El yuan de China cayó frente al dólar el miércoles por primera vez en 11 meses, en lo que algunos expertos señalan es una maniobra del Banco Central chino que pone en riesgo miles de millones de dólares en medio de una desaceleración internacional.
El yuan se situó el miércoles por debajo de 6,20 unidades por dólar por primera vez desde abril de 2013, en momentos en que aumentan las preocupaciones sobre la economía, china y mundial, informa el portal financiero The Bussiness Insider.
“Observamos que hay riesgo de una mayor debilidad del yuan a corto plazo, pero no esperamos que se prolongue más allá del segundo trimestre. No está en los intereses del PBOC [Banco Central de China] tener una depreciación sostenida de la moneda, ya que esto aumentará los riesgos para la estabilidad financiera”, señalaron los economistas del banco ANZ (Banco de Australia y Nueva Zelanda) en un comunicado.
Otros analistas coincidieron en que permitir que el yuan se deprecie demasiado y demasiado rápido solo aumentaría la tensión en las empresas chinas y en la economía en general.
El yuan se había apreciado más de un 30% desde que en 2005 China pusiera fin a una década de vinculación de su divisa al dólar estadounidense. Tras marcar un máximo histórico en enero, la moneda china se ha depreciado ahora cerca de un 2,2%, atrayendo a un número cada vez mayor de los inversores internacionales, grandes y pequeños, muchos de los cuales han llegado a verlo como una apuesta segura.
Los expertos financieros esperan que la moneda vuelva a una tendencia alcista modesta en el segundo semestre, pero aun así terminará el año debilitada.
La reciente caída del yuan es ampliamente vista como un movimiento dirigido por el Banco Central chino para castigar a los especuladores, y coincide con la compra de oro por China en volúmenes récord, lo que podría convertir al yuan en una nueva divisa de reserva internacional dentro de unos pocos años.
Miles de millones de dólares en juego
La caída en el tipo de cambio hasta cerca de 6,20 por dólar, el nivel más bajo en más de 11 meses, está ejerciendo una fuerte presión sobre múltiples productos estructurados (que ofrecen al inversor la posibilidad de beneficiarse de la tendencia alcista o bajista —según la estructura elegida— de los mercados bursátiles) que fueron vendidos originalmente cuando el tipo de cambio del yuan era superior, señalando el riesgo de un reventón de la curva de volatilidad a corto plazo.
Más de 300 millones de dólares de estos productos estructurados se han vendido desde 2013 y la caída del yuan ha elevado las posibilidades de que algunos no puedan ser pagados, añadiendo otro factor de desestabilización en los mercados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario