China Prepara 500,000 fuerza de invasión estadounidense fuerte en preparación para la victoria electoral de Biden
25 de julio de 2020
Por: Sorcha Faal, y según lo informado a sus suscriptores occidentales
Un nuevo informe alucinante del Consejo de Seguridad ( SC ) que circula hoy en el Kremlin en el que se discute una advertencia de guerra del Ministerio de Defensa ( MoD ) basada en el Boletín de los Científicos Atómicos que recientemente evaluó que la India podría haber colocado a la capital china comunista de Beijing. el alcance de sus armas nucleares , dice igualmente preocupante a destacar es el de Estados Unidos de haber acaba de hacer la semana pasada un cambio estratégico en la región crítica del Océano Pacífico mediante el despliegue de sus aviones de combate arma nuclear capaz F-35 a una nueva instalación base aérea oculto en el interior de Alaska, un movimiento de guerra notable porqueSe teme que el F-35 sea el sistema de recolección electrónica más grande jamás diseñado, y sonlosaviones de vigilancia de combateF-35ahora posicionados para defender el enorme Ejercicio del Pacífico centrado en Guam que está siendo conducido por las fuerzas navales de los Estados Unidos, Japón y Australia . una fuerza naval masiva se reunió rápidamente a las pocas horas de que Australia se uniera a los Estados Unidos para declarar que el reclamo de la China comunista sobre el Mar del Sur de China no cumple con el derecho internacional , a lo que siguió inmediatamente Indonesia con 24 de sus buques de guerra para luchar contra los reclamos de la China comunista. en el mar del sur de China, también .
Los movimientos apresurados hacia la guerra contra la China comunista liderados por los Estados Unidos , una de cuyas razones se describe de manera inquietante en un documento del Servicio de Inteligencia Extranjera ( SVR ) que también se discute en este informe, un documento que comienza señalando que la China comunista tiene 2,000,000 Los oficiales de policía, a diferencia de los Estados Unidos que tienen poco menos de 690,000 , que se incrementan por las aproximadamente 1.5 millones de fuerzas que pertenecen a la Policía Armada Popular ( PAP ), las fuerzas de las políticas políticas del Partido Comunista Chino queRVS analistas de inteligencia afirman están preparando para enviar 500.000 de ellos en el Estados Unidos al socialista Partido Demócrata candidato , Joe Biden, declarando que ha ganado el 3 de noviembre de elección presidencial.
Una afirmación hecha por el SVR después de las fuerzas policiales estadounidenses capturaron vehículo de la Policía Armada del Pueblo y su conductor el pasado 10 de septiembre en California -con vehículos armados de la policía, incluso más de la gente que se informa en otra región de la costa oeste de los Estados Americanos bajo el gobierno demócrata Partido socialista -y aunque EE.UU. las fuerzas policiales desaparecieron rápidamente al conductor del vehículo marcada Policía Armada Popular, el FBI emitió una advertencia tumba inmediata diciendo que ellos creen que puede haber más de un intento criminal detrás de las actividades de la policía china inusuales en América -un FBI alerta siguió el 17 de septiembre cuando un grupo misterioso que se hace llamar ” Guerra contra el miedo”“Registró una cuenta y publicó un video en YouTube que mostraba a las fuerzas de la policía armada popular obligando a los prisioneros a subir a los vagones del tren, un video que solo pudo haber sido obtenido por un servicio de inteligencia estatal ( como la SVR, la CIA o la NSA ), ya que fue pirateado video de un avión no tripulado de la policía armada popular .
Y cuando lo confrontaron en la televisión británica en vivo la semana pasada, vieron al embajador chino comunista Liu Xiaoping diciendo que solo mostraba ” una transferencia normal de prisioneros “, un reclamo respaldado por fuentes oficiales de noticias comunistas chinas que dicen que ” los medios occidentales están siendo maliciosos “. -ni de los cuales, sin embargo, explica por qué muchos de estos Policía Armada Popular llevaban inglés de lenguaje “ SWAT marcas” en sus uniformes, o por qué fueron incluso dar órdenes en Inglés . [Nota: Algunas palabras y / o frases que aparecen entre comillas en este informe son aproximaciones en inglés de palabras / frases rusas que no tienen una contraparte exacta.]
Los vehículos de la policía armada popular han comenzado a vagar por los estados socialistas controlados por el Partido Demócrata en la costa oeste de Estados Unidos (la foto superior es la capturada en California ) mientras que la China comunista defiende ( gráfico inferior ) las ” transferencias normales de prisioneros ” que se planean para los ciudadanos disidentes de los Estados Unidos .
