Un nuevo análisis de la máscara funeraria del niño rey ha llevado a una teoría radical, la máscara fue originalmente concebida para Nefertiti, la madrastra de Tutankamón y consorte real de su esposo Akenatón. Máscara funeraria de Tutankamón en el Museo Egipcio de El Cairo.
Realizada en oro batido con incrustaciones de pasta de vidrio y turquesas, es la imagen más conocida del arte del Antiguo Egipto.
De acuerdo a lo que reporta Ahram Online, el arqueólogo Nicholas Reeves examinó recientemente la parte posterior de la máscara y notó que el rostro no coincidía con su lado opuesto —el tipo de oro y el material utilizado para el color azul es diferente en el frente—. También resaltó que las orejas contienen orificios destinados a colgar aretes.
«No existe imagen en todo el antiguo Egipto de un faraón cuyas orejas estén decoradas con aretes», argumenta Reeves, quien sostiene que es otra evidencia que prueba que la máscara fue pensada para una mujer y no para un hombre.
Asimismo, durante una conferencia en Heliópolis, Reeves dijo que la inscripción ha sido cambiada. «Echando un segundo vistazo a la máscara pude ver que la inscripción en el cartucho fue alterada, lo que significa que, al contrario de lo que se creía hasta ahora, todos los tesoros hallados en la tumba de Tutankamón fueron en un principio para la reina Nefertiti», señaló el arqueólogo.
El Dr. Reeves está abocado actualmente a la búsqueda de cámaras ocultas en la tumba de Tutankamón. El arqueólogo británico afirma que existen dos cámaras extras, una de las cuales albergaría los restos de la legendaria reina. Mapa que muestra la ubicación de las dos cámaras ocultas según el reporte del Dr. Reeves.
El próximo mes, y por medio de un radar no invasivo, se escaneará la tumba completa para confirmar si la teoría de Reeves es correcta. De serlo, se convertirá en un descubrimiento aún más importante que el del propio Tutankamón.
Artículo publicado en MysteryPlanet.
No hay comentarios:
Publicar un comentario