El organismo tributario del país dio la luz verde de manera exprés para que un programa del Templo Satánico que realiza actividades en escuelas se beneficiara de exenciones fiscales.
© After School Satan
La agencia tributaria estadounidense ha autorizado la exención de impuestos para un programa extraescolar de la organización Templo Satánico, según documentos publicados por la organización investigadora Judicial Watch.
La agencia tributaria estadounidense ha autorizado la exención de impuestos para un programa extraescolar de la organización Templo Satánico, según documentos publicados por la organización investigadora Judicial Watch.
La decisión de otorgar estos beneficios fiscales al club After School Satan en Tacoma, el estado de Washington, fue tomada en tan solo diez días en 2014, mientras que cuando los grupos cristianos y conservadores realizan un trámite semejante, la resolución suele durar años, denuncia Judicial Watch.
Esta organización satanista empezó a organizar actividades extraescolares precisamente para contrarrestar los programas que adoctrinan a los niños en los principios del evangelismo en las escuelas estadounidenses.
After School Satan vs. Good News
Todo comenzó como una respuesta al dictamen de 2001 del Tribunal Supremo que permitió a Good News Club, un club cristiano extraescolar, continuar operando en las escuelas públicas de EE.UU. La decisión fue tomada por los sectores progresistas de la sociedad estadounidense como una violación de la separación entre Iglesia y Estado.
La decisión de eximir de impuestos al club After School Satan en Tacoma fue tomada en tan solo diez díasEl Templo Satánico, que es una organización registrada, se acogió a esta sentencia para reclamar que tiene los mismos derechos de acceso a las escuelas que las organizaciones cristianas.
Los 'clubes satánicos' se centran en "el racionalismo, la investigación libre y la diversión", reza el video promocional de la organización. Las habilidades sociales y la ciencia son los puntos clave en los contenidos de su programa, que sostiene que busca garantizar que la pluralidad y la verdadera libertad religiosa sean respetadas.
El Templo Satánico saltó a las portadas en 2014 tras la celebración de una misa negra en la Universidad de Harvard y anunciar su plan de instalar una estatua de Bafomet (un ídolo pagano que identifican con Satán) frente al Capitolio de Oklahoma y que fue erigida finalmente en Detroit (Michigan).
© After School Satan
Crítica que ha ido demasiado lejos
El periodista y consultor del Templo Satánico, Shane Bugbee, escribió para Vice que la organización nació con fines satíricos y que sus acciones tenían como objetivo parodiar las relaciones existentes entre la sociedad estadounidense y sus autoridades con las múltiples organizaciones religiosas que existen en el país.
Sin embargo, con el paso del tiempo, su líder, Lucien Greeves, cuyo verdadero nombre es Doug Mesner, empezó a tomarse más y más en serio a la organización, centrándose cada vez más en la obtención de beneficios.
La exención de impuestos solicitada ahora se encuadra dentro de ese objetivo. A su vez, la página web de la organización aloja una tienda electrónica que ofrece toda clase productos adornados con pentagramas o efigies de Bafomet. La organización también reporta regularmente la entrada de enormes donaciones en sus arcas.
Sin embargo, los líderes de las filiales de la organización rechazan cualquier naturaleza comercial o satírica de su actividad.
"Creo que mucha gente nos considera equivocadamente como un grupo de 'troleo'. De hecho, somos una religión seria con nuestra propia narrativa, cultura, símbolos y códigos éticos: los Siete Cánones", afirmó a 'Los Ángeles Times' la lider de la filial de Seattle, Lilith Starr.
El ejemplo de Tacoma ha cundido ejemplo y ahora las filiales de la organización en Atlanta, Detroit, Washington, Portland, Sal Lake City, Los Ángeles y otras ciudades han solicitado permisos para sus abrir propios clubes extraescolares en los colegios.
Comentario: Es cierto que es necesario hacer críticas a la adoctrinación de diferentes religiones e ideologías. Sin embargo, quizás van demasiado lejos al pretender que enseñar a los niños a adorar la imagen popular de Satan, un demonio que básicamente busca la destrucción, sea algo positivo. Una cosa es cuestionar ciertas doctrinas de manera crítica y enseñar a los niños a pensar por sí mismos para que puedan plantearse preguntas importantes acerca de la vida, los valores y la existencia, sin las limitaciones que pueden imponer los diferentes sistemas de creencias; muy diferente es ofrecer otro "modelo a seguir" que enaltece lo vil y lo aberrante.
RT
lun, 27 mar 2017 15:10 UTC