Según este informe, en el artículo estadounidense publicado esta semana titulado ” Por qué esta elección podría ser la más importante desde la Guerra Civil de los Estados Unidos “, aparte de afirmar que ” esta elección es sin duda la más importante desde 1860 … el resultado de esa fue la Guerra entre los Estados “, advirtió sombríamente que” las elecciones se disputarán sin importar qué lado gane porque el país se ha polarizado totalmente … no importa quién gane, el otro lado estará terminalmente descontento con el resultado ” -a advertencia siendo apoyado por los gustos del socialista Partido demócrata líder congresista estadounidense Maxine Waters , que locamente esta semana dijo a sus seguidores radicales que El envío del presidente Trump de las fuerzas de la policía federal para proteger vidas y propiedades de la violencia de la mafia fue todo un complot, un ” complot ” que ella expuso al decir: ” Esto es lo que ves en países donde tienes dictadores … En países del tercer mundo con dictadores que tienen paramilitares que pueden llamar en cualquier momento que quieran … De hecho, se ha sugerido que esta es una prueba del presidente de los Estados Unidos, que puede estar organizando para no aceptar lo que sucede cuando tenemos las elecciones si él no es elegido … ¿Va a sacar a sus militares? … ¿Nos va a involucrar? … Ya ha aludido a que puede haber una guerra civil si no es reelegido “.
Ahora, saltando a este cataclismo inminente llamado elecciones presidenciales del 3 de noviembre para hacerlo aún más absurdo, señala este informe, está la Oficina del Director de Inteligencia Nacional ( ODNI ), que la semana pasada emitió una advertencia cómica sobre la interferencia extranjera en estas elecciones. —Una advertencia, sin embargo, que no explica cómo una nación extranjera podría dañar un proceso electoral más de lo que los estadounidenses se hacen a sí mismos — mejor ejemplificado en las elecciones presidenciales de 2016 que vieron el régimen Obama-Clinton y sus agencias de inteligencia interfiriendo ilegalmente en él tanto, Fiscal General de los Estados Unidos William Barrse vio obligado a llamar a lo que estaban haciendo ” un intento de golpe “.
Lo más extraño de esta elección presidencial estadounidense , detalla este informe, es que su principal candidato socialista demócrata , Joe Biden, ha ideado una estrategia de campaña que se ha centrado cada vez más en culpar a Trump de enfermedades, depresión y disturbios raciales , ninguno de los cuales Trump es responsable de —Y hoy considera que esta estrategia de campaña de Biden ha convertido a todo el partido socialdemócrata en el partido de la enfermedad, la depresión y la violencia racial para agravar las tres crisis —con que se observa que el peligro real para estos socialdemócratas es que esto podría ser contraproducente—Y ciertamente fracasó la semana pasada con la muy popular personalidad de la radio negra estadounidense Charlamagne Tha God , quien después de escuchar a Biden llamar a Trump ” el primer presidente racista “, le recordó a Biden que Estados Unidos ha tenido presidentes esclavistas reales, lo que le valió a Biden el dudoso ” Donkey of the Day “de Charlamagne , quien además le dijo a Biden que” Cerrara el Eff Up Forever “.
Al observar cómo este lento choque de trenes de una elección se acerca cada vez más, este informe continúa, se nota el cineasta izquierdista de Hollywood Michael Moore, que en 2016 advirtió a sus compañeros camaradas socialistas del Partido Demócrata que Trump iba a ganar si no lo fueran cuidado, y que ahora está advirtiendo ”
Quiero advertir a todos, no subestimes el genio malvado que es Donald J. Trump “, una advertencia unida por Moore que indica los hechos que: “Trump no ha perdido nada de su base y están más rabiosos que nunca … ¿Durmiendo en la acera durante cinco noches solo para ver a Trump? … ESO es un compromiso … No des por sentado a Trump … No creas que puede no gane … No se ponga arrogante diciéndole a todos que no hay forma de que gane la Casa Blanca porque, francamente, parece que se parece mucho a usted hace cuatro años cuando le dijo a todos que no hay manera de que este país ponga a un payaso en el Oficina Oval “: hechos verdaderos declarados porMooreque siguió diciendo:”Si una vez más no toma mis advertencias en serio, entonces tengo una pregunta que quiero que responda, y le pido que me responda honestamente … ¿Cuántas personas se alinearían durante cinco días solo para escuchar hablar a Joe Biden? … 12? … 5? … ¿Ninguno? … El candidato que inspira a la mayoría de las personas en los estados de swing para llegar con entusiasmo a las urnas y asegurarse de que cada uno de ellos traiga de 10 a 20 amigos y familiares con ellos. el día de las elecciones, todos ellos altamente motivados, entusiasmados y en una misión de Dios: ESO es quien gana la Casa Blanca “.
