Miles de personas han sido hospitalizadas en EE.UU. tras una fuerte epidemia de gripe, que ha sacudido a casi todo el territorio de EE.UU.
Al menos 18 niños han muerto, mientras que los hospitales de muchas ciudades están saturados.
Los centros sanitarios ya no tienen capacidad de admitir a más pacientes, como resultado del brote de gripe que esta temporada amenaza con ser la más severa por los altos niveles de contagio, señala el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Según los datos de la organización, durante las últimas semanas de diciembre y la primera de enero se registraron cifras de enfermos muy por encima de lo habitual.
Se informa que la enfermedad ha sacudido a 41 estados del país y el número de víctimas sigue creciendo rápidamente, sobre todo en 29 de ellos, entre los que se encuentran Nueva York, Chicago y Nueva Jersey.
Las autoridades de la ciudad de Boston, la capital del estado de Massachusetts, han declarado el estado de emergencia por el brote.
El Centro para el Control de Enfermedades de EE.UU. recomienda a la población vacunarse, tratar de evitar a las personas enfermas y lavarse repetidamente las manos, como los métodos más simples para evitar el contagio.
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