jueves, 14 de junio de 2018

El Calendario de Adán: ¿El Monumento Megalítico más Antiguo del Mundo?

Se ha planteado, no sin polémica, que el Calendario de Adán pueda ser la construcción más antigua realizada por la mano del hombre.

Apodado a veces como “El Stonehenge Africano”, es anterior tanto a Stonehenge como a la Gran Pirámide de Gizeh en decenas de miles de años. 

Situado en Mpumalanga, Sudáfrica, es un círculo megalítico de unos 30 metros de diámetro y su antigüedad ha sido estimada por algunos estudios en más de 75.000 años. 

Se han identificado en este monumento diversas alineaciones astronómicas y posiblemente sea el único ejemplo completamente funcional y en su mayor parte intacto de calendario megalítico del mundo.



El calendario de Adán está situado en Mpumalanga, una pintoresca región de Sudáfrica ( Wikimedia Commons )

Esparcidas por toda la región montañosa de Sudáfrica existen miles de ruinas de círculos megalíticos. 

Las primera estimación del posible número de estas ruinas se hizo en 1891 por parte del explorador inglés Theodore Bent. Calculó que habría unas 4.000 en esta región del mundo. Hacia 1974 la estimación se había elevado a 20.000. A día de hoy, el investigador y autoridad en la materia Michael Tellinger, ha estimado que el número de antiguas ruinas de piedra en esta parte del mundo puede ser de 100.000 o posiblemente mucho mayor. 

Algunos de estos “círculos de piedra” no tienen puertas ni entradas aunque la mayoría están conectados por una extensa red de canales que a menudo han sido identificados erróneamente como “carreteras” por algunos historiadores.

Esta trama interconectada de ruinas circulares está inmersa en una aparentemente interminable extensión de antiguas terrazas agrícolas rodeando a estas estructuras. El Calendario de Adán está considerado el más famoso de entre este inmenso conjunto de ruinas. 

Captura de pantalla de Google Earth que muestra solo una muy pequeña parte de esta región sudafricana tan rica en ruinas y estructuras de piedra. ( Google Earth )

Conocido por los ancianos africanos como “El Lugar de Nacimiento del Sol” o “Inzalo y’Langa”, el lugar atrajo la atención del público por primera vez en el 2003 gracias al piloto sudafricano Johan Heine. 

Llevaba sobrevolando las montañas de Mpumalanga, en Sudáfrica desde hacía más de 20 años y se interesó en las miles de extrañas siluetas circulares de piedra esparcidas por toda la región, empezando a fotografiarlas. 

Al consultar a los expertos sobre su posible origen, se le informó de que eran restos de “kraal” (cercos para encerrar al ganado) dejados atrás por los pueblos de etnia Bantú cuando emigraron desde el norte alrededor del siglo XIV. 

A día de hoy esta teoría parece estar lejos de ser definitiva, ya que estas estructuras difieren bastante de otros diseños de “kraal” Bantúes para el ganado, que suelen estar construidos con matorrales espinosos, con una sola entrada y salida para las reses.

Hay también varios miles de ellos repartidos en decenas de miles de kilómetros.



Kraal Bantú para el ganado ( Image source )

Un accidente aéreo sufrido por un miembro de su equipo llevó a Johan a descubrir el misterioso círculo monolítico por casualidad.

Encontrándose en ruta mientras buscaba a uno de sus pilotos cuya aeronave se había estrellado al borde de un acantilado, Johan observó una formación de grandes piedras que se alzaban sobre el suelo cerca del lugar del accidente. 

Al rescatar al piloto herido al pie del acantilado, Johan se aproximó a los monolitos y se dio cuenta de que estaban alineados con los puntos cardinales – norte, sur, este y oeste – así como con equinoccios y solsticios. Había al menos tres monolitos alineados en dirección al ocaso, pero en la cara oeste de estos monolitos se podía apreciar un extraño agujero en el suelo. Tras semanas y meses midiendo y haciendo observaciones, Johan empezó a sospechar que se trataba de un calendario de piedra.

Se ha llamado con acierto al monumento “El Calendario de Adán” ya que las piedras están colocadas de tal manera que nos permiten seguir el movimiento del sol, que proyecta sombras sobre la roca. Aún funciona perfectamente como calendario a día de hoy, basta con seguir la sombra del sol al atardecer, proyectada por el monolito central de mayor altura sobre la piedra plana que hay junto a él. Este notable calendario era originalmente una gran estructura circular de piedra semejante a Stonehenge y en el centro de su “círculo” encontramos dos piedras verticales que se dice que contienen grabados sobre su superficie. 