Quiero advertir a todos, no subestimes el genio malvado que es Donald J. Trump “, una advertencia unida por Moore que indica los hechos que: “Trump no ha perdido nada de su base y están más rabiosos que nunca … ¿Durmiendo en la acera durante cinco noches solo para ver a Trump? … ESO es un compromiso … No des por sentado a Trump … No creas que puede no gane … No se ponga arrogante diciéndole a todos que no hay forma de que gane la Casa Blanca porque, francamente, parece que se parece mucho a usted hace cuatro años cuando le dijo a todos que no hay manera de que este país ponga a un payaso en el Oficina Oval “: hechos verdaderos declarados porMooreque siguió diciendo:”Si una vez más no toma mis advertencias en serio, entonces tengo una pregunta que quiero que responda, y le pido que me responda honestamente … ¿Cuántas personas se alinearían durante cinco días solo para escuchar hablar a Joe Biden? … 12? … 5? … ¿Ninguno? … El candidato que inspira a la mayoría de las personas en los estados de swing para llegar con entusiasmo a las urnas y asegurarse de que cada uno de ellos traiga de 10 a 20 amigos y familiares con ellos. el día de las elecciones, todos ellos altamente motivados, entusiasmados y en una misión de Dios: ESO es quien gana la Casa Blanca “.
Pronto para confrontar a estos ciudadanos estadounidenses ” enardecidos ” ” en una misión de Dios ” mientras se preparan para votar en lo que se llama la elección presidencial más importante de su vida, sin embargo, señala este informe, es la advertencia grave que acaba de emitirse en el artículo ” 8 razones por las cuales el día de elecciones 2020 podría ser un desastre ” que dice: ” Puede pensar que sabe lo malo que será el 3 de noviembre … Pero todos los signos apuntan a algo mucho, mucho peor “, y en el que enumera metódicamente Los desastres para esta elección están esperando a que suceda, nadie realmente se ha preparado , e incluso podría terminar con Trump y Biden declarando que han ganado.
La evaluación estratégica actual realizada por los analistas militares y de inteligencia de la Federación de Rusia de lo que está haciendo el Partido Socialista Demócrata , concluye este informe, es que no importa si el presidente Trump gana las elecciones del 3 de noviembre en forma aplastante, Joe Biden será declarado ganador por los socialistas. fuerzas globalizadoras de todo el mundo, un escenario que verá Biden y sus fuerzas socialistas que huyen de la mano de hierro socialista controlados demócrata Partido regiones de la América de la costa oeste, que Biden declarará es la nueva sede temporal del estadounidense gobierno luego de que éste “El nuevo gobierno apelará al reconocimiento internacional como el gobierno legítimo de los Estados Unidos , ya que afirman que el presidente Trump solo pudo ganar haciendo trampa, que la China comunista reconocerá inmediatamente y ofrecerá apoyo con susfuerzas de la Policía Popular Armada , miles de los cuales ya estarán posicionados previamente en América del Norte, un escenario que nadie sabe a qué lado apoyarán las fuerzas armadas estadounidenses , pero cuyo “ comodín ” en este juego de póker geopolítico para el control de Estados Unidos es el mayor ejército permanente del mundo ha visto alguna vez, y son los más de 100 millonesLos propietarios de armas en Estados Unidos respaldan firmemente al presidente Trump , todos los cuales siguen comprando en números históricos aún más armas .
25 de julio de 2020 © UE y EE . UU.
Todos los derechos reservados.
El permiso para usar este informe en su totalidad se otorga bajo la condición de que esté vinculado a su fuente original en WhatDoesItMean.Com. Contenido de Freebase con licencia bajo CC-BY y GFDL .
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EN 25 JULIO, 2020 POR MUELASGAITAN
https://muelasgaitan.wordpress.com/2020/07/25/china-se-prepara-para-enviar-500-000-soldados-para-iniciar-la-revolucion-comunista-en-los-estados-unidosantes-de-las-elecciones-de-noviembre/
Por: Sergio Rodríguez Gelfenstein
Globalizacion, 23 de julio 2020
alainet.org
Durante las últimas semanas se ha ido sembrando la idea de que el mundo avanza inexorablemente a una nueva guerra fría, esta vez entre Estados Unidos y China. La idea debería ser causa de investigación y estudio, dadas las implicaciones que ello tendría para el sistema internacional. En mi caso será motivo de un próximo artículo en días venideros.
