Elecciones generales 2019
Imagen de la Plaza del Museo Reina Sofía nada más subir Iglesias al escenario este sábado. (Foto: Segundo Sanz)
23/03/201918:19
Podemos esperaba la presencia de 8.000 asistentes en la plaza Juan Goytisolo aneja al Museo Reina Sofía, que es precisamente el aforo de la misma. Sin embargo, las lagunas eran visibles sobre todo en los laterales de la plaza. Y ello pese a que el partido había puesto autobuses gratis desde toda España para sus afiliados.
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha regresado este sábado a la primera línea de la política nacional tras su permiso de paternidad y lo hecho con pinchazo en un mitin donde su formación esperaba la presencia de 8.000 asistentes en la plaza Juan Goytisolo aneja al Museo Reina Sofía, que es precisamente el aforo de la misma.
Sin embargo, en el enclave donde el partido morado recibió los resultados electorales de 2015 y 2016 las lagunas eran más que visibles, sobre todo en los laterales de la plaza. Y ello pese a que Podemos había puesto autobuses gratis desde toda España para sus afiliados.
Sin embargo, en el enclave donde el partido morado recibió los resultados electorales de 2015 y 2016 las lagunas eran más que visibles, sobre todo en los laterales de la plaza. Y ello pese a que Podemos había puesto autobuses gratis desde toda España para sus afiliados.
La dirección de Pablo Iglesias había tratado de que este acto político fuera multitudinario, intentando movilizar a sus bases y poniendo autobuses gratis para traer gente de las agrupaciones territoriales de otras comunidades.
La desmotivación de quienes le votaron en citas anteriores es una de las principales preocupaciones de la cúpula morada, sobre todo tras lo ocurrido en Andalucía, donde el desencanto de los suyos fue evidente perdiendo cinco puntos con respecto a las comicios de 2015. Aquella noche del 2-D, Iglesias decretó la “alerta antifascista” contra la suma del centro-derecha en esta región.
La desmotivación de quienes le votaron en citas anteriores es una de las principales preocupaciones de la cúpula morada, sobre todo tras lo ocurrido en Andalucía, donde el desencanto de los suyos fue evidente perdiendo cinco puntos con respecto a las comicios de 2015. Aquella noche del 2-D, Iglesias decretó la “alerta antifascista” contra la suma del centro-derecha en esta región.
A todo esto se une, el enfrentamiento con la candidatura de Más Madrid, que lideran Íñigo Errejón y Manuela Carmena; los problemas con las confluencias, que en varias comunidades irán en solitario; la crisis en Cataluña, donde el senador Óscar Guardingo ha abandonado la candidatura por la irrupción de Jaume Asens, muy próximo al separatismo; o la renuncia del errejonista Pablo Bustinduy a encabezar la lista de Podemos a las elecciones europeas del 26 de mayo, pese a haber sido ya elegido por la militancia.
Iglesias se despidió el pasado 21 de diciembre en un duplex televisivo con la frase: “Nos vemos en abril”. Sin embargo, a raíz del adelanto electoral y teniendo en cuenta la tendencia a baja de su partido en las encuestas, ha precipitado su regreso de la baja por paternidad.
Un ‘permiso’ repartido teóricamente al 50% con su pareja, la portavoz parlamentaria de Podemos, Irene Montero, que no es tal, ya que los diputados no están sujetos al régimen general de la Seguridad Social. Además de estos tres meses, Iglesias ya disfrutó de su permiso de paternidad el pasado mes de julio.
Un ‘permiso’ repartido teóricamente al 50% con su pareja, la portavoz parlamentaria de Podemos, Irene Montero, que no es tal, ya que los diputados no están sujetos al régimen general de la Seguridad Social. Además de estos tres meses, Iglesias ya disfrutó de su permiso de paternidad el pasado mes de julio.
De no haber habido un anticipo de las generales al 28 de abril, Iglesias no habría regresado hoy a la primera línea y habría alargado más tiempo su ‘baja’, puesto que, tal y como publicó OKDIARIO, llegó a pedir al Congreso el voto telemático desde casa hasta todo el mes de abril incluido.
En estos tres meses, Iglesias no ha concedido entrevistas ni ha participado en actos públicos, pero sí interrupción su baja por paternidad para intervenir, a través de la difusión de una carta, en la grave crisis que estalló en Podemos el 17 de enero tras la decisión de su exnúmero dos, Íñigo Errejón, de marcharse a la plataforma Más Madrid, y abandonar su candidatura a la Comunidad de Madrid por Unidos Podemos.
Sin Presupuestos
Así mismo, el líder morado también participó por video llamada en la reunión del Consejo Ciudadano Estatal –el máximo órgano de dirección de Podemos– que se celebró el 30 de enero para abordar la mencionada crisis.
Y además, se reunió el miércoles 6 de febrero con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en La Moncloa, con el objetivo de desbloquear las negociaciones para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que terminaron fracasando una semana después, y llevando al Ejecutivo a anunciar el adelanto electoral.
Y además, se reunió el miércoles 6 de febrero con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en La Moncloa, con el objetivo de desbloquear las negociaciones para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que terminaron fracasando una semana después, y llevando al Ejecutivo a anunciar el adelanto electoral.
En respuesta a OKDIARIO sobre el hecho de que no fuera Irene Montero quien acudiera a entrevistarse con Sánchez, la propia portavoz justificó así que Iglesias interrumpiera su baja por paternidad: “A uno no se le traga la tierra”.
El cartel que finalmente anunciaba en los últimos este acto contrasta con el póster inicial que Podemos publicó a principios de marzo —tuvo que ser retirado tras admitir Iglesias el “error”— en el que usó el lema ‘Vuelve’, con la sílaba ‘El’ destacada y enfatizando el carácter personalista de este partido que encarna la figura de Iglesias.
Justo antes Montero había afirmado que más pronto que tarde será una mujer quien esté al frente de la organización.
Justo antes Montero había afirmado que más pronto que tarde será una mujer quien esté al frente de la organización.
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