a Cajamarca con el departamento del Cuzco.
La vasta necrópolis esculpida con tremenda precisión en los promontorios rocosos, era un punto importante donde honrar a los muertos. Los difuntos eran primero enterrados hasta que el cadáver se descomponía lo suficiente. Pasado ese tiempo, los huesos eran extraídos del sepulcro y llevados a los nichos. Debido a que en esta cultura creían que la muerte era una continuación de la vida, utensilios, comida y demás ofrendas eran colocadas en los nichos funerarios.
Bajo el nuevo proyecto para proporcionar una mayor difusión del sitio arqueológico, se instalarán baños públicos, desagües, accesos, y demás comodidades modernas para que los visitantes de las Ventanillas de Otuzco se sientan cómodos y bienvenidos. Desde luego, esto además contribuirá a darle un empuje al turismo y la economía de esta región peruana.
Artículo publicado en http://www.mysteryplanet.com.ar/site/?p=8713
No hay comentarios:
Publicar un comentario