Ahora, quería hacer notar los niveles de paroxismo que permean al gobierno estadounidense en su afán de confrontar a China. Así, el secretario de Estado Mike Pompeo instó a las naciones de todo el mundo a rechazar al Partido Comunista de China y crear una coalición para que asuma tal responsabilidad. Llama la atención que la mayor potencia mundial esté pidiendo ayuda para hacer frente a lo que considera su principal amenaza en el plano estratégico. Lejos de ser expresión de fuerza, las declaraciones de Pompeo reflejan debilidad.
A pesar de que Estados Unidos ha tenido un sostenido crecimiento de su gasto militar desde finales del siglo pasado -con un breve intento de disminución durante el gobierno de Obama- la situación de sus fuerzas armadas parecen no estar en un buen momento para confrontar a China, mucho menos si ésta constituye una alianza con Rusia cuyo poder militar supera a Estados Unidos en varias áreas.
Desde septiembre del año pasado se ha estado filtrando información que da cuenta de un deplorable estado de los componentes de las fuerzas armadas estadounidenses además de un acentuado deterioro moral de sus soldados.
Una primera alerta en la flota de portaviones de Estados Unidos fue dada por el Harry S. Truman, que no pudo navegar debido a un fallo en su sistema de distribución eléctrica, que lo obligó a permanecer en puerto. Otro desastre ocurrió en el Gerald R. Ford, del cual se dice que es el más avanzado y costoso de la Marina de Estados Unidos. Este navío que fue construido a un costo de 13 mil millones de dólares, fue botado el 9 de noviembre de 2013, teniendo prevista su incorporación formal a la Amada para ese año, pero no fue hasta 2017 que pudo concretarse su disponibilidad operativa. Una de sus características más importante que lo hace diferente a sus pares son los elevadores electromagnéticos de armas avanzadas (AWE), que sirven para subir las bombas, misiles y otras municiones hasta los hangares donde están las aeronaves. Pero a mediados del año pasado en el Gerald R. Ford solo funcionaban 2 de sus 11 elevadores de armas, según informó los primeros días de octubre el Instituto Naval de Estados Unidos. Ahora, se supone, que el barco estará en pleno funcionamiento en 2024 cuando el fabricante se comprometió a que los ascensores estarías totalmente operativos para 2018.
En ese mismo mes de septiembre se produjo el colosal fallo de los sistemas de defensa antiaérea Patriot y Aegis de fabricación estadounidense que no pudieron repeler los ataques lanzados el 14 de septiembre del año pasado contra dos refinerías de Arabia Saudí, porque no cumplen con las características declaradas que dicen tener según fuentes militares de Rusia e Israel. Por su parte, el general Joseph Dunford, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos insultando los conocimientos mínimos en materia militar que puede tener cualquier especialista afirmó que “Ningún sistema [de defensa antiaérea] es capaz de defenderse de una amenaza como esa”. Cabe destacar que el bombardeo fue realizado por fuerzas militares irregulares yemeníes que distan mucho de ser el aparato de guerra regular de cualquier potencia.
A mediados de ese mes, el mismo general Dunford reconoció tras la reunión del Comité Militar de la OTAN en Eslovenia que en los últimos años esa alianza ha venido perdiendo superioridad militar sobre Rusia agregando que la ventaja de ese bloque militar sobre el país euroasiático “se ha erosionado”. Según Dunford, el reconocimiento de tal situación obligó a que el alto mando militar de Estados Unidos se haya propuesto desarrollar una nueva estrategia para la alianza militar que dirige Estados Unidos.
En el plano moral, la situación no es mejor. Prueba de ello es el suicidio de tres miembros de la tripulación del portaviones George H.W. Bush ocurridos durante una semana en “incidentes separados y no relacionados”, según anuncio del alto mando naval el 25 de septiembre. Los tres suicidios se suman a los dos que ya habían ocurrido en el mismo portaviones en los últimos dos años, dando cuenta de una práctica habitual entre los atribulados soldados que no entienden el supuesto rol que juegan en defensa de su país y que deben recurrir a la coacción y las drogas para sostenerse en el cumplimiento de sus misiones.
A esto se suma que muchos navíos de la flota estadounidense fueron diezmados por la epidemia de COVID 19 a partir de abril de este año sin que los servicios médicos militares hayan podido dar una respuesta efectiva a tal contingencia. Ello derivó en la cuasi rebelión que se produjo en el portaviones Teodoro Roosevelt, en el que hubo 430 infectados entre los 2.000 marinos que conforman su tripulación. El informe de tal realidad por parte del capitán Brett Crozier, comandante del navío, se filtró a la prensa produciendo la baja deshonrosa del oficial que no hizo más que decir la verdad de lo que ocurría y que se retiró del barco bajo aclamación de sus subordinados.