La silueta original del conjunto aun es claramente visible en las imágenes de satélite. Las piedras son todas dolomitas y el peso de cada una de ellas llega a las cinco toneladas, afirmándose que fueron transportadas desde una cantera distante del lugar en que se alza el círculo. Debemos observar que la región que rodea el Calendario de Adán es extraordinariamente rica en oro. 

Diversas prospecciones mineras se han realizado en la zona, siendo una de las minas de oro más ricas en funcionamiento en la actualidad la Sheba Gold Mine, en la región de Mpumalanga. 

No solo las ricas vetas de oro llamaron la atención allá por el 1880, sino también las pruebas de extracción de minerales por parte de antiguas civilizaciones que reseñaron por escrito los primeros europeos que exploraron la zona.

Plano del Calendario de Adán realizado por Rodney Hale con las alineaciones astronómicas tal como eran alrededor del 11.550 a. C. ( andrewcollins.com)

Los primeros cálculos de la antigüedad del calendario se basaron en el nacimiento de Orión, una constelación conocida por las tres brillantes estrellas que forman el “cinturón” del mítico cazador. La tierra gira en torno su eje, así que las estrellas y constelaciones cambian su ángulo de presentación en el cielo nocturno de manera cíclica. Esta rotación, llamada precesión completa un ciclo aproximadamente cada 26.000 años. 

Determinando cuándo las tres estrellas del cinturón de Orión estuvieron posicionadas paralelas (en horizontal) respecto al horizonte, es posible calcular la época en que las tres piedras del calendario estuvieron alineadas con estas estrellas. Según Tellinger, un cálculo realizado por el astrónomo Bill Hollenbach basado en el nacimiento de Orión en el horizonte sugería una edad de al menos 75.000 años. Un cálculo posterior realizado en junio del 2009 dio como resultado 160.000 años, basándose en el nacimiento de Orión “paralelo al horizonte” pero también en la “erosión de las doleritas” (un tipo de roca) halladas en el lugar. 

Algunos fragmentos se habían desprendido de las piedras que forman parte del monumento y se encontraban en el suelo, expuestos a la erosión natural.

Cuando se unieron de nuevo estos fragmentos a las piedras de las que se habían desgajado se observó que aproximadamente unos 3 cm de piedra se habían erosionado.

Esta medición ayudó a calcular la edad del conjunto utilizando el índice de erosión de la dolerita.

Michael Tellinger realizando pruebas acústicas en el lugar ( andrewcollins.com)

El último y más reciente descubrimiento en los círculos megalíticos del Calendario de Adán es el de las frecuencias sonoras de las formaciones rocosas procedentes del suelo por debajo de ellas. 

Con la moderna tecnología, Tellinger y otros científicos han sido capaces de detectar y medir frecuencias de sonido con propiedades acústicas, procedentes del terreno en el interior de los círculos de piedras y que son conductoras de la electricidad. Estas frecuencias sonoras de la tierra por debajo de las piedras adoptan la forma de flores de sagrada geometría al llegar a la superficie.



Hay aún mucho sobre el Calendario de Adán por comprender, incluido quiénes lo construyeron, cómo era su civilización y cómo lo diseñaron con tan precisas mediciones. Quizás con el tiempo, más investigaciones ayudarán a encajar las piezas y a desvelar este misterio prehistórico.

Imagen de portada: Calendario de Adán, Mpumalanga, Sudáfrica ( getaway.co.za)


Este artículo fue publicado originalmente en www.ancient-origins.net y ha sido traducido con permiso.

Fuentes

Tellinger, Michael. "Decoding the Hidden Ruins of Southern Africa." GrahamHancock.com. http://www.grahamhancock.com/forum/TellingerM1.php.

Serrao, Angelique. "Discovering The Oldest Manmade Structures on Earth." Discovering The Oldest Manmade Structures on Earth. July 14, 2008. http://www.bibliotecapleyades.net/sumer_anunnaki/esp_sumer_annunaki34.htm.

Tellinger, Michael. "Adam’s Calendar." Michael Tellinger. http://www.michaeltellinger.com/adams-calendar.php.

Tellinger, Michael. "THE OLDEST MAN-MADE STRUCTURES ON EARTH." Megalithomania Conference. http://www.megalithomania.co.uk/michaelarticle.html.

"Adam's Calendar, Africa." Adam's Calendar, Africa. http://www.ancient-wisdom.co.uk/africaadamscalendar.htm.

"Amazing Metropolis Discovered in Africa Is 200,000 Years Old!" Amazing Metropolis Discovered in Africa Is 200,000 Years Old! http://www.viewzone2.com/adamscalendar22.html.

