El último informe Fulford nos revelaba que, aparte de sus fuentes directas procedentes de los servicios secretos, lee a Sorcha Faal, Tom Henegan, Rusia Today o debkafile: vamos, las mismas fuentes que esta misma página.
También coincidimos en que la revelación de información (Wikileaks) y ataques informáticos (Annonymus) están siendo coordinados por una facción disidente (los buenos) desde dentro del sistema.
Poco nuevo, salvo la revelación de que Goldman Sachs está detrás del colapso de la economía de Corea del Sur y que se tienen controlados los depósitos de oro que han de traer el nuevo sistema monetario. Guerras de divisas en aquella parte del Planeta, con los Rockefeller y los Rothschild intentando salvar sus fortunas comprando todo el oro que pueden, en previsión de lo que ha de venir.
Fulford enmarca (1) los cables sobre Kisinger que Wikileaks ha publicado (probablemente, lo más interesante hasta la fecha del proyecto de Asange) en la misma dirección que (2) la publicación de una lista de decenas de miles de defraudadores de impuestos cuyas fortunas suman 32.000.000 millones de dólares, y (3) los últimos ataques de Annonymus contra los sistemas informáticos de Israel revelando los nombres de 30.000 AGENTES DEL MOSSAD, que habrían sido enviados a las autoridades pertinentes.
Estos tres golpes sí que nos sitúan en la cúspide del castillo de los detentadores del poder en el Planeta pues, sin duda alguna:
1-Henry Kisinger es una de las cabezas pensantes de todo este conglomerado
2-A través de esas listas se va a tocar de lleno a las familias reinantes en el Planeta y sus capataces/ejecutores.
3-Los 30.000 agentes de El Mossad son los responsables últimos, no sólo del terrorismo, sino del tráfico de drogas, de niños y de blancas. Es decir, de todos los negocios sucios del Planeta. Una acción contundente y sincronizada de todas las policías del mundo sería el Jaque mate final.
En una entrevista con un “caballero blanco” que escuché hace semanas, y que hablaba de la preparación del nuevo sistema monetario basado en oro (que se estaría colocando en diferentes lugares de Estados Unidos mediante 16.000 camiones), se decía que, cuando suene el momento, se procederá a la detención de 160.000 personas en todo el mundo. Si sumamos la lista de los principales defraudadores reseñada y los agente de El Mossad, nos cuadran las cuentas.
Actualmente, los grandes capitales están en pánico, reenviando sus fortunas de una paraíso fiscal a otro, intentando saber en dónde estará seguro su dinero.
Es posible que, en ninguno…
Fuente: http://www.rafapal.com/?p=20879
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