Como señaló en su momento el portal venezolano “Misión Verdad”, simultáneamente a este hecho también dieron positivo por coronavirus dos marineros a bordo del portaaviones Ronald Reagan, existiendo dudas de si otro portaviones, el Nimitz estuvo en la misma situación antes de desplegarse en el Pacífico, mientras que el Carl Vinson, que está en mantenimiento en una base del Pacífico de Estados Unidos, también reportó algunos casos.
Así, en algún momento de este año 4 de los 11 portaaviones nucleares de Estados Unidos estuvieron con limitada disposición combativa por la incapacidad de controlar la epidemia, situación inédita en una institución militar que se maneja bajo rígidas medidas de control y una gran disciplina.
Citando al general John Hyten, vicepresidente del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, “Misión Verdad” señala que éste, afirmó que lo ocurrido en el portaviones Roosevelt no es único. Lo intenta explicar al decir que “Tenemos demasiados barcos en el mar. Tenemos demasiadas capacidades desplegadas. Hay 5.000 marineros en un portaaviones de propulsión nuclear” y advierte “Pensar que nunca volverá a suceder no es una buena forma de planificar”.
Esta incapacidad en el manejo de la epidemia configura una crisis mucho más profunda que abarca bases militares que están comprometidas con los planes estratégicos de confrontación con China y Rusia, afectando también a la industria militar estadounidense.
Según documentos obtenidos por la revista especializada Defense News, tal situación ha llevado a que el alto mando de las fuerzas armadas de Estados Unidos se propusiera reevaluar sus capacidades en la perspectiva de una confrontación militar con China. Así, la secretaría de defensa habría estado evaluando la reducción de 2 portaviones de su flotilla, la paralización de la cantidad de destructores y cruceros a cambio de agregar barcos no tripulados o con poca tripulación.
De esta manera, se estarían aceptando los planes del actual secretario de Defensa Mark Esper quien ha formulado la idea de desestimar el rol de los portaviones como elemento central de la fuerza de agresión de Estados Unidos para irlos sustituyendo por naves aéreas y marítimas no tripuladas “que pueden sacrificarse más fácilmente en un conflicto”. En esa misma lógica se está estudiando la propuesta del nuevo jefe del cuerpo de marines, general David Berger a fin de que este componente deje de ser una fuerza autónoma para subordinarse operativamente a la Armada.
Si se produjeran estas modificaciones, la Armada contaría con 9 portaviones en servicio, de los cuales 6 o 7 podrían estar disponibles simultáneamente considerando que siempre se encuentra uno en repostaje de combustible nuclear y uno o dos en el transcurso de mantenimientos imprescindibles.
Incluso, en la hipotética situación en la que Estados Unidos pudiera concentrar todos estos portaviones en los mares adyacentes a China, abandonando sus misiones en el Golfo Pérsico, el Mediterráneo y el Atlántico y, además, se le agregaran las fuerzas basificadas en Guam, Japón, Corea y el resto del Pacífico, pareciera no ser suficiente para una confrontación victoriosa en una guerra contra China para la cual, el hecho bélico tendría características estrictamente defensivas.
Tomando nota de esta situación, en mayo de este año en un informe del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos (CRS, por sus siglas en inglés) se afirma que, si el país no aumenta sus capacidades navales, el potencial de su Armada podría eventualmente ser alcanzado y hasta superado por el de China. El informe resalta que las fuerzas armadas chinas se han modernizado en los últimos 25 años conduciendo a un aumento sustantivo de su capacidad combativa naval, no solo en áreas adyacentes, también en zonas un poco más distantes.
Pero, no sería el único problema de Estados Unidos. Una hipotética guerra contra China, lo llevaría a debilitar sus fuerzas en otros escenarios de guerra, en particular en Asia Occidental y Europa. En la primera de ellas, el necesario abandono de sus “responsabilidades” en la región llevaría a la desaparición de Israel como fuerza que sostiene la política de Estados Unidos, incapaz de enfrentarse a una coalición militar conducida por Irán a la cual se plegarían varios países árabes y musulmanes. El cambio en la correlación militar de fuerzas en la región, conduciría a un inevitable cambio en la correlación de fuerzas políticas, incluso con el debilitamiento de los aliados árabes de Estados Unidos.