"ADG (UK) Blog." Ancient Annunaki Cities Discovered In South Africa ~. http://www.adguk-blog.com/2013/09/annunaki-goldmine-discovered-in-south.html

2 JUNIO, 2015 - 01:48 BRYAN HILLIARD
http://www.ancient-origins.es/noticias-general-lugares-antiguos-%C3%A1frica/el-calendario-ad%C3%A1n-%C2%BFel-monumento-megal%C3%ADtico-m%C3%A1s-antiguo-mundo-002602/page/0/1

5 videos de Terror reales





Las mentiras sobre la brutal persecución de brujas, ¿por qué España no participó de la barbarie europea?

Los investigadores actuales estiman que, entre mediados del siglo XV y mediados del siglo XVIII, se produjeron de 40.000 a 60.000 condenas a la pena capital por este concepto. 

La mayor parte de los ejecutados tuvo lugar en Alemania y los países vecino

La leyenda negra achaca a la Inquisición española la muerte de miles de mujeres acusadas de brujería, entre otras cifras huérfanas de documentación. Los datos tumban la historia que los enemigos del Imperio español inventaron con el fin de desacreditar a la potencia hegemónica. 

Mientras que en Alemania se condenaron a muerte a 25.000 mujeres, se calculan únicamente 300 casos en España. El sur de Europa, en verdad, permaneció ajeno a uno de los episodios más oscuros en la historia del continente.

Salvados los siglos más tenebrosos de la Edad Media, se desató a comienzos de la Edad Moderna una inesperada obsesión por la caza de brujas, porque, según sostiene el historiador Ricardo García Cárcel, se introdujo una nueva novedad en la sociedad: «La idea de que el demonio estaba en todas partes y que las brujas habían sido creadas por él».«A finales del siglo XVI el problema se agravó porque la intelectualidad europea y racionalista se obsesionó con el demonio y mezcló esta idea con la de las brujas»



La fiebre cazadora empezó a finales del XV, respaldada, en 1484, por el Papa Inocencio VIII en la bula Summis desiderantes affectibus: «Muchas personas de ambos sexos se han abandonado a demonios, íncubos y súcubos, y por sus encantamientos, conjuros y otras abominaciones han matado a niños aún en el vientre de la madre, han destruido el ganado y las cosechas, atormentan a hombres y mujeres y les impiden concebir». Se abría la veda.

La fiebre tornó en delirante conforme avanzaban los años. «A finales del siglo XVI el problema se agravó porque la intelectualidad europea y racionalista se obsesionó con el demonio y mezcló esta idea con la de las brujas», explica García Cárcel, autor de «La Inquisición», Madrid, Anaya, 1995. A consecuencia de este fenómeno se vivieron ochenta años de terror que afectaron, sobre todo, a la Europa central, Inglaterra y a los países más avanzados. El empeoramiento del clima, las malas cosechas y la peste azotaron el continente a finales de siglo, mientras que la persecución de brujas se intensificaba coincidiendo con las crisis económicas.

La intensidad alemana

Los investigadores actuales estiman que, entre mediados del siglo XV y mediados del siglo XVIII, se produjeron de 40.000 a 60.000 condenas a la pena capital por este concepto. La mayor parte de las ejecuciones tuvo lugar en Alemania y los países colindantes. No obstante, la fragmentación política del Sacro Imperio Romano Germánicofavorecía que cada ciudad se enfrentaba al problema por su cuenta. La tensión religiosa entre católicos, luteranos, calvinistas y demás herejías elevó la brutalidad de la persecución.

La intensidad en Alemania de esta persecución se explica por el fulminante éxito de Lutero, respaldado por importantes príncipes germanos, que justificó las matanzas en que la Biblia exige, en Éxodo 22,18, que «No permitirás la vida de los hechiceros». Los reformadores usaron esta persecución para incrementar su autoridad, aún precaria, y adquirir más control sobre la población local.

«Hay niños de tres y cuatro años, hasta 300, de los que se dice que han tenido tratos con el Diablo. He visto cómo ejecutaban a chicos de siete años, estudiantes prometedores de 10, 12, 14 y 15 años. También había nobles», escribió un cronista sobre los procesos que se llevaron a cabo en Würzburg en 1629. Las procesos masivos y el intercambio de acusaciones entre vecinos eran el pan de cada día en algunos territorios alemanes.



Pero, ¿realmente existían las brujas, es decir, mujeres que practicaban rituales satánicos? El mismo testimonio que se asombraba por la muerte de esos niños sostenía que no había duda de que «el Diablo en persona, con 8.000 de sus seguidores, mantuvo una reunión y celebró misa ante todos (los condenados) administrando a sus oyentes cortezas y mondaduras de nabos en lugar de la Sagrada Hostia». Si bien la mayoría de los testimonios eran producto de la psicosis colectiva, García Cárcel no tiene duda de que existían estas prácticas en distintos rincones de Europa. «La Iglesia persiguió a las brujas porque creían que hacían una competencia terrible al propio cristianismo. Eran mujeres que afirmaban que también podían intermediar con el otro mundo», señala el historiador valenciano.
España, ¿una isla para las brujas?

