La fascinación que ejerce Marte va más allá de las películas de platillos voladores e invasiones extraterrestres. Hace como treinta años una nave espacial tomó …
La fascinación que ejerce Marte va más allá de las películas de platillos voladores e invasiones extraterrestres.
Hace como treinta años una nave espacial tomó la foto de una montaña marciana la cual, debido a las sombras que proyectaba la luz solar, tenía cierto parecido con la Esfinge de Egipto. Inmediatamente los amantes de los Ovnis y la Teoría de la Conspiración estallaron con toda clase de conjeturas, las cuales llegaron hasta la “detección” de ciudades en Marte.
La evidencia científica demostró que nada de eso era cierto.
Hace menos de una semana un pequeño vehículo que explora la superficie de Marte envió una foto en la que aparece un fuerte brillo; de nuevo surgieron teorías extraordinarias que quizá darán paso a películas y a libros de quienes se aprovechan económicamente de la curiosidad de los incautos.
La intención de este artículo es concentrarme en el interés que la posible existencia de vida extraterrestre despierta en la gente.
¿Por qué es tan importante?
¿Queremos saber si existió vida inteligente y, sobre todo, qué pasó con ella?
¿Se auto destruyeron en una guerra estúpida? ¿Cambiaron el clima del planeta hasta que terminaron por hacerlo inhabitable?
Realmente lo que queremos saber es si nos puede suceder lo mismo.
Además de todo eso, hay algunos que buscan ahí respuesta a las eternas preguntas: ¿Quiénes somos, de dónde venimos, porqué estamos aquí?
Para todas estas preguntas existe una explicación mágica (hágase), aceptada por muchos con fe ciega, pero que no muy válida en esta era, en que se puede tener respuestas científicas a casi todas las interrogantes.
Creo que en un futuro no muy lejano se sabrá si hubo alguna forma de vida en Marte, la información que los vehículos (rover) Oppotunity y Spirit están enviando puede ser decisiva. Pero, inclusive antes de saber a ciencia cierta si hubo vida y qué ocurrió con ella, Marte nos envía mensajes que debemos saber interpretar y aprovechar, de ello puede depender la existencia de la humanidad.
Marte carece de condiciones que permitan vida como la nuestra. Marte es un planeta muerto.
Nosotros, afortunadamente, todavía tenemos un planeta, una casa que permite y protege nuestra clase de vida. Tenemos mares con agua abundante y una atmósfera bellísima que actúa como un escudo protector.
La Tierra nos ofrece el privilegio de la vida; ese es el mensaje de vida de Marte, un planeta muerto.
Lo que hagamos hoy en nuestro diario vivir determinará lo que la Tierra será… De eso, de cada uno de nosotros, depende no sólo el futuro de la humanidad, pero también de la vida en la Tierra.
Quemamos combustible a veces llegando al derroche, sin pensar que envenenamos esa atmósfera. Arrojamos químicos y basura a los mares, sin piedad para los micro organismos que ahí habitan y de los cuales depende toda la cadena alimenticia, olvidando que nosotros estamos ubicados en la parte de arriba de ella.
Jugamos con armas nucleares capaces de eliminarnos a todos en un instante. Quizá, como somos tantos en el planeta, pensamos que los culpables “son los otros”, cuando depende de cada uno de los siete mil y pico de millones conservarlo habitable.
Cada uno de nosotros es responsable y será responsable de lo que ocurra con la vida.
Es triste pensar que, en un futuro -quizá no muy lejano- naves de otras civilizaciones exploren nuestro yelmo planeta y traten de averiguar qué sucedió con nosotros, si alguna vez hubo vida y qué terminó con ella.
La respuesta ya la sabemos… si todo termina será culpa suya y mía, de nadie más.
Fuente: Sabiens.net
laprensa.hn/inicio/641614-96/mensaje-de-vida-desde-planeta-muerto
No hay comentarios:
Publicar un comentario