En Europa, la doctrina militar de Estados Unidos ha comenzado a cambiar, trasladando su foco desde las zonas occidentales con costas en las cercanías del Atlántico a la fronteras directa con Rusia, construyendo una gran alianza con los tres países bálticos (Letonia, Estonia y Lituania), Polonia y Ucrania, naciones ancestralmente anti rusas y, en esa medida naturales aliados de Estados Unidos en este escenario. A diferencia de otros Estados europeos, estas países que en conjunto tienen una población de casi 90 millones de habitantes, ocupan un territorio de más de un millón de km² y poseen costas en el Mar Báltico y el mar Negro, profesan un identitario odio irracional contra Rusia que los hace proclives a participar en cualquier aventura estadounidense en la región.
Ello es lo que explica el traslado de un gran contingente militar estadounidense de Alemania a Polonia, el fortalecimiento de la presencia militar de la OTAN en los países bálticos y el apoyo al golpe de Estado en Ucrania en 2014 para colocar un gobierno afín a sus intereses. Ante el menor atisbo de agresión, Rusia se defenderá, obligando a Europa a tomar posición en condiciones del abandono de las responsabilidades de Estados Unidos en la OTAN, organización que virtualmente desaparecería si la potencia norteamericana les exige a sus aliados europeos medidas agresivas contra Rusia, como respuesta a un eventual apoyo de ésta a China tras una agresión estadounidense.
Como ocurre con todos los imperios, su debilidad radica en la gran extensión de territorio que debe controlar y en el que debe actuar, solo una economía muy poderosa es capaz de soportar ese esfuerzo. La situación de la economía de Estados Unidos no le permite sostener un conflicto de dimensiones globales. El mismo sería un suicidio y el fin del imperio estadounidense. Sus estrategas tendrán que estudiar con suma atención la posibilidad de lanzarse en una aventura de este calibre, so riesgo de perder definitivamente su condición de potencia mundial. En este escenario sólo les quedaría el recurso de las armas nucleares. He ahí el peligro del momento que vivimos.
Sergio Rodríguez Gelfenstein
La fuente original de este artículo es alainet.org
Derechos de autor © Sergio Rodríguez Gelfenstein, alainet.org, 2020
Estados Unidos y China: ¿Estamos ante una inminente Tercera Guerra Mundial?
Globalizacion, 23 de julio 2020
alainet.org
Durante las últimas semanas se ha ido sembrando la idea de que el mundo avanza inexorablemente a una nueva guerra fría, esta vez entre Estados Unidos y China. La idea debería ser causa de investigación y estudio, dadas las implicaciones que ello tendría para el sistema internacional. En mi caso será motivo de un próximo artículo en días venideros.
Ahora, quería hacer notar los niveles de paroxismo que permean al gobierno estadounidense en su afán de confrontar a China. Así, el secretario de Estado Mike Pompeo instó a las naciones de todo el mundo a rechazar al Partido Comunista de China y crear una coalición para que asuma tal responsabilidad. Llama la atención que la mayor potencia mundial esté pidiendo ayuda para hacer frente a lo que considera su principal amenaza en el plano estratégico. Lejos de ser expresión de fuerza, las declaraciones de Pompeo reflejan debilidad.
A pesar de que Estados Unidos ha tenido un sostenido crecimiento de su gasto militar desde finales del siglo pasado -con un breve intento de disminución durante el gobierno de Obama- la situación de sus fuerzas armadas parecen no estar en un buen momento para confrontar a China, mucho menos si ésta constituye una alianza con Rusia cuyo poder militar supera a Estados Unidos en varias áreas.
Desde septiembre del año pasado se ha estado filtrando información que da cuenta de un deplorable estado de los componentes de las fuerzas armadas estadounidenses además de un acentuado deterioro moral de sus soldados.
Una primera alerta en la flota de portaviones de Estados Unidos fue dada por el Harry S. Truman, que no pudo navegar debido a un fallo en su sistema de distribución eléctrica, que lo obligó a permanecer en puerto. Otro desastre ocurrió en el Gerald R. Ford, del cual se dice que es el más avanzado y costoso de la Marina de Estados Unidos. Este navío que fue construido a un costo de 13 mil millones de dólares, fue botado el 9 de noviembre de 2013, teniendo prevista su incorporación formal a la Amada para ese año, pero no fue hasta 2017 que pudo concretarse su disponibilidad operativa. Una de sus características más importante que lo hace diferente a sus pares son los elevadores electromagnéticos de armas avanzadas (AWE), que sirven para subir las bombas, misiles y otras municiones hasta los hangares donde están las aeronaves. Pero a mediados del año pasado en el Gerald R. Ford solo funcionaban 2 de sus 11 elevadores de armas, según informó los primeros días de octubre el Instituto Naval de Estados Unidos. Ahora, se supone, que el barco estará en pleno funcionamiento en 2024 cuando el fabricante se comprometió a que los ascensores estarías totalmente operativos para 2018.