En el amasijo que conforma la leyenda negra contra España aparece destacada la imagen de la Inquisición persiguiendo a judíos, brujas, musulmanes y protestantes a través de los métodos más brutales. Sin embargo, al igual que la persecución de protestantes, la incidencia de casos de brujería en España fue mínima. De todos los procesos entre 1540 y 1700, solo el 8% fueron por causa de la brujería. En total, se condenó a la hoguera por brujería a 59 mujeres en España. En Portugal fueron quemadas cuatro, y en Italia, 36.Quema de una bruja septuagenaria en Schoonhoven, Holanda, en 1597

Esto fue así porque la brujería se vislumbraba, a ojos de los inquisidores españoles, un mal menor, en el que incurrían mujeres de baja extracción y ningún tipo de influencia social o religiosa. «En España este fenómeno nunca alcanzó niveles de fanatización del norte. La Inquisición moderna no alteró los procedimientos y la mecánica con respecto a las brujas», recuerda García Cárcel. El danés Henningsen habla en este sentido de un auténtico «escepticismo inquisitorial», donde los especialistas en leyes achacaban el fenómeno de la brujería a la ignorancia y a las alucinaciones.

Desde el principio, hubo eclesiásticos que descartaron la validez de los testimonios de las brujas, como el obispo de Ávila, Alfonso de Madrigal, que en 1436 afirmó que los aquelarres eran fantasías producto de drogas, o el dominico castellano y obispo de Cuenca, Lope de Barrientos, quien se preguntó «qué cosa es esto que dicen, que hay mujeres, que se llaman brujas, las cuales creen e dicen que de noche andan con Diana, deesa de los paganos, cabalgando en bestias, y andando y pasando por muchas tierras y logares, e que pueden... dañar a las criaturas», a lo que él mismo se respondía en ese texto: que nadie ha de tener «tan gran vanidad que crea acaescer estas cosas corporalmente, salvo en sueños o por operación de la fantasía».En la Corona española la jurisdicción ordinaria y la religiosa (los obispos) contaban entre sus funciones habituales la represión de la superstición

El pragmatismo y la calma se impuso cuando, en 1526, el creciente problema de la brujería en Europa, al calor de las reformas protestantes, obligó a la teología española a reunirse en Granada. Henningsen se asombra de las disposiciones tomadas allí, frente a la situación de locura colectiva que se vivían en otros rincones. Estas disposiciones incluyeron el siguiente procedimiento:

-Cualquier bruja que voluntariamente confiese, y muestre señales de arrepentimiento, será reconciliada (con la Iglesia).

-En tales casos, si no median otros delitos, no habrá multa ni confiscación de bienes y solo habrá penas salutarias para su alma.

-Nadie será arrestado basándose en las confesiones de otras brujas.

La actuación del tribunal se encaminó durante los siglos XVI y XVII a la reinserción de las acusadas de brujería en el seno de la Iglesia, más que a la pena de muerte.

Como ejemplo de condena benigna, una mujer llamada Isabel García, que en 1629 confesó ante el tribunal de Valladolid habérsele aparecido Satanás, con quien pactó la recuperación de su amante, fue únicamente castigada a abjurar de levi y a cuatro años de destierro.

Así y todo, hay que tener presente que en la Corona española la jurisdicción ordinaria y la religiosa (los obispos) contaban entre sus funciones habituales la represión de la superstición, con lo cual la mayoría de casos pasaron por sus manos y no por la Inquisición, cuyo registro era más minucioso.

Parece que es evidente, con todo, que en España no alcanzó la represión de Europa Central.

Alonso de Salazar y Frías denuncia antes

Otra muestra de que el fenómeno de la brujería contaba con sus propias características en España es que, cuando la Inquisición moderna llevaba funcionando más de un siglo, surgieron aquí inquisidores racionalistas como Pérez Gil o Alonso de Salazar y Frías, que criticó el proceso de las brujas de Zugarramurdi.

Este proceso es tal vez el caso más famoso de la historia de la brujería en España y finalizó con un auto en noviembre de 1610donde dieciocho personas fueron reconciliadas, seis fueron quemadas vivas y cinco en efigie (a través de un muñeco del tamaño de un ser humano que los representaba). 



