miércoles, 31 de julio de 2019

Enorme asteroide pasó a pocos kilómetros de la Tierra y los científicos no lo advirtieron a tiempo

 La roca espacial del tamaño de un rascacielos pasó tan cerca que hasta podría haber sido avistada con binoculares desde la Tierra. 

Los científicos se percataron cuando ya no había tiempo de hacer nada al respecto. Por suerte, no impactó con nuestro planeta. 

Se trata del asteroide llamado 2019 OK. Con un tamaño de 57 por 130 metros, y pasó a solo 73.000 kilómetros de nuestro planeta. Eso es cinco veces más cerca que la distancia entre la Tierra y la Luna.

 «De haber hecho impacto, el daño hubiera sido devastador a nivel local, con la fuerza suficiente para destruir una ciudad entera», dijo el astrónomo Michael Brown en declaraciones a The Conversation. 

El asteroide fue descubierto desde observatorios en Brasil y en EE.UU., tan solo un par de días antes de su visita sorpresa el pasado 25 de julio. 

Y aunque ya no supone una amenaza para la Tierra, otros asteroides cercanos pueden serlo. Es por eso que algunos de los terrícolas se preguntan cómo el asteroide pudo haberse acercado tanto sin ser notado. 

«Cuando 2019 OK se acercó a nuestro planeta, cualquiera podría haberlo visto con unos binoculares como una mota de luz cruzando lentamente el cielo. 





Pero un par de días antes era 1.000 veces más tenue y por ende más difícil de detectar. 

Es más, viajaba muy rápido en una órbita anormalmente elíptica que lo llevó desde más allá de Marte —cerca del cinturón de asteroides— hasta la órbita de Venus, creando una situación donde permaneció poco tiempo cerca de la Tierra», explicó Brown. 

El astrónomo reconoce que el tiempo de advertencia en esta ocasión fue insuficiente, algo que pudo haber tenido graves consecuencias si el asteroide se desviaba levemente hacia la órbita de nuestro frágil planeta.

 «Si el tiempo es mayor tenemos opciones de cómo actuar ante la trayectoria de impacto», señaló.

 «En lugar de destruir el asteroide, lo que generaría que se rompa en múltiples cuerpos que conservarían cierto poder destructivo, la solución radicaría en empujarlo gentilmente para que siga su camino sin tocarnos». 

Este hecho sucede poco después que tres asteroides pasaran también cerca de nuestro planeta, y casi un mes después que otro impactara contra la atmósfera al sur de Puerto Rico sin ser detectado hasta solo horas antes.


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