En ese mismo mes de septiembre se produjo el colosal fallo de los sistemas de defensa antiaérea Patriot y Aegis de fabricación estadounidense que no pudieron repeler los ataques lanzados el 14 de septiembre del año pasado contra dos refinerías de Arabia Saudí, porque no cumplen con las características declaradas que dicen tener según fuentes militares de Rusia e Israel. Por su parte, el general Joseph Dunford, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos insultando los conocimientos mínimos en materia militar que puede tener cualquier especialista afirmó que “Ningún sistema [de defensa antiaérea] es capaz de defenderse de una amenaza como esa”. Cabe destacar que el bombardeo fue realizado por fuerzas militares irregulares yemeníes que distan mucho de ser el aparato de guerra regular de cualquier potencia.
A mediados de ese mes, el mismo general Dunford reconoció tras la reunión del Comité Militar de la OTAN en Eslovenia que en los últimos años esa alianza ha venido perdiendo superioridad militar sobre Rusia agregando que la ventaja de ese bloque militar sobre el país euroasiático “se ha erosionado”. Según Dunford, el reconocimiento de tal situación obligó a que el alto mando militar de Estados Unidos se haya propuesto desarrollar una nueva estrategia para la alianza militar que dirige Estados Unidos.
En el plano moral, la situación no es mejor. Prueba de ello es el suicidio de tres miembros de la tripulación del portaviones George H.W. Bush ocurridos durante una semana en “incidentes separados y no relacionados”, según anuncio del alto mando naval el 25 de septiembre. Los tres suicidios se suman a los dos que ya habían ocurrido en el mismo portaviones en los últimos dos años, dando cuenta de una práctica habitual entre los atribulados soldados que no entienden el supuesto rol que juegan en defensa de su país y que deben recurrir a la coacción y las drogas para sostenerse en el cumplimiento de sus misiones.
A esto se suma que muchos navíos de la flota estadounidense fueron diezmados por la epidemia de COVID 19 a partir de abril de este año sin que los servicios médicos militares hayan podido dar una respuesta efectiva a tal contingencia. Ello derivó en la cuasi rebelión que se produjo en el portaviones Teodoro Roosevelt, en el que hubo 430 infectados entre los 2.000 marinos que conforman su tripulación. El informe de tal realidad por parte del capitán Brett Crozier, comandante del navío, se filtró a la prensa produciendo la baja deshonrosa del oficial que no hizo más que decir la verdad de lo que ocurría y que se retiró del barco bajo aclamación de sus subordinados.
Como señaló en su momento el portal venezolano “Misión Verdad”, simultáneamente a este hecho también dieron positivo por coronavirus dos marineros a bordo del portaaviones Ronald Reagan, existiendo dudas de si otro portaviones, el Nimitz estuvo en la misma situación antes de desplegarse en el Pacífico, mientras que el Carl Vinson, que está en mantenimiento en una base del Pacífico de Estados Unidos, también reportó algunos casos.
Así, en algún momento de este año 4 de los 11 portaaviones nucleares de Estados Unidos estuvieron con limitada disposición combativa por la incapacidad de controlar la epidemia, situación inédita en una institución militar que se maneja bajo rígidas medidas de control y una gran disciplina.
Citando al general John Hyten, vicepresidente del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, “Misión Verdad” señala que éste, afirmó que lo ocurrido en el portaviones Roosevelt no es único. Lo intenta explicar al decir que “Tenemos demasiados barcos en el mar. Tenemos demasiadas capacidades desplegadas. Hay 5.000 marineros en un portaaviones de propulsión nuclear” y advierte “Pensar que nunca volverá a suceder no es una buena forma de planificar”.
Esta incapacidad en el manejo de la epidemia configura una crisis mucho más profunda que abarca bases militares que están comprometidas con los planes estratégicos de confrontación con China y Rusia, afectando también a la industria militar estadounidense.
Según documentos obtenidos por la revista especializada Defense News, tal situación ha llevado a que el alto mando de las fuerzas armadas de Estados Unidos se propusiera reevaluar sus capacidades en la perspectiva de una confrontación militar con China. Así, la secretaría de defensa habría estado evaluando la reducción de 2 portaviones de su flotilla, la paralización de la cantidad de destructores y cruceros a cambio de agregar barcos no tripulados o con poca tripulación.