«Alonso de Salazar y Frías empezó a desconfiar por primera vez de lo que las brujas decían sobre sí mismas. Empezó a considerar que todo aquello se había producido por una neurosis colectiva que había que erradicar», apunta García Cárcel.

Alonso de Salazar y Frías, que creía que los fenómenos de brujería eran historias inverosímiles y ridículas, presentó al Consejo de la Suprema Inquisición, el 24 de marzo de 1612, un informe crítico con el proceso de Zugarramurdi. Como destacó Julio Caro Baroja, el español «se adelantó de modo considerable a los que difundieron en Europa ideas concebidas en el mismo sentido», como el famoso jesuita alemán Friedrich Spee, que cargó contra la persecución de las brujas en el corazón del continente. 

Un resultado concreto del informe del inquisidor fue que se intentó reparar a las víctimas del auto de fe ordenando que sus sambenitos no quedaran expuestos en ninguna iglesia. Una consideración impensable en cualquier otro lugar de Europa.Nunca más se juzgaría a nadie en territorio español por solo el delito de brujería, mientras en el resto de Europa continuó la persecución hasta finales del siglo XVIII.

«No hubo brujos ni embrujados hasta que se empezó a hablar de ellos», aseguró Alonso de Salazar, entre sus conclusiones. Un criterio en contra de la superstición y la ignorancia que prevaleció a partir de esas fechas. Nunca más se juzgaría a nadie en territorio español por solo el delito de brujería, mientras en el resto de Europa continuó la persecución. Una niña ejecutada en el cantón protestante de Glarus, en 1783, fue la última víctima de esta histeria prolongada durante siglos.

http://www.abc.es/historia/abci-mentiras-sobre-brutal-persecucion-brujas-espana-no-participo-barbarie-europea-201806130327_noticia.html#ns_campaign=rrss&ns_mchannel=abc-es&ns_source=fb&ns_linkname=cm-general&ns_fee=0



La Bomba atómica de rusa de Mityushikha fué utilizaza para eliminar a un Alienígena

El misticismo que engloba las décadas pasadas antes del bum tecnológico es mucho mayor, ya que conseguir pruebas de algo era mucho más difícil. Sin embargo, creerlo o no dependerá únicamente de ti, por ello, vale la pena revisar este peculiar caso.

Base soviéica antártica

La base secreta soviética

Lo más probable es que conozcas a la mítica Área 51 en los Estados Unidos. Aunque es una base secreta, al parecer todos saben de ella. Pero es casi seguro que nunca escuchaste de una base secreta soviética ubicada en Mityushikha, al norte del Círculo Polar Ártico.



En ambos casos, tanto en la base americana como soviética, han salido supuestos documentos que informan de experimentación con vida no terrestre. Ambos gobiernos se refugian diciendo que sí, efectivamente es una base secreta, pero para pruebas de arsenal militar.

Crisis extraterrestre

De entre todos los posibles documentos desclasificados, aparecieron varios que hablaban de un supuesto ser alienígena que había sido capturado y puesto bajo observación de los científicos soviéticos a finales de los 50 e inicio de los 60. Pero hubo un gran problema. 

El extraterrestre se desarrolló rápidamente multiplicando su fuerza e inteligencia.

Imagen ilustrativa. Hongo bomba atómica

Llegado el año 1961, él era incontrolable. A finales de ese mismo año, el ser se abrió paso por las instalaciones y logró escapar dejando un camino de sangre por las múltiples muertes de militares y científicos. 

Representando un enorme riesgo si llegase a tierras soviéticas, se le informó al Primer Ministro Khrushchev y dio una orden un tanto peculiar.

Eliminarlo a toda costa

La base antártica soviética era una carnicería. El extraterrestre se encontraba suelto y se dice que buscaba a todos los sobrevivientes para acabar con ellos. Por esta razón, Khrushchev dio la orden de acabarlo con una bomba atómica dos veces más potente que la de Nagasaki en la que estuvieron trabajando un tiempo.



La explosión se llevó a cabo como debía, explotando cerca de las 11:30 del 30 de octubre de 1961 justo sobre él. Se dice que la protección del extraterrestre, que la podríamos comparar con un campo de fuerza, no fue suficiente. Días más tarde, el ejército fue al lugar y encontró los restos calcinados y destrozados del espécimen de 5 metros de altura.

-3 mayo, 2018
http://ufoymisterios.es/desclasificados/la-bomba-atomica-rusa-de-mityushikha-fue-utilizada-para-eliminar-un-alienigena/

miércoles, 13 de junio de 2018

Upppps!! Ovni gigantesco cerca del Sol










Documental Sobre los Registros Sumerios Extraterrestres





Descubierto un manuscrito de NEWTON con la fórmula de LA PIEDRA FILOSOFAL y LA VIDA ETERNA


Aparece en Pasadena, California, un manuscrito de Isaac Newton con la fórmula alquímica del “elixir de la vida” u Opus Magna

¿Estás listo para conseguir la inmortalidad? Un manuscrito de Isaac Newton que contiene la fórmula alquímica de la piedra filosofal ha sido redescubierto.



La piedra filosofal, es el legendario ‘elixir de la vida’, un transmutador metal que encerraría -según la tradición- la clave de la inmortalidad.

Platón se refiere a ella como “materia prima”, del que los cuatro elementos habrían derivado y se cree que es, también, el ingrediente clave en la alquimia. El proceso de creación de la piedra se llama el Opus Magnus o la Gran Obra y se cree que tiene cuatro etapas relacionadas con los colores: negro, blanco, amarillo y rojo.

Pues bien, según Chemistry World , un manuscrito de Isaac Newton con la fórmula alquímica de esta ambicionada piedra (o elixir) apareció en una subasta en Pasadena, California, el pasado 16 de febrero donde fue comprado por la Chemical Heritage Foundation (CHF) de Filadelfia. Esta institución tendrá el manuscrito original en latín online.

El manuscrito se titula Preparación de la [Sophick] Mercurio de los Filósofos [ ‘] Piedra por el Antimonial Stellate Regulus de Marte y la Luna a partir de los manuscritos del filósofo americano . ‘Sophick’ Mercurio se refiere al mercurio filosófico, un sinónimo de la piedra. Newton copió la receta del químico estadounidense George Starkey (el filósofo americano mencionado en el título), que publicó bajo el seudónimo Eirenaeus Philalethes y que algunos consideran como primer científico de Estados Unidos. Se supone que Newton intentó la receta a finales de 1600 debido a que hay notas y correcciones a la fórmula original de Starkey y una receta newtoniana en la parte posterior para la destilación de mineral de plomo.

La importancia del manuscrito es que procede de la propia mano de Sir Isaac y muestra que él era un alquimista, así como un matemático y físico.

Historia de la piedra filosofal

Se cumplen 700 años de la muerte de Raimundo Lulio –Ramon Llull en catalán–, una de las figuras más sobresalientes de la historia del mundo occidental, nacido en Mallorca en 1235 y fallecido en el barco que lo llevaba a su querida ciudad de Palma, el 29 de junio de 1315, tras haber sido herido mortalmente en Bujía, apedreado por unos musulmanes exaltados.

La vida de este hombre supera los límites del tiempo, el espacio y la historia. Una de sus metas fue explorar los secretos de la piedra filosofal… Jesús Ávila Granados

Fue en 1300, después de viajar a Montpellier y conocer personalmente a Arnau de Vilanova, el astrólogo, alquimista, médico, adivino y maestro esotérico valenciano, cuando Ramon Llull descubrió los secretos de la piedra filosofal, fruto de su facultad para canalizar la Vía seca y laVía húmeda, los dos métodos más conocidos para alcanzar la Obra. 

Arnau le enseñó que el primer método era más secreto y encerraba mayores peligros, mientras que el segundo era más lento pero también más largo. Vilanova, nacido el mismo año que Llull (1235), se consideraba un auténtico curador de espíritus y ejerció una notable influencia a la hora de iniciar al humanista mallorquín en las ciencias ocultas y el esoterismo.

Llull fue el primero que ideó un manejo “mecánico” de la lógica. Para orientar a la razón humana en la búsqueda de la verdad, escribió Arte Lógica, mientras que en Lógica Nueva,escrita durante su tercer viaje a la ciudad de Génova (1303), intentó facilitar la comprensión del conocimiento humano. Sin duda, su pensamiento estuvo inmerso por completo en las coordenadas vitales de la Edad Media.

En su obra Introducció a Ramon Llull (1998), Antoni Bonner sintetiza muy bien este aspecto del pensador mallorquín. La Lógica Nueva está estructurada en siete partes o distinciones, la última de las cuales propone preguntas a propósito de las seis precedentes. 

La primera distinción trata de la substancia y de las cuestiones del Arte desde su función lógica; la segunda describe los cinco predicables; la tercera presenta los diez predicamentos; la cuarta despliega las “cien formas”, una herramienta dialéctica luliana que ya aparece en el Árbol de la Ciencia; la quinta describe el silogismo y las falacias; y la sexta es una aplicación de la lógica a las ciencias (teología, filosofía natural y moral, derecho y medicina).



 Lo que Llull calificaba como “el Arte” no era sino un conjunto de procedimientos para ser aplicados a los procesos del intelecto, que permitían extraer sistemáticamente nuevos conocimientos desde los ya adquiridos. A causa de ello, no dudó en mezclar las ideas neoplatónicas alejandrinas con otras de los musulmanes y, sobre todo, dar rienda suelta a su propia inspiración.