De esta manera, se estarían aceptando los planes del actual secretario de Defensa Mark Esper quien ha formulado la idea de desestimar el rol de los portaviones como elemento central de la fuerza de agresión de Estados Unidos para irlos sustituyendo por naves aéreas y marítimas no tripuladas “que pueden sacrificarse más fácilmente en un conflicto”. En esa misma lógica se está estudiando la propuesta del nuevo jefe del cuerpo de marines, general David Berger a fin de que este componente deje de ser una fuerza autónoma para subordinarse operativamente a la Armada.
Si se produjeran estas modificaciones, la Armada contaría con 9 portaviones en servicio, de los cuales 6 o 7 podrían estar disponibles simultáneamente considerando que siempre se encuentra uno en repostaje de combustible nuclear y uno o dos en el transcurso de mantenimientos imprescindibles.
Incluso, en la hipotética situación en la que Estados Unidos pudiera concentrar todos estos portaviones en los mares adyacentes a China, abandonando sus misiones en el Golfo Pérsico, el Mediterráneo y el Atlántico y, además, se le agregaran las fuerzas basificadas en Guam, Japón, Corea y el resto del Pacífico, pareciera no ser suficiente para una confrontación victoriosa en una guerra contra China para la cual, el hecho bélico tendría características estrictamente defensivas.
Tomando nota de esta situación, en mayo de este año en un informe del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos (CRS, por sus siglas en inglés) se afirma que, si el país no aumenta sus capacidades navales, el potencial de su Armada podría eventualmente ser alcanzado y hasta superado por el de China. El informe resalta que las fuerzas armadas chinas se han modernizado en los últimos 25 años conduciendo a un aumento sustantivo de su capacidad combativa naval, no solo en áreas adyacentes, también en zonas un poco más distantes.
Pero, no sería el único problema de Estados Unidos. Una hipotética guerra contra China, lo llevaría a debilitar sus fuerzas en otros escenarios de guerra, en particular en Asia Occidental y Europa. En la primera de ellas, el necesario abandono de sus “responsabilidades” en la región llevaría a la desaparición de Israel como fuerza que sostiene la política de Estados Unidos, incapaz de enfrentarse a una coalición militar conducida por Irán a la cual se plegarían varios países árabes y musulmanes. El cambio en la correlación militar de fuerzas en la región, conduciría a un inevitable cambio en la correlación de fuerzas políticas, incluso con el debilitamiento de los aliados árabes de Estados Unidos.
En Europa, la doctrina militar de Estados Unidos ha comenzado a cambiar, trasladando su foco desde las zonas occidentales con costas en las cercanías del Atlántico a la fronteras directa con Rusia, construyendo una gran alianza con los tres países bálticos (Letonia, Estonia y Lituania), Polonia y Ucrania, naciones ancestralmente anti rusas y, en esa medida naturales aliados de Estados Unidos en este escenario. A diferencia de otros Estados europeos, estas países que en conjunto tienen una población de casi 90 millones de habitantes, ocupan un territorio de más de un millón de km² y poseen costas en el Mar Báltico y el mar Negro, profesan un identitario odio irracional contra Rusia que los hace proclives a participar en cualquier aventura estadounidense en la región.
Ello es lo que explica el traslado de un gran contingente militar estadounidense de Alemania a Polonia, el fortalecimiento de la presencia militar de la OTAN en los países bálticos y el apoyo al golpe de Estado en Ucrania en 2014 para colocar un gobierno afín a sus intereses. Ante el menor atisbo de agresión, Rusia se defenderá, obligando a Europa a tomar posición en condiciones del abandono de las responsabilidades de Estados Unidos en la OTAN, organización que virtualmente desaparecería si la potencia norteamericana les exige a sus aliados europeos medidas agresivas contra Rusia, como respuesta a un eventual apoyo de ésta a China tras una agresión estadounidense.
Como ocurre con todos los imperios, su debilidad radica en la gran extensión de territorio que debe controlar y en el que debe actuar, solo una economía muy poderosa es capaz de soportar ese esfuerzo. La situación de la economía de Estados Unidos no le permite sostener un conflicto de dimensiones globales. El mismo sería un suicidio y el fin del imperio estadounidense. Sus estrategas tendrán que estudiar con suma atención la posibilidad de lanzarse en una aventura de este calibre, so riesgo de perder definitivamente su condición de potencia mundial. En este escenario sólo les quedaría el recurso de las armas nucleares. He ahí el peligro del momento que vivimos.
Sergio Rodríguez Gelfenstein
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Una profesional sanitaria realiza una prueba PCR a un paciente en el CAP Raval Nord de Barcelona. (Efe)