Llull organizaba estos conocimientos en “árboles” y en ellos establecía un número determinado de categorías diferentes. Después, colocaba una serie de círculos concéntricos, un requisito previo a la obtención de todas las posibilidades combinatorias mediante el giro de los distintos círculos. Cada combinación encerraba un sentido propio, y el conjunto de todas ellas suponía extraer por completo el conocimiento implícito en los conceptos iniciales.

Fuente: http://www.xn--revistaaocero-pkb.com/secciones/ocultismo/aparece-manuscrito-newton-formula-piedra-filosofal
30 mayo, 2018
http://www.historiadeiberiavieja.com/secciones/historia-medieval/secretos-piedra-filosofal

General Petraeus se transforma en reptiliano en vivo (Original Video)




La ideología del nacionalismo catalán tiene una sombra

La idea de que existen diferentes razas humanas -y su corolario de que algunas de ellas son mejores que otras- es uno de los pensamientos más dañinos, perversos y deleznables que ha desarrollado la humanidad a lo largo de su ya dilatada historia.

Simplemente por sus consecuencias en la práctica (guerras de limpieza étnica, exterminio de millones de judíos, gitanos, eslavos y otros considerados infrahumanos en tiempos del nazismo, justificación de la esclavitud etc.) debería ser una idea absolutamente reprobable.

Pero, más de 100 años de desarrollo de la genética como ciencia, han demostrado (con absoluta independencia de cualquier razón ética) que se trata de una idea total y absolutamente falsa.

Por eso sorprende tanto que el President Torra (siguiendo una senda por la que otros muchos como Heribert Barrera, Jordi Pujol o el propio Oriol Junqueras ya se habían aventurado) se empeñe en justificar que los catalanes son genéticamente diferentes de los españoles y, por supuesto, superiores.



Las incontables perlas del “pensamiento” de Torra, en este sentido, se pueden agrupar a grandes rasgos en tres grandes categorías: la primera justificando que la inferioridad de los españoles se debe a fallos en su ADN (por ejemplo, “los cruces con la raza del español fueron aumentando y aumentando hasta llegar a mutar el ADN de los autóctonos”; “hay algo Freudiano entre esas bestias, o un pequeño bache en su cadena de ADN ¡Pobres individuos!”), la segunda justificando la inferioridad de los españoles por ser atrasados pueblos del sur en contraposición a los más desarrollados pueblos del norte (por ejemplo, “aquí hay gente que ha dicho basta… gente que se ha olvidado de mirar al sur y vuelve a mirar al norte, donde la gente es limpia, noble, libre y culta”), y la tercera justificando el nacionalismo supremacista catalán como algo que está en los genes (por ejemplo, “si somos catalanes es que no podemos ser otra cosa… está en nuestro ADN”).

Pero, tal vez, no debiera sorprendernos: el profesor Juan Francisco Fuentes, catedrático de historia contemporánea en la UCM y Visiting Senior Fellow en el IDEAS Center de la London School of Economy, ha analizado en detalle cómo el separatismo catalán propuso a Adolf Hitler una colaboración intensa, basada en que la Gran Alemania y la Gran Cataluña eran muy similares y perseguían objetivos comunes. 

Para convencer al Führer aportaron, sin el menor rubor, un amplio dossier (que sobrevivió a la guerra), titulado “Fonaments cientifics del racismo”. Ni más ni menos. Lo peor es que, incluso cuando la historia ha permitido valorar la destructiva perversidad del catastrófico nacionalismo nazi, las opiniones que el señor Torra ha escrito sobre los españoles, siguen ajustándose perfectamente al concepto nazi del infra-hombre.

Por más que uno se devane los sesos no resulta fácil pensar como, a día de hoy, alguien puede mantener los argumentos de Torra, tan falaces a nivel científico, como reprobables a nivel ético.

Todos somos del Sur

En rigor, todos los seres humanos de nuestra especie somos un pueblo “del sur”: nuestra especie se originó en África y allí vivió buena parte de su historia. No hace mucho tiempo, evolutivamente hablando, un pequeño número de individuos abandonó África. Somos sus descendientes. Y como eran muy pocos, todos nosotros, que descendemos de ellos, somos genéticamente muy parecidos.

La evolución nos convirtió en primates visuales especialmente adaptados para reconocer pequeñas diferencias morfológicas entre nosotros mismos. No tenemos problemas para distinguir entre negros, chinos o nórdicos, ni siquiera entre nuestros hermanos (que tienen la mitad de sus genes idéntica a nosotros). Es más, somos capaces de distinguir a los hermanos gemelos (cuyo ADN es totalmente idéntico). Por el contrario, las ovejas de un rebaño nos parecen todas iguales. Sin embargo, un análisis de nuestros ADNs demuestra que los humanos (seamos de donde seamos) somos todos muy parecidos. Por el contrario, las ovejas, que nosotros vemos todas iguales, son bastante más diferentes.



En las primeras lecciones de genética un estudiante aprende una cuestión elemental: tenemos un padre y una madre (y recibimos la mitad de nuestros genes de cada uno de ellos), 4 abuelos (y recibimos la cuarta parte de los genes de cada uno de ellos), 8 bisabuelos, 16 tatarabuelos y así sucesivamente. Resulta evidente que el número de ancestros crece muy rápidamente (en una notación matemática el número de ancestros que tenemos es 2 elevado a la n, siendo n el número de generaciones antes de nosotros).

Esto nos permite echar cuentas: en los tiempos de Colón el señor Torra (o cualquiera de nosotros) tenía 33554432 ancestros; en los de Julio Cesar tenía un número bestial de ancestros (un 1 seguido de 30 ceros). Pero en tiempos de Colón sin duda no había más de 30 millones de catalanes. Y jamás hubo un número de seres humanos tan grande como el número de ancestros que uno debería tener en tiempos de Julio Cesar.

Como no había tantos seres humanos, alguno de nuestros ancestros fue también ancestro de quien nos está leyendo: encantado de conocerte, primo lejano que nos estás leyendo. Pero también Quim Torra es un primo más o menos cercano mío (qué se le va a hacer, la familia no se escoge). Después de los tiempos de Colón nosotros tuvimos ancestros catalanes y el señor Torra ancestros del sur. Por suerte para él los pueblos del sur -sus ancestros- no tienen nada malo en el ADN, ni nuestros ancestros catalanes nos hicieron una sola pizca mejor, ni peor, (genéticamente hablando).

No hay diferencias genéticas entre catalanes y españoles

Otra de las cosa elementales que aprende un estudiante de genética en sus primeros días es la heterosis: los individuos genéticamente más mezclados “heterozigotos” casi siempre son más resistentes que las “razas puras”. Hay un ejemplo icónico para explicarlo. En África, donde la malaria es endémica (la malaria es probablemente la enfermedad que ha afectado a más seres humanos en la historia), los europeos se contagiaban fácilmente. 

Por el contrario, algunas de las poblaciones de la zona no se contagiaban; sin embargo padecían una forma de anemia (la falcemia) bastante incapacitante. Los mulatos, descendientes de un europeo y un nativo falcémico, son a la vez resistentes a la malaria y no padecen la falcemia. Hay miles de casos de heterosis (y en buena parte el éxito de nuestra agricultura y ganadería se debe al vigor de estas mezclas).

Así que el señor Torra no debería preocuparse. Si supiese genética sabría que no hay diferencias genéticas entre catalanes y españoles. Y en el caso de que las hubiese, lo mejor para los catalanes (y para los españoles) sería mezclarse cuanto más mejor.

Indudablemente, como catedráticos de genética nos preocupa que nosotros y nuestros colegas lo hayamos hecho tan mal a nivel docente que todavía haya individuos tan ignorantes como el President Torra.

En nuestro descargo, queda pensar que la gran mayoría de los seres humanos más inteligentes, cultos y sensibles fueron profundamente antinacionalistas. Albert Einstein, sin duda el icono del ser humano más inteligente, dedicó buena parte de sus esfuerzos a combatir el nacionalismo, que consideraba una idea perversa y anticuada. Frente a convencidos (y comprometidos) antinacionalistas de la talla de un Einstein, los teóricos del nacionalismo -pensemos en Torra o en Hitler- no parecen haber contribuido tan seriamente al avance del conocimiento.



Recientemente se ha publicado en PNAS (una de las mejores y más serias revistas científicas del mundo) un artículo, cuanto menos inquietante: las personas de ideología nacionalista muestran mucha menos flexibilidad mental (dejémoslo simplemente en eso) que las de ideologías no nacionalistas. Por suerte para todos, esa falta de flexibilidad no está en los genes. Nada que no tenga arreglo poniendo a funcionar la cabeza en vez de las vísceras.


junio 11, 2018

(*) Eduardo Costas y Victoria Lopez Rodas, editores del blog Polvo de Estrellas de Tendencias21, son Catedráticos de Genética de la Universidad Complutense de Madrid.
https://www.tendencias21.net/La-ideologia-del-nacionalismo-catalan-tiene-una-sombra_a44593.html

5 Encuentros con Aliens